(Abril)
-Lamento causarle tantos problemas- dice Abril cuando escucha a Daniel cerrar la puerta de entrada.
Ella temblaba a causa del frío, siente sus ropas empapadas y sopla sus manos con la intención de reunir un poco de calor. Le fue muy reconfortante sentir nuevamente frío, era como volver a ser humana.
-No te lamentes- responde Daniel mientras camina hacia ella –Te prestaré ropa seca para que puedas entrar en calor, sígueme
Abril caminó detrás de él, subieron las escaleras y entraron en una de las puertas más alejadas del pasillo. Ella miró un poco la habitación, estaba decorada con hermosas mariposas de colores, una cama repleta de peluches, y en la esquina, un escritorio en donde se podían ver varios dibujos mal hechos.
-No creo que a mi hija le moleste prestarte algo- dice Daniel mientras señala los cajones del tocador –Usa lo que quieras, y si decides quedarte esta noche, puedes usar este cuarto
-¿En serio?
Daniel asiente. Es demasiado amable, pero está bien, Abril decide que confiar en él no es mala idea.
-Cuando estés lista, baja- pide Daniel –Te prepararé algo caliente... ¿qué gustas?
-¿Chocolate?
-Bien
Daniel se va de la habitación.
Abril tiene un momento, para disfrutar de la belleza de la habitación, le recuerda a cuando ella era una niña, y gustaba de poner sus feos dibujos por las paredes. Esta habitación era perfecta para recordar aquellos momentos de felicidad e inocencia.
Rebuscó un poco entre los cajones, y encontró un pijama que lucía realmente caliente, color azul con lunares blancos. Se lo puso mientras temblaba, y dejó sus ropas mojadas sobre la mesa.
Luego bajó para buscar a Daniel.
-¿Daniel?- preguntó ella cuando llegó al pie de la escalera.
-Por aquí- la llamó él.
Abril siguió la voz, y se encontró con una cocina muy bien cuidada. Daniel estaba sirviendo chocolate caliente en dos tazas, y ofreció una a su visita.
-¿Frío?- pregunta él cuando nota que sigue temblando –Espero que entres pronto en calor
-Gracias- Abril se apresuró a beber un poco. El calor comenzó a llenar su cuerpo, sus manos sentían una cálida sensación, el vapor calentaba su rostro.
-¿No deberías llamar a tus padres?- insiste Daniel.
-No quiero- responde Abril –Me molesta pensar en ellos ahora... solo no quiero hablarles
-Bien, pero mañana tendrás que llamarles, no quiero meterme en problemas
-Entiendo... mañana volveré a casa, pero hoy necesito un descanso de ellos
Abril sigue negando su propia realidad, ¿su padre malvado? ¿su madre lo sabía? Suspiró con fuerza, tal vez debía solo olvidarlo y regresar a su vida normal.
-¿Tan mal te va?- pregunta él.
-¿Su hija no se enojará cuando se entere que usted me prestó todo esto?- ella cambia de tema, es una técnica nada discreta, pero sin duda eficaz –El pijama, el cuarto...
-Mi hija murió hace años junto a mi esposa
-Oh... lo siento- Abril no sabe cómo disculparse ahora –Realmente lo siento
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Creadores del pasado [Las crónicas de Abril #6]
FantasyAprire regresó de su viaje a otro mundo. Regresó débil, con magia muy básica, sin los dones que en algún momento le dieron su grandeza y gloria. Ahora deberá esforzarse más que nunca para recuperarlos antes de que alguien se aproveche de ello. Sin e...