La bronca de Snape había sido monumental aunque también le prohibió a Moody que se acercase a ninguno de sus alumnos y por lo visto Dumbledore no estaba conforme con que me hubiese convertido en hurón. ¡Hurón! A mí, al alumno más popular y con mejores notas de Slytherin. Era insultante. Y para colmo me había perdido la hora de la cena y mi estómago protestaba por eso.
En esto estaba pensando cuando al girar una esquina choqué con alguien.
—Cuidado, no estoy para bromas ahora —dije con cansancio.
—Lo siento Malfoy, con la caja y los libros no te he visto —respondió una voz, pero no una cualquiera, su voz. Me di cuenta de que era Hermione sin mirarla siquiera. Y mi corazón empezó a palpitar como loco.
—Descuida, Granger. Es solo que con la bromita de Moody me duele todo.
Ella me miró sorprendida, supongo que esperaba que yo fuese desagradable con ella.
—Ya, el profesor Moddy se ha pasado, lo que le ibas a hacer a Harry no estaba bien, pero no era para tanto. Piensa que eres un hurón precioso —parecía afectada por lo de Moddy y sonreía de forma conciliadora a pesar de mi ataque traicionero. No sabía por qué pasaba esto, pero compensaba mi humillante actuación de antes.
—Hombre claro, soy un hurón precioso porque soy un humano espectacular —repliqué sonriente. Ella se echó a reír ante mi orgullo. Su risa me dejó helado. Estaba haciendo que se riese. Instintivamente sonreí más. Me di cuenta de que llevaba una caja.
—¿Qué llevas en la caja, Her... Granger? —Merlín, casi la llamé por su nombre—. Me puse de los nervios.
Ella me miró arqueando una ceja y con mucha incredulidad. Se borró su sonrisa
—Malfoy, ¿qué pretendes?
—Nada, Granger, nos hemos chocado y tú llevas una caja, motivo por el cual nos hemos chocado, solo quiero ser educado. ¿No preferirás que te llame Sangre Sucia? —mi respuesta la cogió por sorpresa pero se repuso rápidamente y me contestó.
—No, claramente no quiero que me llames Sangre Sucia.
—No pienses que a mí me gusta llamártelo. ¿Y bien? ¿Qué hay en la caja? —ella se quedó perpleja con mi replicación. Creo que pensaba que la odiaba—. ¡Granger! Respóndeme por favor.
—Eh, sí, disculpa Malfoy pero creía que me odiabas. No sabía... —lo sabía, sabía que ella creía que yo la odiaba.
—Pues ya ves que no. Pero no quiero hablar de eso. ¿Me vas a decir que llevas en la caja?
—Sí, sí. Perdona. Son insignias, mira —abrió la tapa y me mostró el contenido. Dentro había muchas insignias de colores. En todas ponía "P.E.D.D.O."
—¿"Peddo"? —leí desconcertado cogiendo una insignia—. ¿Qué es?
—No es "peddo", es pe, e, de, de, o: "Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros".
Me quedé un poco sorprendido, sabía que le gustaban todas las criaturas pero de ahí a liberar a los elfos. Esto me recordaba a Dobby. Ese elfo era mío y le tenía cariño pero claro, tenía que llegar San Potter a liberarlo. Aunque realmente mi padre le trataba muy mal—. Esto es de tú invención ¿verdad?
—Sí, acabo de fundarla —me contestó con énfasis. Y empezó a contarme en qué consistía.
—¿Cuántos miembros tiene?
—Pues de momento uno, yo. Y en cuanto convenza a Ron y a Harry seremos tres.
—¿Conseguirás que ellos se afilien?
—Espero que sí. Necesito algo de fuerza. Y no creo que tú te quieras afiliar —me miró entre divertida y desafiante.
Podría afiliarme, quizá así ella dejase de odiarme. Pero qué estaba diciendo. Si iba con esa chapa por ahí y ella también me matarían mis padres y mis amigos.
—Podría hacerlo, pero no creo que a tus amigos les haga gracia que yo esté en el mismo grupo que ellos, por no mencionar que mi padre es salvajemente despectivo con los estatus de sangre y si sabe que estoy en el mismo grupo que tú, que además eres amiga de Potter, me partirá la cabeza —fui todo lo sincero que podía.
—Oh, no sabía... Ya, bueno. Es cierto que Ron y Harry no te tienen mucho aprecio.
—Ya, lo sé, en muchos aspectos es mutuo. Pero sí que me podrías dar una insignia de esas y apuntarme a tu lista de afiliados mentalmente. Cuando el colegio se acabe y con un poco de suerte los prejuicios también, podremos oficializar mi afiliación. Eso sí, supongo que habrá que pagar, dime cuánto y te doy lo que sea. ¿Qué te parece? —su boca se había abierto tanto que parecía que su mandíbula va a tocar el suelo.
—Eh, yo... Malfoy, no te reconozco. La conversión hurón te ha venido bien. Vale... Me parece bien, son dos Sickles. Toma, guárdala bien —me dio la chapa y me miró con una cálida sonrisa que no dudé en devolver.
—Gracias Granger —le di los dos Sickles que llevaba en el bolsillo de la túnica.
—No, gracias a ti... Bueno, me tengo que ir, ya es tarde. No te he visto en el Gran Comedor así que supongo que no habrás cenado. Toma, la iba a guardar para un escreguto pero creo que mejor te la doy a ti.
Sacó de su bolsillo una manzana verde y me la dio. No sabía si comérmela o guardarla para siempre. Hermione dándome una manzana y encima de mis favoritas. Además si sabía que no había ido al Gran Comedor es porque me prestaba cierta atención, mi interior chillaba de emoción. Al dármelo nuestros dedos se tocaron y me sentí desfallecer.
—Gracias, Granger. Nos vemos.
Ella me esquivó contrariada y se marchó. Me quedé mirando mi mano con la manzana. Mi estómago rugió otra vez y mordí la manzana. Me di la vuelta y la vi marcharse sonriente tocándose la mano. Estaba pletórico, cogí la chapa, me la guardé en un bolsillo y me dirigí a mi sala común.
Cuando estaba llegando cambié mi expresión de alegría y embobamiento a la de arrogancia habitual. Solo faltaba que Nott confirmase sus sospechas.Al entrar, Theo, Blaise, Crabbe y Goyle que estaban jugando a los naipes explosivos se giraron y me miraron.
—Hola Draco, ¿qué tal con Snape? —me preguntó Theo.
—La bronca de siempre. Pero también le ha dicho a Moddy que no se nos acerque —terminé de comerme la manzana y tiré el centro a un plato que había en la mesa—. Bueno, no sé qué hacéis aquí tan tarde, pero yo me voy a acostar. Me duele todo.
—Vale, buenas noches huroncito —me dijo Blaise y el resto se ríeron. Miré a Zabiny fríamente
—Pues que sepas que soy un hurón precioso —me di media vuelta y me fui.
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El sueño repetitivo
DiversosLa historia narra, desde el punto de vista de Draco, sus pensamientos desde cuarto curso. IMPORTANTE: se deben haber leído TODOS los libros antes, no sólo por los spoilers, sino porque la historia no narra todo lo que pasó en el libro, si no se cono...