Conquistalo

Capitulo 2 -Un salto a la piscina

-¿Saldrás esta noche? -Estaba terminando los últimos retoques de mi maquillaje cuando mi madre entro con su chillona voz, fingiendo que estar interesada en mi-

-Sí, hoy es cumpleaños de Alan y dará una fiesta

-De acuerdo divierte, pero trata de no llegar muy noche

-Bien, te veré después -Le di un beso en la mejilla y baje corriendo las escaleras al escuchar el sonido del claxon. Marian estaba enfrente esperándome y no es una chica con mucha paciencia que digamos-

-¿Estas lista para divertirte? -Me pregunto mientras arrancaba-

-Por supuesto

Marian traía pues el vestido que le regale hace un año, un Chanel original, color plateado, con algunas aplicaciones de dorado, junto con un pequeño abrigo acompañada por su larga cabellera castaña arreglada con un moño. Se veía muy linda y Marian es de las chicas que no se arreglan demasiado, ella siempre ha preferido ir al natural, pero hoy estaba más arreglada que nunca ¿Acaso estará planeando algo? espero que no sea lo que me estoy imaginando.

-Dayana mírate te ves hermosa -Alan corrió a saludarme en cuanto me vio entrar por la puerta del frente, le di un caluroso abrazo ignorando su comentario, se perfectamente bien que solo está jugando, así es el, mi estúpido mejor amigo-

-¡Feliz cumpleaños tonto! -Dije mientras le estiraba el pequeño disco envuelto en papel azul con un moño rojo en la esquina de el-

-No tenías que comprarme nada

-Silencio, eres mi mejor amigo y es tu cumpleaños, claro que tenía que darte algo

-Eres la mejor -Me volvió a dar un abrazo-

-Lo sé -Una sonrisa juguetona apareció en mi rostro-

-Oye porque no pasas y tomas algo, yo te buscare más tarde

-Bien, ve y diviértete es tu día

Alan se alejó con pasos rápidos hacia la planta alta y yo me quede parada viendo la, posiblemente mejor fiesta del año.

Había mucha gente, tantas que apenas se podía caminar, todos estaban riendo, bailando y tomando alcohol junto con sus amigos, era genial tener este tipo de fiestas durante el año escolar, es como un desastres.

Comencé a caminar sin ningún punto fijo, al principio estaba tratando de buscar a Marian entre la multitud, pero me di cuenta que era meramente imposible. Con todo este ruido y tantas personas jamás podría encontrarla, bueno de todas maneras estoy segura que está ligando con algún chico lindo.

Pasaron aproximadamente 3 horas en las que yo no dejaba de bailar y reír con algunas chicas que se podría decir son "Mis amigas" incluso tome uno o dos tragos de cerveza, casi no me gusta tomar así que dejaba el vaso medio lleno.

Comenzaba a sentir un horrible bochorno, la gente sudando y traspirando hacían que el calor aumentara, así que decidí salir un momento al patio trasero donde también había gente pero no tanta como adentro.

Comencé a caminar por la orilla de la piscina mientras pensaba cuando fue la última vez que estuve en una playa, creo que fue cuando tenía 12. Mamá tenía que hacer una presentación para la revista en Florida y estuvimos viviendo unos cuantos días en una cabaña alquilada a la orilla del mar.

Una de las cosas que más amo es justamente eso, el océano. En definitiva si tuviera que escoger un lugar donde pasar el resto de mi vida escogería vivir en una enorme casa de playa, donde cada vez que me asome por el balcón lo primero que mire sea la inmensidad y hermosura del océano.