Capitulo 5 -Ataque de guerra

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-¡Dayana pero que fue lo que te paso! -Supongo que intentar limpiarme en el baño y querer quitar toda la sustancia verde de mi cara no sirvió de mucho porque todos lo notaron y lo que es peor, Miles lo noto-

-Ni lo menciones -Esto había arruinado por completo mi día y mi humor obviamente era de los mil demonios-

-¿Tienes que decirme quien te hizo esto?

-Nada, olvídalo es solo un idiota que trata de hacerme la vida imposible y yo a el -Camine hacia la salida con pasos firmes. Faltaban dos horas para que el día escolar acabara pero ni loca entro así a un salón, después pediría los apuntes a Marian y listo-

-¿Te iras? -Me pregunto Miles-

-Sí, lamento dejarte solo pero no puedo entrar a un aula así. Te veré mañana -Me despedí con la mano y salí lo más rápido que pude de ahí-

Subí disparada a mi auto. Para cuando llegue a casa el reloj marcaba las 11 en punto. Subí a mi habitación y me di un largo baño, la pintura no salía tan fácilmente así que tarde una o dos horas para que todo se removiera por completo.

Estúpido Charlie, no tengo la mínima idea de lo que era esa cosa, gracias a dios no era olorosa ni nada por el estilo si no hubiera doblemente muerto de humillacion.

Pero ya vera esta vez lo humillare a otro nivel. Ese idiota no supo con quien se metió.

Charlie POV

Llegue a mi casa con la sonrisa más grande que una persona pudiera tener, me hubiera gustado tomar una foto de la cara de Dayana cuando abrió su casillero, apuesto a que no se lo esperaba, de seguro cree que como es linda y usa ropa cara nadie puede tocarla, y nadie tiene derecho a contradecirla o darle dificultades en su PERFECTISIMA vida, pues está muy, muy equivocada, Charlie Anderson llego para hacerle la vida imposible a esa chica fresa consentida.

-¿Charlie eres tú? -La voz de mi mamá proveniente de la cocina me saco de mis pensamientos-

-Sí, soy yo

-Ven necesito que me ayudes con algunas cosas

Tal vez para muchos sea molesto ayudar a su madre en el trabajo y más si su trabajo es cocinar, pero para mí es todo un placer, digan lo que digan a mí me encanta la gastronomía, me fascina poder hacer un exquisito platillo y poder alegrar el paladar de los demás a través de la comida.

Mi familia es humilde, bastante. Después de que mi padre abandono a mí madre y a mi, las cosas han sido muy difíciles, para ambos, ella trabajando duro día a día para pagar mis estudios y yo trabajando medio tiempo en la tienda Tocix.

Mi madre ha trabajo en las suficientes casas y eventos como para saber que los "ricos" o los de "clase alta", como ellos se hacen llamar, son las personas más egoísta, engreídas y con el ego más gigante de todo el planeta.

Tal vez tengan todas las cosas materiales que pueden existir pero de que te sirve tener todo eso cuando eres una persona con la moral de mierda.

Y es precisamente por eso que detesto tanto a Dayana, porque se cómo es ella y se cómo es su familia. Dayana no es otra cosa que una chica superficial y hueca, hueca como todas las demás zorras del instituto.

-Ven necesito que me ayudes a preparar algunos cook cakes

-¿Por qué preparas Cook cokes? -Lave mis manos y tome los utensilios necesarios para ayudar a mi madre-

-Tengo una degustación que dar hoy en la tarde, una de las familias más refinadas de todos los EUA tendrá una gran fiesta, y si les gusta lo que cocinare me contrataran para hacer el banquete -Una sonrisa de emoción apareció en el rostro de mi madre-

-Bien entonces te ayudare, aunque estoy seguro que te contrataran, después de todo tu eres la mejor conociera

-Gracias Hijo ¿Saldrás esta noche?

-Sí, igual que siempre

Solía decirle a mi madre que iba con mis amigos a jugar video juegos pero la verdad es que me iba a las carreras ilegales que se organizaban en el péndulo. Ese era el nombre que tenía la arena de carreras de autos y motocicletas más peligrosas de todo el estado.

Le mentía a mi madre porque no quería que se preocupara por mí, después de todo yo siempre estoy bien, ese es mi trabajo, sobrevivir. No importan las circunstancias yo siempre tengo que salir a flote.

Dayana POV

Al día siguiente durante la escuela no dejaba de buscar a Charlie con la mirada. Ayer por la noche me di cuenta de algo de suma importancia. Charlie no tenía amigos, bueno le hablaba a algunos idiotas de las clases y en ocasiones lo veía rodeado de compañeros, pero realmente nadie era el "amigo más cercano a Charlie" o "El mejor amigo", él no tenía nada de eso, es como si fuera un solitario amargado con cara de "No me mires o te mato".

De cierta manera se me hace hasta tierno, tal vez es solo un chico inseguro que cubre sus miedos con la violencia y se pone una máscara de chico malo para que los demás no veamos su verdadero yo.

Reí, no Dayana él es un idiota porque es un idiota.

Los demás pensamientos son solo puras patrañas que yo imagino.

-Dayana hola -Miles había entrado por la puerta del salón de matemáticas-

-Hola Miles -Sonreí al verlo- ¿Qué tal las cosas?

-Bien, supongo

-¿No suenas como si las cosas estuvieran bien? -Miles hablaba con un tono cabizbajo-

-Bueno es que la chica con la que había estado saliendo desde hace algunos días... resulto que solo quería estar conmigo por intereses financieros -No pude evitar poner una terrible mueca de tristeza en mi cara, yo sabía perfectamente a que se refería, otra cosa que odio de mi vida es que todos son interesados-

-Lo siento mucho, entiendo perfectamente lo que sientes ahora, pero que te parece si para levantar tu animo salimos esta tarde -Tal vez es raro que una chica invite a un chico a una cita, porque técnicamente lo que dije fue invitarlo a salir, pero no me importa en absoluto, este chico se siente terriblemente triste y yo me encargare de levantarle el ánimo-

-Me parece perfecto ¿A dónde iremos?

-Tu elige

-Qué te parece el cine -Lo pensé un momento y luego le conteste-

-No, cine no, nunca salgas con una persona que recién conoces a el cine-Miles frunció levemente su ceño-

-¿Por qué?

-Porque no conoces a una persona iendo a el cine o si? -Una sonrisa juguetona apareció en su rostro-

-Supongo que no, entonces que te parece un helado

-Un helado es perfecto -Miles me mostró una hermosa sonrisa, sonrisa que yo le devolví-

Después de eso el día transcurrió normal, "normal" hasta la hora del almuerzo.

Todos estábamos comiendo tranquilamente, cuando visualice a Charlie entrar por la puerta de la cafetería (mi plan se ponía en marcha) camine lo más disimulada que pude hasta llegar a su lado, me coloque detrás de él y justo cuando se detuvo para tomar una charola, tome firmemente los costados de su pantalón y tire de él lo más fuerte que pude, solo en caso que tuviera cinturón, pero el muy tonto no traía nada que pudiera evitar que todos vieran sus calzoncillos de figuritas color rojo, la risa de todos me ensordeció por unos momentos.

Me encamine de regreso a mi mesa, con las palabras VICTORIA escritas en la frente, voltee sobre mi hombre y vi a un Charlie en completo estado de shock y con movimientos muy torpes tratar de subir sus pantalones.

-¿Qué fue eso? -La pregunta de Miles sonó entre asombro y risa-

-Eso querido amigo fue parte de la "Venganza Dayana Presley" con un toque de "ataque de guerra" -Le contesto Alan. No pude evitar reír ante su respuesta-

ConquistaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora