¿Me creerías si te dijera que hasta el chico más frío podría enamorarse? Porque yo no lo creía, toda mi vida vivi siendo independiente y a vivir con cierto estilo de vida. Ella era lo que necesitaba para vivir, mi luz, mi guía, mi tanque de oxigeno...
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BLUE
Han pasado dos meses. Dos largos, aburridos e interminables meses.
Lo peor de todo es que he estado pasando mayor parte de mi tiempo con Megan, no tanto con Drew -quien por cierto ya no me habla tanto- o Fitz.
He tenido una que otra carrera pero ahora es como si mi vida regresará a ser la misma de antes, mi vida no está en el rating del top diez, y si antes lo estuvo estoy casi completamente seguro que hubiera bajado de audiencia.
Estamos a diciembre. El mes que todos anhelan y esperan por las vacaciones, personalmente, odio diciembre. ¿Por qué? Porque debo convivir con mi gente que se hace llamar mi "familia" aunque creo que este año hare algo diferente. Llame a Fitz para vernos o algo pero en vez de eso me invito a pasar navidad. Pasar navidad con la familia de Fitz.
Jamás he ido a su casa, a pesar de que lo conozco por varios años. No estoy convencido pero es, o mi familia o ir con Fitz.
La respuesta es obvia para mí. Así que me doy una rica ducha con agua caliente, el frío se puede poner como si fuera el Polo Norte aquí en Seattle.
Decido ponerme unos vaqueros, una camisa de manga corta color blanco y tenis. Tomo mi abrigo ya que afuera está nevando y un gorro de invierno.
Al bajar a la sala noto que no hay nadie -como era de esperarse- y entro en la Range Rover, una camioneta que nadie utiliza, manejo hasta la escuela con tantas cosas en mi mente. Llego a mi casillero y Drew está ahí.
- Hola -digo sonriendo y siendo sincero, feliz de verlo pero claro que jamás le diré eso, si se lo digo su ego se elevara más de lo que debe
- Blue, hay un partido de póker hoy. ¿Irás? -pregunta
Niego con la cabeza
- No, no es tan necesario y no tengo ánimos para jugar. -me encojo de hombros
- ¿Pasa algo? -arquea una ceja
-No, olvídalo. No creo que lleguen mis padres el día de hoy. ¿Quieres ir a jugar Xbox?
Él esboza una media sonrisa
- Sabes que el Xbox es una de mis debilidades.
- Y más si estamos jugando Call Of Duty.
- Exacto.
A los segundos se une Fitz, se cuelga de mi hombro y lleva una sonrisa de oreja a oreja.
- ¿Y a ti qué te paso? -pregunta Drew riendo
- Creo que estoy enamorado. -suspira aun recargado en mí.
- No vengas con eso de que te viste en el espejo y te enamoraste. -digo riendo. Él me mira sonriente y niega con la cabeza como un bobo infantil.
- Esta vez lo digo en serio.
- ¿De quién? -pregunta Drew alzando una ceja
Por los pasillos se escuchan leves risas. Dirijo mi mirada hacia ellas, y ahí están. Jamie y Lizzie.
