Capítulo 11: Fotografías

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NOTA

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NOTA. Este capítulo contiene una escena sexual, no es tan explícita. 

Narrado por Bryan.

Llamé a Danny para que viniera a casa. Esta vez me tocaba regalarle algo, antes de que viera a todos mañana. Ellos tendrían que esperar solo unas horas más para recibir sus regalos.

Antes de bajar a la sala con mi mamá, dejé debajo de la almohada el regalo que le daría en cuanto llegara a casa.

Una vez que llegué a la sala le dije que sí vendría, por lo que ella se alegró. Mi mamá siempre se había llevado bien con Danny, desde pequeños los dos corríamos en su jardín como locos jugando a que éramos reyes que protegían el castillo, que era mi casa. El haber convivido más con él lo había convertido en alguien más de mi familia.

—¿Y qué le compraste hijo?

—No te diré mamá. Es sorpresa de él y nada más.

—Anda, dime.

—Mejor espera a que llegue y que te lo diga.

—Es un disco mamá —dice Megan que va bajando de su cuarto.

—Te odio maldita mocosa.

—¡Bryan! —grita mi madre.

Comienzo a reír porque desentonó su voz al gritar mi nombre y se escuchó muy aguda. Megan también terminó por reírse demasiado y mi madre volvió a gritar, pero esta vez a ambos. Nos quedamos en silencio cinco segundos y ahora los tres estallamos en una risa larga. Después de ese momento encendimos la televisión y estaba una película de terror que ya había visto hace tiempo Sé lo que hicieron el verano pasado. Fue curioso, porque recordé la nota que había encontrado dentro de uno de mis libros el día de ayer. Una broma que no se quedó ahí, sino que siguió con bromas más pesadas.

Seguimos viendo la película hasta que escuché el timbre sonar. Me levanté y caminé hacia la puerta, abrí y Danny se encontraba frente a mí. Le dije que pasara y saludó a mi madre y a Megan. Luego nos subimos a mi habitación y cuando estuvimos ahí le dije que le tenía una sorpresa. A lo que él se quedó sorprendido, cosa que me hizo reír porque de alguna manera ya sabía que le regalaría algo.

Me acerqué a mi cama y saqué de debajo de la almohada el regalo. Se lo di abrazándolo fuerte y me dio las gracias por ese detalle. Lo abrió y en cuanto vio lo que era comenzó a saltar de felicidad, era el disco de uno de sus grupos favoritos, A Rocket To The Moon.

—Gracias por regalarme el disco con la canción que el dediqué a mi ex —responde irónicamente.

—¿En serio?

—Es broma Bryan. Bueno... sí tiene la canción, pero no le daré ese valor. En serio gracias, es uno de mis grupos favoritos.

—De nada, gruñón.

La Fecha Marcada (Libro I) |COMPLETA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora