10: ¿No era una broma?

55 13 29
                                    


¿No era una broma?

Me dormí minutos después de acostarme. Desperté cuando la claridad empezó a molestarme, así que supongo que ya amaneció.

Salí, y me encontré con Caleb con su torso desnudo y pequeñas gotas de agua deslizarse desde su cabello mojado a su barbilla, y bajando. Me miró con la camiseta en su mano.

—A veces pienso que eres una morbosa fiera— y se puso la camiseta.

—Idiota— dije revoleando los ojos y dejando de mirarlo.
Y solo lo escuché reír, si pudiera resolver todo esto de las pesadillas sola, lo haría.

—Yo daré una vuelta, cuando regrese espero que estés lista— lo miré y él estaba mirándome —Y arréglate el cabello, no parecen trenzas, parece un nido.

—Ya lárgate— dije mientras caminaba hacia el río con la ropa que me pondría en mis manos.

No miré hacia atrás, así que creo que se fué, y espero que lo haya hecho.

°°°°°

Me puse a comer unas galletas que encontré en mi mochila. Mientras comía escuché ruidos. Y pude ver a Caleb acercarse con alguien.

Una chica.

—Y aquí es donde pasamos la noche— dijo Caleb —Y ella es la persona con la que ando.

—¿Es tu novia?— dijo la chica.

¿Acaso está loca? ¿es que no me están viendo mirándolos o qué?

—Claro que no— dijo después de reír, dejé de mirarlos y mordí nuevamente la galleta.

—Kiara, ella es Joris, la encontré en el bosque.

¿Joris? Ese nombre me suena, pero no me llega.

Los miré, y sonreí de labios cerrados, tengo la boca llena de galletas.

—¿Y cómo es que te perdiste en el bosque?— le pregunté después de tragar.

Ella sonrió desviando su mirada a Caleb.

—¿Y cómo encontraron este lugar?— le preguntó a Caleb.

Ella... Ella acaba de ignorarme... No la conozco y ya no me cae bien.

—Pues, en realidad solo llegamos aquí después de salir corriendo de un pueblo, que por cierto era muy buena la comida, pero las personas asustaban.

Ellos siguieron hablando sentados en la manta en que estaba frente a la fogata anoche. Y ella estaba sentada en mi lado.

Mientras seguía comiendo mi galleta recordé lo que dijo Caleb, la comida del pueblo era buena... Comimos en una cafetería... ¡claro!  El nombre de esa cafetería era Joris, sabía que me sonaba el nombre.

Me acerqué a ellos y me senté en otra manta, quedando frente a ellos, los cuales solo se quedaron mirándome.

—Entonces, Joris— empecé a decir —¿Cómo fue que te perdiste en el bosque, si hay una cafetería en el pueblo con tu nombre?

Caleb la miró con el ceño fruncido.

—Claro, "De Joris Café". Así se llama la cafetería en la que fuimos. ¿Es tuya esa cafetería?

Ella nos miró a ambos, suspiró y asintió.

—Así es, esa cafetería está a mi nombre, pero casi todas las personas de ese pueblo están infectadas y yo no puedo sanarlas, y desde que te ví supe que podías ayudar.

—¿En serio? Dame una razón para que te ayudemos— le dije mirándola fijamente.

—Es el pueblo en el que he vivido toda mi vida, por favor— se veía desesperada, al parecer realmente le importaba ese pueblo.

—Claro que te ayudaremos, después de todo esto es tu responsabilidad, ¿verdad fiera?— dijo Caleb mirándome.

Rayos, lo había olvidado.

—Muchas gracias, ¿Fiera?

—Ignóralo Joris, ignóralo— me levanté de la manta —Recogemos y nos vamos.

°°°°°

Oh por Dios, esto no puede ser cierto. Aquí están todas las personas que parecen zombies.

—Joris yo... En realidad no soy yo la que resuelve todo esto.

—¿En serio? ¿y quién es?

—Es un hada— dijo Caleb.

—Entonces soy yo— dijo Joris

—¿Eres un hada?— hablamos Caleb y yo al mismo tiempo.

—Si, lo soy, pero no sé como resolver nada.

—¿No era una broma?— dice Caleb mirándome.

Wao... Estoy frente a un hada que parece humana.

—Debes crear una poción, la cual debe caer en todos al mismo tiempo, y así quedarán sanos— le dije.

—¿Y cómo haremos eso?— dice Caleb después de poner las mochilas debajo de los árboles de la otra vez —¿Con lluvia?

—Esa es una buena opción, ¿pero cómo haremos que llueva?— Joris miraba a Caleb, pero él me miraba a mí, sé lo que está pensando.

—Ni lo pienses— le dije antes de que hable.

—Eres la única que puede hacerlo, y lo sabes. Además, Joris puede transforma el agua en la poción rara esa.

Rayos, me senté debajo del árbol y cerré los ojos, solo debo pensar en lluvia, debo hacer que llueva... Pensa en lluvia Kiara, mucha lluvia. Abrí los ojos, nada.

—No puedo hacerlo— dije.

Caleb agarró su cabeza con ambas manos y despeinó su cabello, luego me miró.

—Ni siquiera lo has intentado— dijo de una manera fría.

—Bien— cerré los ojos nuevamente, si esto era parte de mis sueños, podía hacer que llueva, piensa en nubes Kiara, muchas nubes blancas que cubren el sol, concéntrate, ahora esas nubes se ponen oscuras, muy oscuras y empieza a llover, empieza a llover mucho. Abrí los ojos y Caleb me sonrió.

—Lo lograste fiera... Ahora no pierdas la concentración, necesitamos que siga lloviendo.

Já, lo hice. No estaba lloviendo a cántaros, pero estaba lloviendo.

—Bien, ahora es mi turno— al Joris decir eso, hizo unos movimientos con las manos, dió una vuelta y salió un destello de luz, se había transformado en un hada, con alas azul con morado, se veían muy bonitas, y brillaban.

Las hadas existen.

~~~~~~~~~~~~~~

Holaa chocolates... 
Lamento la tardanza, pero volví con un capítulo largo (en comparación a los que escribo siempre) gracias por esperar este capítulo.

Gracias por leer. 😘😊

Superando PesadillasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora