Especial

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Este es un especial corto por haber llegado al 10k de lecturas. Está ubicado antes de que comenzara la historia, tomenlo como un flashback.

Natalia estaba sentada en su pupitre, sus compañeros hablaban enérgicamente entre ellos. La mayoría se conocía de cursos anteriores o ya habían entablado amistad los primeros días, pero ella no conocía a nadie, y para ser honestos, de haber conocido a alguien tampoco habrían hablado mucho. No era una persona de muchas palabras con sus compañeros.

Se había perdido en su cuaderno de dibujos. Observaba la hoja en blanco, no tenía nada en mente para dibujar, tampoco quería dejar el cuaderno sin haber hecho nada.

Entonces entró al aula un chico, ella lo recordaba, era el chico a quien Clove Burgeois le había puesto goma de mascar en el asiento. Parecía alguien agradable, no entendía porqué a Burgeois le podía disgustar tanto.

Por un descuido de sus dedos acabó tirando al suelo su lápiz, el objeto rodó al encuentro del chico que acababa de entrar. Con cuidado se agachó a recogerlo y se lo tendió a la pelirroja.

—Hola. ¿Es tuyo?

Algo en el interior de Natalia hizo click. Quizá había sido la sonrisa blanca y desordenada que tenía el joven, tal vez fue su actitud amable o sus hermosos ojos azules. Pero Natalia más temprano que tarde se encontró dibujando al joven que se sentaba frente a ella. Día tras día se sorprendía a si misma mirando totalmente embelesada al chico.
Físicamente hablando, le parecía perfecto.

Casi todos los días apartaba una hoja de su block y se ponía a trazar líneas y curvas que con mucha dedicación terminaban formando el rostro sonriente de el chico de ojos azules.

Mientras ella dibujaba no se daba cuenta, pero hacía muchos gestos: al dibujar su cabello se mordía el labio inferior, al dibujar sus ojos fruncía el ceño, al dibujar su sonrisa no podía evitar devolver la sonrisa con ternura al dibujo. Cómo si la imagen le sonriera únicamente a ella. El primero en percatarse de esta fijación fue un chico de anteojos que sorprendió a la pelirroja dibujando al chico en el descanso. El joven Moreno primero miró el dibujo, luego a su amigo y después a Natalia.

—Se llama Marín— sentenció el Moreno al suponer arriesgadamente que no lo sabía. Efectivamente, ella no lo sabía.

Marín, un nombre hermoso.

—Te han dicho que cuando te sonrojas pareces un tomate?— fué lo último que el joven dijo antes de ir a sentarse al lado de Marín.

Sonrojada? Natalia tomó rápidamente su teléfono para intentar ver su rostro. Efectivamente, estaba colorada hasta las orejas, sus mejillas pecosas hacían juego con su cabello. Devolvió su atención al chico de ojos azules y para su infortunio descubrió que la estaba mirando. Sin duda la había visto sonrojada y ahora el chico esbozaba una leve sonrisa. Pudo alcanzar a oír un par de palabras que Marín le dedicaba al chico de anteojos.

—... Muy linda, no crees?

En ese momento deseaba que la tierra se la tragara. Alcanzó a escuchar otras palabras, esta vez pronunciadas por el Moreno.

—... Cómo un Tomatito al sol.

Tomate, el nacimiento de un apodo.

Esa misma tarde, al volver del descanso, se encontraba dibujando a Marín, como ya le era manía, el joven de cabello oscuro azulado estaba de perfil conversando con su compañero.
De pronto un tono rojo captó la atención de Marín, giró sus ojos hacia atrás y se encontró con unos grandes ojos turquesas observándole. Con una sonrisa en el rostro saludó con la mano a la chica que lo observaba.

Natalia se estaba derritiendo, deseaba devolver el saludo, pero lo único que su cuerpo fué capaz de hacer en respuesta fue sonreír tontamente mientras el color se apoderaba de su rostro.

Era oficial, le gustaba ese chico.

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Hace tiempo quería hacer este capítulo, y más que nada lo hice porque quiero hacerles una pregunta que decidirá el rumbo final de la historia.

¿Con quién quieren que se quede Marín?

Por lo demás, muchísimas gracias por apoyar esta historia hasta sus 10k de lecturas. Aún conservo la captura de cómo comenzó la historia, con un nombre y un concepto muy diferente

 Aún conservo la captura de cómo comenzó la historia, con un nombre y un concepto muy diferente

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62 lecturas. 62 hermosas lecturas de personas increíbles que creyeron y apoyaron lo que estaba creando. Poco a poco se fueron uniendo más. Hoy en día con tantos capítulos llegué a juntar 10k de lecturas. Y me honro de decir que vienen de lectores fieles y maravillosos que me siguieron capítulo tras capítulo, que aceptaron el cambio de la historia y comentaban sus opiniones. Nunca me cansaré de decirlo:
Mi parte favorita de escribir esta historia es leerlos a ustedes.

Quiero dar un agradecimiento muy pero muy especial a mi mejor amiga, mi hermana de otra madre. La persona que me convenció de escribir esta historia. Sin ella no existiría Hero, ni siquiera sus bases. Un aplauso muy fuerte para: Marla7u7_

En este momento no puede entrar a su cuenta, aún así es mi obligación y mi honor darle éste agradecimiento.

Finalmente gracias a todos ustedes que hacen ésta historia. No me los merezco.

Recuerden la pregunta del día:

¿Con quién quieren que se quede Marín?

#tomate.  O.   #gatita.

Los amo matenme bay

Hero. Miraculous Lordbug (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora