Pero, ¿Qué significaba eso exactamente? Quizás estaba exagerando, enamorarse es un término muy fuerte y de un nivel muchísimo más alto. Lo que sentía era como la chispa de aquel sentimiento, algo suave y lindo, adoraba la personalidad de ella y no podía mentir que su físico le atraía, sentía el corazón acelerado incluso cuando sólo estaba sentada a su lado en clases, se paraba varias veces al baño a lavarse las manos, puesto que sudaba demasiado para su tolerancia e inconscientemente siempre intentaba impresionarla con cosas pequeñas, cumplidos ingenuos y elogios dulces que, aunque causaban una reacción extraña en la rubia, Lapis seguía diciéndolos.
''¿Y por qué tanta amabilidad?'', fue el comentario que dio la joven al ver como Lapis movía la silla hacia atrás para que pudiese sentarse, Lapis tenía el rostro ruborizado y una expresión de nervios, sin embargo forzó una actitud de seguridad.
– ¿Acaso no puedo? ¿Es muy malo? –
– ¡No! No para nada, pero no es algo usual, bueno... desde hace una semana repites este comportamiento, pero me parece considerado. Gracias. – Y mientras hablaba a Lapis se le ocurrió la gran idea, una manera sencilla de justificar sus acciones.
– Estoy de cumpleaños en unos días, el sábado y he estado de mejor humor por eso. –
Peridot sonrió y se sentó en su puesto, obviamente le tenía preparada una sorpresa, aunque se había empeñado más en intentar descifrar el cambio de Lapis, este último tiempo su cercanía se acrecentaba, cosas que antes solía hacer como fumar y beber un poco las dejaba de hacer, sólo porque ella reclamaba, cosa que no hacía antes.
Algunas veces tan afectuoso comportamiento le ponía incómoda y confusa, siendo Peridot una persona un poco fría para sus cosas, usualmente dañaba a las personas sin querer hacerlo, se sentía incómoda por el simple hecho de que no podía devolver tan lindos gestos, no era parte de su naturaleza y ya, no le agradaban comportamientos tan latosos, pero no podía molestarse con Lapis, era un poco imposible, no quería dañarla, no otra vez, debía aguantarse y tener paciencia con lo que hacía o podría costarle caro.
Oyó un crujido y un trozo de grafito le cayó en la nariz como si hubiese sido una bala a alta velocidad, instintivamente se cubrió la nariz y se quejó, Lapis miró con nervios e intentó ayudarla, mientras pedía perdón consecutivamente, Peridot se quitó las manos de la nariz y con el reflejo del celular intentaba ver si estaba muy mal, porque le ardía más de lo que debería, aparentemente sólo tenía un poco rojo, Lapis miró con terror y sacó una banda, Peridot le miró con un rostro serio, dando a entender que no era para tanto, aunque se viera como el Reno de Navidad no necesitaba un parche.
Lapis, devolvió la mirada a su mesa, tomó su lápiz con vergüenza e intentó sacar más mina, al lápiz no le quedaba ni un poco, revisó el estuche con acelero buscando por los mismos bolsillos una y otra vez, sin poder creer que ya no había más grafito, tuvo que dirigirse a Peridot nuevamente, tocó su hombro con suavidad y ella se giró.
– ¿Tienes un lápiz que me puedas prestar? –
Peridot no habló y sólo extendió un lápiz color azul, de tinta, no de grafito. Lapis sonrió, tomó el lápiz y susurró ''¿Azul? ¿En serio?'' Peridot rió por lo bajo y mencionó ''Es tu color'', Lapis se sintió halagada y prosiguió a escribir la materia.
Y mientras hacía trazos con el lápiz, formando letras y palabras, comenzó a cuestionarse los motivos por los que estaba escribiendo, cosa que no hacía un año atrás, sus calificaciones habían mejorado notablemente este año y con un poco de ilusión miró a su lado y suspiró, quizás lo hacía por ella, al igual que casi todos los cambios de este año, la última vez que fumó fue hace milenios, según su percepción.

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Hacked
ФанфикArrepentimiento y culpa, un conjunto de sentimientos agotador para la pobre e insensible Peridot, sabiendo que su víctima sufrió mucho más que ella, siempre se planteó si sus acciones llegarían a tener consecuencias peores que sólo sentimientos e in...