Fantasías con mi Tío

Capítulo 19

No tenía ganas de ir al cole pero mis padres me obligaron. Me despedí de mi padre y mi madre me llevó al cole.

- paso por ti a las 3:30 pequeña, cualquier cosa me llamas

- gracias mamá – no tenía ánimos para nada.

Comencé a caminar hacia la entrada del cole. Entré y me fui directo para el salón que me correspondía. Se hizo hora de clases y el profesor comenzó a dar la clase de Álgebra. Mi mente no estaba allí presente, estaba pensando en que será de mi vida ahora, ¿Steve se acordará de mi y de lo que hubo entre nosotros?

Ian entró al salón, la única silla que quedaba disponible era junto a mi, la silla que siempre utilizaba. Se sentó en ella, lo miré pero él me ignoró completamente. Necesitaba contarle lo que le había sucedido a Steve, tenía que decirle a alguien como me sentía, Ian era la única persona en la cual confiaba. La clase se terminó y todos comenzaron a salir del salón, Ian se levantó y comenzó a caminar pero lo tomé por el brazo.

- ¿que demonios quieres Sofía?! – dijo cabreado, mi reacción fue abrazarlo y colocar mi cabeza en su pecho, no recibía respuesta de Ian hasta que pasaron varios segundos, sentí como sus brazos me rodearon y colocó su barbilla en mi cabeza y comenzó a acariciar mi cabello – ¿que te sucede Sofía?

- no debería de hablar contigo sobre esto.... por eso mismo te enojaste conmigo, pero necesito hablarlo con alguien y quien mejor que tu

- ¿que paso?

- Steve tuvo un accidente automovilístico fatal, esta en el hospital y perdió la memoria, tengo miedo, ¿crees que sea buena idea que le diga lo que sucedió entre nosotros?

- ¿perdió la memoria?

- si, la doctora dijo que eso era temporario, que iba a ir recordando poco a poco, que no lo podíamos forzar, pero necesito decirle lo que sucedió entre él y yo, necesito saber su respuesta

- Sofía... creo que es mejor que no le digas, él tiene que recordarse, dale tiempo en lo que recobra la memoria, sino lo recuerda, entonces se lo dices

- gracias Ian, quiero pedirte disculpas, no quiero que estemos enojados, te necesito más que nunca, un día me hiciste prometerte que pasará lo que pasará entre nosotros nunca cambiaríamos el uno con el otro, ¿no cumplirás tu promesa? – se quedó callado por varios segundos – ¿Ian?

- Sofía, estoy bastante dolido, espero que me entiendas, necesito tiempo, no puedo seguir siendo tu amigo como si nada hubiese pasado, necesito pensar bien las cosas

- Ian, yo te necesito a mi lado, de verdad

- dame tiempo, ¿si?

- esta bien – no tenía otra opción, tenía que entenderlo, Ian sufría por mi culpa todos los días.

Entré a otro salón, en medio de la clase entró una chica de cabello rojo, sus ojos eran claros y llevaba una sonrisa de esquina a esquina, cuando el profesor la vio entrar tarde le llamó la atención frente a todos y ella se avergonzó, nunca antes la había visto en el salón, quizás la habían cambiado, no lo sé. La chica se sentó a mi lado y me sonrió, por lo que le devolví la sonrisa.

La clase se fue un poco rápida, gracias a Dios! Odiaba la Historia!

Cuando iba saliendo del salón escuché una voz decir mi nombre.

- Sofía! – me volteé y era la chica que había llegado tarde.

- ¿tu eres?

- hay discúlpame por no presentarme, me llamo Antoniet, soy nueva en la clase, estaba en la clase de música pero me cambiaron ya que no la necesito en este año