Mi nueva vida como hombre lobo.

Capítulo 14: Triste

—¿Dónde estoy? —Sentí una corriente de aire meterse debajo de mi ropa, me levanté de inmediato y me di cuenta de que estoy en el suelo, observe a mi alrededor y estoy en el mismo campo de flores, pero esta vez, la luna está oculta y aquella criatura está a cinco metros de distancia.

—¿Cómo te sientes? —Me preguntó con esa voz profunda y sombría.

—No muy bien—lo miré a sus "ojos" ya que, al verlo bien, no tiene un rostro visible.

—La luna muy pronto estará en su punto y es allí donde tendrás que abrir la puerta—una de las cosas que no me gusta, es que nunca me dice lo que quiero oír, me dice cosas absurdas las cuales no entiendo.

—Necesito que me digas lo que está pasando. Siento que estoy perdido y tu no me estas guiando por el camino que tengo que seguir—me mostró su sonrisa, toda escalofriante, con esos dientes largos y filosos como los de una serpiente, es muy inquietante.

—Pronto tendrás todas las respuestas en tus manos—sonreí sínicamente, sus juegos mentales son una mierda.

—Se acabó la conversación. ¿Me puedes hacer volver? —Quiero irme, si esa cosa no me va a dar las puertas, yo las buscaré.

—Te deseo suerte—esa cosa se alejó de mí y todo a mi alrededor comenzó a desvanecerse.

Miré el cielo y las nubes formaron la figura de un lobo majestuoso aullando al firmamento, el cual desapareció al yo caer en la nada.

🌚

Abrí los ojos lentamente y fue horrible, mi cuerpo me duele demasiado como si me hubiera golpeado con un bate repetidas veces, tanto así, que ni me puedo mover. Con bastante pesadez intente mover mi brazo, pero no puedo, me duele demasiado tanto así que tengo hasta ganas de llorar.

—¿Por qué me pasan estas cosas a mí? —Me pregunté un tanto molesto.

—Si me pusiera a enumerar tus malas acciones, la lista sería muy extensa—inmediatamente voltee a un lado y me encontré con la mirada de Josh, la cual luce cansada.

—¿Qué haces aquí? —Le pregunté al no entender nada.

Sin importarme el dolor que mi cuerpo pueda sentir, me levanté de la cama y comencé a mirar a todos lados para ver en dónde estoy y al darme cuenta de que es mi cuarto, me tranquilice, pero a pesar de eso, no sé qué hago aquí, lo último que recuerdo es que estaba con Joshua en el parque y ahora me desperté en mi cama.

—¿Cómo llegamos aquí? —Su mirada fue tensa y en ese preciso momento supe que algo malo había pasado.

Él se sentó en la cama de Daniel y su mirada se fue hacia la ventana, también miré hacia la ventana y me di cuenta de que todavía era de noche, miré el reloj digital que tenemos en la pared y son las cuatro de la mañana. Sentí la mirada inquietante de Joshua, me ve como si me tuviera algo de miedo, lo observe y me percate de que su camisa se encuentra rota, como si un animal se la hubiera desgarrado.

—Jeff, te transformaste—trague saliva, no espere transformarme tan pronto, faltaban dos días para que hubiera luna llena.

—Pero... pero eso es imposible. Faltan dos días para que haya luna llena y aparte yo siempre tengo el collar que me diste conmigo—fui a sacar el collar del bolsillo de mi pantalón, cuando me percate de algo.