Parte12:

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*latidos*

El sentimiento de frío recorrió mi cuerpo, causando que instintivamente recordará los hechos anteriores, en donde se levantó un gran caos después que el mismo dios de la biblia inaugurará la guerra por el apocalípsis.

Las muertes y gritos de los dioses se veían y escuchaban con mucha nitidez, al final la vista de mi propia muerte apareció, fui rodeada por cientos ataques que se activaron apenas estuvieron a un metro de distancia, todo mi ser se desvaneció en la explosión sin dejar rastro en el mundo de mi existencia.

El aire repentinamente entró a mis pulmones y provocó que despertara, tosi varias veces hasta que por fin pude respirar de manera apropiada, abrí ampliamente mis ojos y observe mi entorno.

Me encontraba en una ciudad casi en su totalidad en ruinas, la mayoría de edificios se habían desplomado y los pocos que aún se mantenían a las justas de pie eran usados por sobrevivientes para descansar y resguardando se de la intensa lluvia.

Entonces recordé la sensibilidad de mi piel al contacto con la lluvia y use mi manos para revisar mi cuerpo mientras recordaba como era reducido a la nada.

-...

Guarde silencio al ver la condición de mi cuerpo.

En realidad para mi no era tan grave pero para una persona normal esto resultaría traumatizante y horrible.

Mis brazos, que solo se mantenían hasta la parte donde comenzaba el codo emitían un aura oscura que poco a poco restauraba el hueso, nervios, carne y piel perdida, mis piernas y parte de mi torso también emitían el mismo aura, cerré mis ojos y liberé un suspiro, volví a recostarme en el húmedo suelo y espere a que mis heridas sanaran.

-no lo entiendo, ¿como sobreviví? Si estoy segura que todo mi cuerpo fue destruido.

... En ese momento, poco antes que los ataques me rodearan una voz me alcanzó desde atrás, será que aquel joven de cabello castaño me salvo, pero si es así entonces el no abría sobrevivido... Espero que se encuentre bien.

Bueno, no es momentos de lamentarse, lo que haré después que mis heridas sanen será averiguar donde me encuentro y tratar de contactar con mis compañeros, finalmente será detener la guerra, aunque me cueste la vida, detendré esta masacre.

Una ves que mis heridas sanaron me puse de pie y camine hacia donde se encontraban los sobrevivientes, los vigías al principio me observaron con hostilidad pero al ver que era humana descansaron sus hombros y me recibieron con amabilidad, tal parece que una ves que se canto la sexta campanada, la cual pudo ser escuchada por todos seres de la tierra, demonios y monstruos salieron de todas partes matando y devorando a todo aquel que encontraban, ya cientos de humanos han muerto y los sobrevivientes se unieron en comunas para poder defenderse...

Aunque esto suene un poco cruel, creo que sus esfuerzos son en vano, pero no soy una persona tan fría y repulsiva para soltar ese comentario, más bien los apoyo y refuerzo su voluntad de vivir.

Después que me gane la confianza de las personas ocultas en esta sección, pregunte en donde nos encontrábamos, yo por ser una diosa tengo la cualidad de entender todos tipo de idiomas como si fueran mi lengua madre así que no puedo distinguir el lugar en el que estoy por el lenguaje de la gente.

-pues en Perú, exactamente en la ciudad de Lima, acaso jovencita ¿usted es extranjera?

-enserio, vaya que suerte que acabe aquí, muchas gracias, ah, y no soy extranjera también soy peruana.

-ya veo, hum... ¿A donde va?

-saldré a tomar aire.

-En estos momentos el exterior es peligroso no debería salir.

La guerra por el apocalipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora