La guerra por el apocalipsis

Parte 20

Cerré mis ojos, mis hombros se tensaron y empezaron a temblar, quería que la tierra me tragara, no sabía que decir, para empezar ni siquiera me atrevía a verlos directamente.

-sara... continua, esto nos es por el bien de alguien en específico, sino por el mundo, para que pueda conservarse, además ellos tarde o temprano tendrían que enterarse... aunque aun así no puedo creer que alguien tan fuerte como Noelia haya perecido.

Rápidamente me puse de pie, gire mi cuerpo en dirección a los padres de miguel y dije mientras bajaba la cabeza en señal de disculpas.

-¡ todo esto es mi culpa, deje que Noelia fuera sola aun sabiendo que no regresaría con vida, no pondré ninguna excusa, pueden odiarme si quieren... pero enserio lo lamento, lo lamento muchísimo ¡

-mi pequeña... murió.

-...

El padre de miguel cayó sobre sus rodillas y cubrió su rostro con ambas manos, las lágrimas caían de su rostro atraves de sus manos, algo dentro de él parecía romperse en pedazos, era compresible, después de todo el sentimiento de perder una hija, una parte de ti... es indescriptiblemente doloroso.

La madre de miguel solo se quedó en silencio, observando en dirección a la persona de cabello negro, quien se encontraba sentado en el suelo con una daga en el pecho, parece que el padre aun no lo había notado así que usando su mano derecha empujo levemente el hombro de su esposo.

Tratando de ocultar su desarreglado rostro observo en dirección a donde su esposa le señalo con su mano izquierda, fue ahí en donde se encontró con la figura de su primogénito, ambos abrieron sus ojos ampliamente e intentaron acercarse a él, pero fueron detenidos por la voz de la profesora afrodita, quien dijo.

-algo que deben saber ustedes antes, es que el miguel que ven aquí no es su verdadero hijo.

Ambos padres parecían no entender lo que la profesora de su miguel, quien según los rumores lo secuestro para motivarlo a obtener "mayor concentración en las clases", acababa de decir.

Más bien, añadir aquel comentario justo cuando reciben la chocante noticia que la menor de sus hijas falleció, ocasionó que se enfurecieran un poco, creo que si se les empuja un poco más, podrían enloquecer y matar a la profesora afrodita.

-sin van amatarme, sería mejor que lo hagan después que termine de decirles el punto a mi comentario.

Al ver que los padres de miguel no hacían ningún movimiento, lo tomo como una aprobación para continuar.

-sara, creo que tú ya tienes una pequeña idea a lo que me refiero, pero aun así, pienso que deberías prepararte para escuchar.

"No entiendo... ¿yo tener una idea?, ¿de qué? ¿No se siquiera lo que te refieres?" Eran los pensamientos que se reflejaban en mi expresión.

-el miguel que nosotros conocéis, fue asesinado hace dos años, el que ven aquí, como ya lo habíamos conversado anteriormente pertenece al primer mundo paralelo original, antes que ustedes llegaran pensábamos en una solución para que el recupere la conciencia, usando la vieja técnica de traer al "inicio del trauma" pero como sara acaba de mencionar falleció, lo cual cierra una puerta más para culminar con esta guerra.

-...si lo que dices es verdad, entonces ¿quién asesino al miguel original?, no dijiste "murió" sino que fue asesinado, ¿Quién lo hiso? Creo que si lo sabes, los padres tienen derecho a saberlo.

Un silencio profundo inundo el lugar cuando deliberadamente la gran anciana lanzo su punto de vista, todo dentro de la carpa se mantenía en silencio hasta que, la profesora afrodita, quien miro fijamente al miguel que se encontraba sentado en una esquina; dijo.