¿Me creerías si te dijera que hasta el chico más frío podría enamorarse? Porque yo no lo creía, toda mi vida vivi siendo independiente y a vivir con cierto estilo de vida. Ella era lo que necesitaba para vivir, mi luz, mi guía, mi tanque de oxigeno...
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BLUE
No soy un chico de confiar, no soy una persona educada, no soy completamente sincero, no soy lo que todos esperan y tampoco soy ideal para un noviazgo.
Soy un chico controlador, impulsivo, egoísta, vanidoso, fumador, malo, cruel, excelente en los autos y estoy seguro de que, sin duda, sería un terrible novio.
Hay tantas que no soy y tantas cosas que soy. No tengo idea de cuales serían mis pros, pero, sin duda sé lo que son mis contras.
Y ahora me encuentro en una sala llena de adolescentes con probablemente el mismo problema de enojo que yo. De un lado está Asher, del otro está Nick y delante de mí está el inigualable Jordan. El diablo en carne y hueso.
― ¿Qué hago aquí, Jordan? ―frunzo el ceño intentando fingir desinterés. Asher le susurra algo que no alcanzo escuchar, no entiendo el afán de mantener secretos cuando estás a punto de torturar a alguien. ¿Qué más da? De todas forman lo harán.
― Escucha, Blue. Nosotros no queremos problemas. ―dice con una curva en sus labios, como si esto le causará gracia― Pero realmente no quieres vernos molestos. No tienes idea de lo que somos capaces, y ahora que conozco tu primera debilidad... ―suelta una leve carcajada mientras niega con su cabeza divertido ante la situación, alza la mirada para verme.― Bueno, solo digamos que no quieres que nos metamos con ella
― Otra vez ―sonríe Asher.
Vaya, Asher. Gracias por esa información, de verdad. Ha aportado mucho al tema de conversación.
Mis nudillos están apretados, siento como me hierve la sangre glóbulo por glóbulo y estoy seguro de que mi nariz está completamente arrugada.
― No no, Asher. No queremos hacerlo enojar. Conozco como es Blue y él puede ser algo...
― ¿Estúpido? ―inquiere Nick entre risas.
―Más bien impulsivo y completamente estúpido. ―se echa a reír, se acerca a mí y me sujeta la barbilla. Mientras me mantengo de pie intentando controlarme, pero es muy difícil. ―Debiste haber seguido tu instinto, Bluie.
― ¿De qué estás hablando? ―lo observo confundido.
―¿Has leído... -hace una pausa para reírse- No, tú no lees. ¿Has visto en las películas como suelen atacar a las novias de los superhéroes?
Asiento con la cabeza temiendo por lo que está por venir, aunque intento de demostrarlo. No les quiero dar la razón.
― Yo sé con certeza que Jamie es tu mayor debilidad, Blue. Sé lo que te provoca ―dice arrastrando sus palabras mientras camina a mi alrededor. Como un león acechando a su presa- Aunque tú no quieras verlo.
