3.

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En el auto viaja una pareja, con una tirantez que puede cortar hasta el más fuerte y duro de los metales.

___ ¿Vives sola en tu apartamento?___ preguntó Mateo solo para hacer un poco de conversación.

___ Si, vivo sola___ contestó con brusquedad "Pero muy pronto me mudare a un hermoso lugar muy lejos de ti y con mi hijo"___ pensaba la joven mientras lo miraba se soslayó.

Ella desde el momento que lo conoció tenía el poder de intranquilizarla, causando un estropicio en todas sus emociones, y a su pesar lo amaba cada vez más, aun siendo consciente de que estaba cada vez más lejos de él, a causa de su amado hijo.

___ Pero no deberías vivir sola, porque podrías......____

____ Miré señor Cáceres, a mí su opinión no me interesa y lo que pase con mi vida tampoco le debe importar a usted ___ lo interrumpió con tal brusquedad que él la miro con el ceño fruncido.

Mateo siempre se mostraba tan cortante con ella y hasta se podría jurar que odiaba a la joven, pero eso a ella no le importaba, aunque se rompiera en mil pedazos su corazón.

___ No quise entrometerme en tus asuntos, pero como te vi tan mal.....

___ Ya le dije que usted no tiene nada que ver conmigo ___ suspiro incomoda, él la ponía nerviosa y no lo podía evitar aunque luchaba contra esa debilidad ___ es por esta calle, pero puede dejarme aquí, yo puedo caminar las calles que me hacen faltan___ dijo la joven al ver la calle demasiado estrecha para que el auto diera la vuelta.

____ Yo dije que la iba a llevar a su casa y eso es lo que hago, aunque a usted le disguste___ dijo sin inmutarse por las fría palabras de ella ___ además a partir de mañana y por un corto período vamos a compartir mucho tiempo junto____ y bajo la velocidad al acercarse a la casa indicada ___ bien, hemos llegado___ él la miro con curiosidad, desde hacía un tiempo ella siempre le rehuía mirarlo a los ojos, y eso le llamo a él poderosamente la atención, porque al comienzo ella lo buscaba aunque fuera para que la mirara, pero desde la fiesta de disfraces, ella cambió de manera muy radical, y eso era extraño.

____ Muchas gracias señor Cáceres___ ella tomo la manija del auto para abrir.

___ Mariana, solo llámame Mateo, vamos a ser compañeros de trabajo___ su voz era suave.

___ No, siempre será para mí el señor Cáceres, mi jefe, por ahora....___ sonrió y se imaginó cuando no llegará al trabajo____ muchas gracias.

Y sin más bajo rápidamente del auto para no darle tiempo a él para que la ayudara, no quería tener la excusa de invitarlo a seguir dentro de su apartamento, lo quería tener lo más lejos de ella.

Mateo, condujo hacia su apartamento, pero sus pensamientos no se apartaron de la joven que le mostraba su antagonismo___ sonrió___ se lo había ganado a pulso.

Llego a su apartamento pasadas las siete de la noche, este estaba en un total caos, tenía cajas llenas de libros, llenas de la vajilla, de muchas cosas, y aun le faltaba mucho para empacar, muy pronto terminaría la horrible pesadilla de su pasado, pronto se mudaría donde él estaría rodeado de paz que era lo que más deseaba en esos instantes, por fin podría realizar sus sueños.

Dejaría atrás un pasado que marcó su vida, y que pronto llagaría a su fin___ suspiro cansado ___ aflojo el nudo de su corbata y se la quitó arrojándola sobre uno de los sillones, luego se quitó la chaqueta y fue acompañar a la corbata.

Caminó hasta el pequeño mini bar que estaba casi desocupado y tomo una botella de brandy y sirvió de manera generosa en el pequeño vaso que encontró fuera en un gran mesón.

Di que sí, mi amor. Serie Salamina Nº 7Donde viven las historias. Descúbrelo ahora