Durante las siguientes dos semanas, mis amigos y yo nos estuvimos preparando para impartir el taller, la mecánica era fácil o al menos eso lo hacían parecer las explicaciones de la señorita Dixon. Sería parte de nuestra evaluación (como en los exámenes). Un profesor sería el encargado de guiarnos, los chicos de cuarto y tercer grado nos encargaríamos de organizar las actividades, impartir el taller y esas cosas aburridas.
Cada quien tendría un grupo, los de cuarto grado estarían trabajando con los chicos avanzados y nosotros, los de tercero, lo haríamos con los chicos que apenas comenzaban a enrolarse en esto de la música. Yo me encargaría de aquellos chicos interesados en el canto y la composición, Graham de los interesados en la guitarra y el piano, Dave con los que se interesaran en la batería y percusiones; y por último Alex se encargaría de los interesados en el bajo y en la producción de quesos artesanales.
Estaba muy emocionado, ya quería que comenzara, pero el taller daría inicio concluyendo las vacaciones de invierno. Las cuales llegarían en tres días, así que todavía faltaba mucho, pero mucho tiempo.
—Damon, ¿ya tienes listo a tu grupo?—me preguntó Graham a la hora del almuerzo.
—¿Teníamos que tenerlo listo ya?—le cuestioné con la boca llena de ensalada.
—Pues si... algo así... hay que ir adelantando todo y preparar las actividades lo antes posible para que cuando terminen las vacaciones podamos comenzar.—se acomodó los lentes.
—Oh, si...—tragué el tomate que acababa de masticar—¿Sabes si alguien integró al pequeño Gallagher en algún grupo?
—No, nadie lo ha tomado, pues él no tenía preferencia por ninguno.
—¿Es en serio?—pregunté sorprendido y Graham sólo puso los ojos en blanco.
—Pues no sabe tocar ningún instrumento.—dijo mirándome con seriedad.
—Ummhhh, pues veamos. Pensándolo bien, no lo quiero en mi grupo—dije—sería un problema. Había pensado en vengarme de Noel utilizando a su hermanito, pero no quiero gastar mis energías en un jodido mocoso.
—Bien pensando.—asintió Grem—Si no te molesta, Damon, me gustaría intentarlo con él. Yo sé que tiene potencial para la guitarra o el piano, haré que desarrolle habilidades en los dedos.
—Haz lo que quieras, Gra. Te lo encargo, hazlo sufrir mucho.
—Bueno, entonces me lo quedo.—sonrió, mi corazón se derritió (Awww qué bonito Gra).
Los tres días faltantes para las vacaciones de invierno se fueron como agua entre mis dedos; en tan solo esos tres días ya tenía como 80 tareas, 37 exposiciones, 29 proyectos y debía encontrar el secreto de la juventud eterna, bien, bien, a veces creo que exagero... pero si tenía muchísima tarea, la cual no me dejaría disfrutar de las vacaciones.
Afortunadamente, Graham se había comprometido a ayudarme con mis deberes y así, la tarea la terminé en tan sólo una semana.
—Day...—dijo Graham mientras resolvía el último cuestionario que faltaba.
—¿Pasa algo, mi querido Nerd?
—¡Listo!—exclamó triunfante y cerró el cuaderno, en seguida me lo entregó y yo lo metí a la mochila.—Lo qué pasa es que... bueno, me gustaría que saliéramos.
—¿T-T-Tú y y-yo?—no pude evitar sonrojarme.
—Si, bueno algo así, tú, yo, Dave y Alex.—puso su mano sobre mi hombro.
—Si, me parece una grandiosa idea. ¿Qué tienes en mente?
—Eh... pues... me gustaría mucho ir a patinar a la pista de hielo que pusieron en el centro comercial.—dijo con brillo en sus ojos.
—¡Qué romántico!—casi grité con voz melosa.
—Bueno, ¿si te gustaría? Digo, para avisarles de una vez.
—Oh, por supuesto.—asentí.
—De acuerdo. Llamaré a Alex.—se levantó de donde estaba sentado y se dirigió afuera para realizar dicha llamada telefónica. Yo me quedé mirando al techo durante al menos unos siete minutos, transcurrido ese tiempo, Graham llegó a la habitación casi saltando.
—Alex dijo que si, él le avisará a Dave y bueno... si Dave no quiere igual Alexander lo traerá a la fuerza.
—Bien.—sonreí.—¿Para qué día quedaron?
—Le dije que dentro de dos días.—respondió acostándose con flojera sobre mi cama.
—Entonces—conté con los dedos—la cita sería el día sábado, ¿no es así?
—Oh, efectivamente.—dijo.
—Bien, entonces supongo que nos divertiremos mucho.
—Claro que si. Oye Damon, debo de irme, son casi las doce y tengo que acompañar a mamá a hacer algunos deberes.
—Está bien, si quieres puedo acompañarte a la estación de autobuses.
—No, gracias. Iré yo solo.—se despidió con la mano.—Nos vemos, Day.
—Cuídate.—alcance a gritarle antes de que se fuera. Cuando escuché que Graham cerraba la puerta principal, corrí en friega por mi computadora y me puse a ver tutoriales de patinaje sobre hielo, para deportes como el fútbol y el baloncesto yo era muy bueno, pero el patinaje artístico jamás se me dio.
Hola chicos.
No había podido publicar porque he estado muy deprimido, ni ganas de levantarme de la cama tengo, pero bueno, tenía que cumplir con el capítulo de esta semana así que espero lo disfruten y una disculpa porque es más corto que el resto.
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Weird Kid →Diam
FanfictionLa vida de Damon Albarn era monótona y aburrida, como la de cualquier chico de veintiún años que en pleno 2017 prefiere ir a la universidad en bicicleta en lugar de pedir un Uber para transportarse. El barrio en el que vivía era relativamente tranqu...