CORA
— ¿Estás seguro que era por aquí? — le pregunté a Matt cuando nos dimos cuenta que esta carretera en la que estábamos no daba a ningún lado.
— Sí, aquí me lo marcaba — me detuve y apagué la camioneta —. ¿Qué haces? ¡Puede venir un auto!
— Aquí no va a venir nadie porque es una maldita carretera desierta — reclamé mientras le quitaba el celular, cuando analicé el mapa lo miré furiosa —. ¡Aun nos faltaba otro kilómetro! Esta es la vieja desviación.
— ¡Pues el punto está muy grande, y me tapo!
— Hubieras activado Siri para que te diera las indicaciones, idiota.
— ¡No me pediste que lo hiciera!
— ¡Agh! ¡Llegaremos al aeropuerto tarde!
— ¡Sólo hay que dar la vuelta y regresar por donde venimos!
— ¡Bien! — y en ese mismo momento comenzó a llover, maldito destino —. ¿Es enserio? ¡Hace un maldito momento estaba soleado!
— Tranquila Cora, sólo da la vuelta — estaba apunto de hacerlo, pero cuando lo intenté no nos movíamos, el auto no avanzaba.
— No estamos en arena, la llanta no se pudo quedar atascada.
— Debe ser el motor.
— ¿De nuevo? ¿Y por qué justo ahora? — miré atrás, pudiendo observar cómo nuestras cosas se mojaban, entonces sentí una gota en mi cabeza y luego otra y otra. Había una maldita gotera en el techo de la camioneta. Volví a mirar a Matt, aun más furiosa.
— Yo no tengo la culpa.
— Claro que la tienes, ya estuviéramos en el aeropuerto y así no nos hubiera agarrado la lluvia.
— ¡Todos cometen errores! ¡Lo siento!
— ¡Mejor cállate! ¡Hay que cubrir las cosas! — bajamos del auto y sacamos algunas cobijas y toallas, con ellas cubrimos nuestras cosas, aunque ya estaban empapadas —. Debemos hacer algo con la gotera que esta justo en mi lugar.
— Ya usamos las cobijas y las toallas.
— No pienso subirme al auto con esa gotera.
— Si te quedas aquí afuera de igual manera te mojarás.
— ¡Pues no me importa! ¡Lo que quiero es largarme de aquí! — Matt estaba por decir algo cuando empezó a toser, estarse mojando aquí afuera le afectaba. Matt siempre ha sido muy enfermizo, su sistema inmunológico es débil, y cualquier virus le puede hacer un grave daño —. ¡Tú sube al auto! ¡Te vas a enfermar!
— Te vas a enfermar también — dijo entre tos y tos.
— ¡Sólo sube! — me acerqué a él y lo ayudé a subir al auto, seguía tosiendo y tosiendo —. ¿Trajiste medicinas o algo? — negó con la cabeza, yo suspiré preocupada cómo respuesta —. Esperemos que no te pongas muy grave, no sabría que hacer.
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Flashlight
Короткий рассказ"Si algún día comenzará una aventura ¿irías conmigo?" Matt le preguntó a Cora. "Ni siquiera dejaría que planearás esa aventura sin mí" Cora respondió con una sonrisa. "Tú serías la lámpara que iluminaría mi camino, Cora" "Digo lo mismo de ti, Matt"...