Shout Again |Tristan Evans| TERMINADA.

Capítulo 8.

Partimos rumbo a su casa, andando en silencio, lo consideraba un silencio incomodo, pero no tenía el valor para romperlo.

No, no lo tenía, pero al parecer Tris si.

-Sam, no quiero perderte-Se detiene y se coloca delante mío, amarrándome de las dos manos, frunciendo el ceño preocupado.

-¿Qué te hace pensar que vas a perderme?-Una batalla de miradas se está creando y no quiero perderla.

-James-Susurra.

-Tris, he perdido a James, por estúpida e inocente… ¿Qué va a hacer James? Él y yo no tenemos nada…-Aclaro apenada. Empezaba a gustarme James, pero lo mandé todo a la mierda, y ahora me gusta más Tris de lo que pude llegar a imaginar. Tenía la oportunidad perfecta con James, pero lo mandé a freír, y ahora no tengo nada..

-Él y yo..Nada, olvídalo.-Sigue andando y me extraño. James y Tris ¿Qué? La intriga me mata por dentro y no hace ni dos minutos que ha dicho eso.

-¿Tu y él que? Ahora me dirás que hicisteis una apuesta, ¿Quién se llevara el beso de la virgen?-Río-Vamos Tris.

-No fue así, digamos qué, le prometí que por mucho que me gustaras, entre tu y yo no pasaría nada-Sonríe apenado. Inconscientemente--o no tanto--sonrío al escuchar sus palabras. Sonrío por última vez, dando por finalizada la conversación, al menos hasta llegar a su casa, por qué ahora estoy incómoda. Por el simple hecho de que ha confesado que le gusto.

Estamos apunto de llegar, pasamos por el parque que hay al lado de casa de Tris. Vuelve a cogerme de la mano y sonrío, sin saber bien por qué. Quizás esto era más fácil de lo que creía.

La penetrante mirada de James se cruza con la mía. Y el cuerpo se me congela. Esta ahí.

Está mirando como paseo “feliz” con Tris.

Mi respiración se agita, y quiero correr. Siento como la mano de Tris se tensa. Supongo que también le debe haber visto. Genial.

Tras echarnos una mirada de odio, agarra el Penny que esta vez lleva con él, y se va.

-Tris me haces daño-Me quejo al no dejar de sentir la presión que ejerce sobre mi mano.

-¡Dios!-Me mira-Lo siento-Suspira.

-Tranquilo-Logro responder.

Al fin llegamos a su casa, y una pregunta ronda por mi mente.

-Tris-Le llamo.

-¿Si?-Responde.

-¿Por qué no has ido a la Uni?-Pregunto confundida.

-Brad me dijo que no irías, pensé que teníamos que hablar, cuanto antes posible, así que no he ido porque quería hablar de… esto-Suspira-Además, en una semana, se acaban las clases.

-Hablemos entonces-Propongo. Y me sorprendo ante mi madurez para afrontar la situación.

-¿te gusta James?-Pregunta.

-No lo sé-Respondo susurrando.

-¿Tengo opciones?-Susurra cerca de mi oído para luego separarse a escasos centímetros y mirarme a los ojos. Quiero gritarle que sí, que las tiene y nadie se las va a quitar, pero no soy tan valiente.

-Supongo-Susurro y hundo mi cabeza en su pecho, evitando que vea como me sonrojo.

La mañana pasa, y estamos a punto de comer, la normalidad ha vuelto a medio aparecer, y me alegro por ello.

-Sam, ya esta la comida-Grita desde la cocina.

-Voy-Contesto.

Llego a la cocina y encuentro dos platitos de lasaña puestos en la mesa, y Tris detrás de la nevera, buscando quien sabe qué.