Discusión

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(Isidra, dimensión de ángeles)

Isidra se encontraba parada frente al palacio de los ángeles legendarios, el que una vez fue su hogar. Habían pasado tantos años, que los recuerdos del lugar apenas eran visibles en su mente, aunque las emociones vividas ahí siempre permanecerían frescas.

Tantos amigos se formaron ahí, tantos enemigos se formaron ahí.

Ella no sabía catalogar los recuerdos como buenos o malos, pero al final, solo eran eso, recuerdos. Un pasado que no valía la pena recuperar.

-¿Qué haces aquí?- alguien pregunta detrás de ella, con una voz gruesa y un tanto molesta.

-Buenos días, Mohamed- saluda ella, con una sonrisa amigable que fácilmente se asemeja a la de Aprire.

Mohamed está al pie de las escaleras, mirándola con desprecio.

-Tenemos un trato, ustedes no pueden estar aquí- menciona él.

-¿Ustedes quiénes?- pregunta ella –Por hoy estoy solo yo

-Igual no eres bienvenida- una tercera voz aparece. Axe se encuentra en la entrada de la puerta, cruzado de brazos y esperando una buena explicación.

-Oh, vamos, solo doy un paseo- dice ella con un tono desinteresado en la voz –Por los viejos tiempos

-Por los viejos tiempos... solo vete- pide Mohamed.

Isidra mira una vez más el palacio, sintiendo nostalgia y al mismo tiempo tristeza al verlo tan vacío. Da un gran suspiro y se dispone a marcharse cuando una voz le interrumpe.

-¡Hey, espera!- grita Caro que aparece repentinamente por la entrada. Parece que ha estado corriendo durante un buen rato –Detestaría ser una terrible anfitriona, Isidra, ¿quisieras pasar?

-Oh, eso es nuevo- comenta Isidra -¿Qué quieres lograr con eso?

-Oh, vamos Isidra, por los viejos tiempos- Caro imita el tono de voz de su compañera -¿Qué tal un poco de té?

Isidra se siente confundida, pero no se molesta en marcharse, quiera saber hasta dónde es capaz de llegar Caro.

-No sé- Isidra se cruza de brazos -¿Está bien para tus amigos que yo entre?

-Oh, no seas tonta- se ríe Caro –Esta también es tu casa, además, tampoco es que me importe lo que ellos quieran

Isidra no puede evitar sonreír.

-Me agrada esa actitud- dice Isidra mientras camina al lado de Caro –Te acepto una taza, pero eso es todo

Caro asiente y la invita a entrar.

Axe intenta detenerla, no quiere darle al enemigo una falsa confianza, prefiere dejarle en claro que no es bienvenida.

-Axe, tranquilo- dice Caro –Isidra es mi invitada, yo la controlo- guiña un ojo y luego ambas entran al lugar.

Axe y Mohamed se miran entre sí. Se sienten desconfiados, pero le darán una oportunidad a su enemiga.

***

(Dieter, dimensión humana)

El hechicero toca la puerta tres veces y espera menos de dos minutos cuando Jess lo recibe con una gran sonrisa.

-Qué alegría verte- dice ella cuando lo ve –Dime que tienes algo nuevo que decirme

-Algo así...

Dieter pasa a la casa y Jess hace la misma rutina de siempre. Sirve dos vasos de jugo y los deja en la mesa, ella se recuesta en uno de los sofás y Dieter se prepara para darle toda la información nueva que tenía.

Creadores del pasado [Las crónicas de Abril #6]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora