¿Tienes tiempo para mí? (En edición)

CAPITULO 18

-¿Cómo lo supiste?- Agregué un poco molesta.

-Un día los vi en un restaurante, pero él no se dio cuenta.

-¿Por qué no me lo dijiste cuando te lo pregunté en San Fernando?

-Porque no sabía cómo ibas a reaccionar y probablemente no me hubieras creído.

-¿Qué clase de excusa es esa?- Dije exasperada -Yo pensando que no querías que me tocara porque estabas celoso y resulta que solo era porque sabías que se acostaba con otra.

-Claro que estaba celoso y mucho más sabiendo lo que él te ocultaba.

-Mira quién habla de ocultar cosas, primero lo del auto y ahora esto ¿Cómo me pides que confíe en ti si haces cosas que no son para ganarse mi confianza? ¿En qué más me has mentido? A parte de esto y de decirme que te ibas a un viaje de negocios cuando en realidad te fuiste a descansar a San Fernando, ¿Enserio Melissa es sólo tu amiga? ¿O es igual de buena para mentir que tú? ¿Qué clase de retorcida relación tienen?

-Estás llevando esto al extremo, Melissa misma te lo dijo, si no nos crees puedes preguntarle a mi hermano e incluso a Alexa; si te oculté lo de Alex fue porque sabía el cariño que le tenías y no quería lastimarte, tuve muchas oportunidades de decirtelo, estuve apunto cuando los vi en la cocina besándose, a pesar de mi rabia y celos, no iba a ser yo quién te quitara la venda de los ojos, no iba a tener un enfrentamiento con él frente a ti porque sabía que te dolería, no soy así _______, estaba seguro que algún día tú lo sabrías.

-Qué sobreprotector resultaste- Exclamé cruzándome de brazos.

-Pues sí, así soy, si te engañé en lo del auto fue para estar más tiempo contigo a solas, lo del viaje de negocios no fue mentira del todo, solucioné unos asuntos en el hotel de San Fernando y me quedé más tiempo porque sabía que ibas a estar el fin de semana con Alex, quería tenerte cerca y ver cómo era tú relación con él.

-¿Osea que todo lo hiciste premeditado? Eres increíble y yo soy una tonta al seguir con esto.- Dije molesta y cerré la pantalla del portátil.

¿Qué clase de hombre era Abraham Mateo? ¿Qué era lo que verdaderamente quería de mi? Yo estaba enamorada de él como idiota y él sólo seguía con sus juegos tontos. Mientras tanto, sonó mi teléfono, el mismo número desconocido de siempre, no quería discutir más con él y lo apagué, necesitaba pensar y analizar lo que iba a hacer; confiar en él, que fácil es decirlo, ¿Pero cómo iba a hacerlo con esas actitudes?

Al otro día que llegué a la oficina tenía una página completa de mails de él, en el asunto decía "Perdóname" o "Léelo por favor", no tenía ánimos de leer ninguno, no estaba dispuesta a iniciar una relación a base de mentiras, si con Alex todo había iniciado bien y había terminado de esa manera, ¿Qué puedo esperar de algo que desde el principio está lleno de mentiras y engaños?
No quise pensar más en el asunto y me concentré al máximo en el trabajo, tenía miles de cosas que hacer y apenas iba a empezar la búsqueda de la persona que reemplazaría a Mónica.

Al otro día seguía igual, metida en el trabajo, ni siquiera salí a almorzar, lo bueno ya habían entrevistado a una chica para el empleo, ojalá la contrataran, se veía que era una buena persona.

En la tarde me encontraba concentrada leyendo un artículo para hacer sus respectivas correcciones cuando tocaron mi puerta, abrí y había un enorme oso blanco de peluche con una carta entre sus brazos, el sobre decía "Léeme por favor", tomé la carta y me senté en mi escritorio, una pequeña sonrisa se escapó entre mis labios, tomé el sobre y lo abrí.

"Tienes razón en pensar esas cosas sobre mí, no puedo pedir tú confianza cuando soy el primero que la traiciona, pero no tienes idea de lo mucho que te amo, estos sentimientos son más fuertes que yo, tanto así que me asustan, porque aún sin conocerte demasiado, te has metido hondo en mi corazón, no sé que sería de mi sí no estuvieras en mi vida, hace mucho rompí la tercera regla, mucho antes que las otras dos, eres lo más importante para mí y estoy dispuesto a hacer cualquier cosa para demostrártelo.