Capítulo 31

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- entonces, ¿lucharemos por nuestro amor?

- si Sofía, y ahora más que nunca! Ese niño merece un hogar, nos va a necesitar a los dos

- ¿sabes que todo puede cambiar verdad?

- lo sé y en estos momentos no me importa que cambie, no me importa perder el amor de mi hermano, pero mi hijo vale más que cualquier otra cosa

- yo... no lo puedo creer, me haces tan feliz con esto Steve

- no sé porque me tarde tanto en decidirme por esto, eres la mujer que amo, cuando te tengo cerca me siento tan feliz, jamás me había sentido así

- lo mismo digo Steve, ¿cuando les diremos?

- mañana a primera hora

- ¿seguro?

- si, no podemos esperar más, mientras más tarde sea, peor será la reacción de mi hermano y mi cuñada

Me sentía tan tranquila en estos momentos, al saber que Steve lucharía por lo nuestro. Nos habíamos sentado en el sofá de su departamento y recosté mi cabeza en su hombro, estaba oliendo su aroma, era tan perfecta, no podía creer que lo había olvidado tan rápido. Cerré mis ojos por varios segundos y me quedé dormida.

Abrí mis ojos y me encontraba en la habitación de Steve. Me senté en la cama y Steve se encontraba abriendo la puerta y traía una bandeja en sus manos.

- buenos días dormilona – junto sus labios con los míos y me hizo entrega de la bandeja – tengo que alimentar a mis dos personas favoritas

- gracias – mordí mi labio y acomodé un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y comencé a comer.

- ¿estas lista para ir y decirles la verdad?

- obvio

- me daré una ducha para ir a tu casa, necesito energías – los dos nos reímos y Steve se fue a dar la ducha.

Busqué mi celular y tenía varias llamadas pérdidas de mis padres, hasta un mensaje de mi madre.

- pequeña, ¿donde estas? Tu padre y yo estamos muy preocupados por ti, no pasaste la noche en la casa

Mordí mi labio y dudé en contestarle, hasta que encontré fuerzas y le contesté.

- estoy en el departamento de Steve, enseguida voy

- ¿con quien hablabas?

- mamá, me envió un mensaje, están preocupados por mi

- ya vamos para allá

Llegamos a mi casa, estaba bastante nerviosa, sabía que mi vida cambiaría en estos momentos. Steve me tomó de la mano y me miró fijamente a los ojos.

- ¿estas lista?

- si – tragué saliva, nos bajamos del auto y comenzamos a caminar hacia la entrada de mi casa, mi cuerpo temblaba, tenía muchísimo miedo.

- que bueno que llegaste Sofía, nos tenías preocupados – allí se encontraban mis padres, sentados en la sala esperando por mi.

- tenemos que decirles algo – miré a Steve y movió su cabeza diciendo que continuará – es algo que... va a cambiar nuestras vidas desde el momento que lo sepan

- ¿de que hablas Sofía? – preguntó mi madre mirándome seriamente y confundida al igual que mi padre.

- Steve y yo tenemos que decirles algo....

- ¿estas enfermo Steve? – preguntó mi padre preocupado y un poco alterado.

- no Carlos, no estoy enfermo, Sofía y yo tenemos que decirles algo que es sumamente importante

- cuéntenos ya!

- mamá... papá... lo siento – tragué saliva y me decidí por decirlo – el padre de mi bebé es.... es Steve – mis padres abrieron sus ojos sumamente grandes y se quedaron paralizados.

- les pedimos disculpas por todo de verdad, nuestra intención no era hacerles daño, yo lo siento demasiado, los defraude, sobretodo a ti hermano

- no me hables Steve! No puedo creer que hayas hecho esto! ¿Tuviste sexo con tu propia sobrina? ¿Con mi pequeña?

- lo siento – mi padre se levantó furioso y tomó a Steve por el cuello.

- papá! No le hagas daño por favor

- cállate Sofía, tu no eres mi hermano, me defraudaste, eso no se hace, no te quiero volver a ver cerca de mi familia

- suéltalo papá por favor!!

- que te calles Sofía! – lo sacó hasta la entrada de la casa – no te vuelvas a acercar a mi familia, acabas de morir para mi

- Carlos!

- papá!! – me tomó por el brazo y me metió a la casa.

- no puedo creer que hayas sido capaz de hacer eso Sofía! No me molestaba saber que mi hija quedaría embarazada a sus 17 años! Pero me molesta el hecho de saber que mi nieto es hijo de mi hermano! Sofía, caíste demasiado bajo, jamás se los perdonaré – subió las escaleras y se encerró en su habitación, comencé a llorar desconsoladamente, mi madre no había dicho nada, simplemente se mantenía en silencio mirando a mi padre pelear.

- mamá! Haz algo por favor!

- no puedo mi niña, hicieron algo muy mal, su padre se tardará en perdonarlos – bajo su mirada y subió las escaleras dejándome sola en la sala.

Busqué mi celular y le marqué a Steve.

- no sabía que mis padres iban a reaccionar así, lo siento mucho Steve, no quería que mi padre se pusiera así contigo, lo siento de verdad

- tranquila pequeña, eso no importa, eso se le pasará algún día, solo tenemos que ser pacientes y esperar, pero no me rendiré y cada día que pasé lucharé por nuestro amor, te lo juro

- yo también lo haré Steve, te lo prometo

Perdonen tanto la tardanza y lo corto del capítulo, casi no he tenido tiempo para actualizar, pero aquí les dejo un adelanto jiji :3 besos y abrazos

Fantasías con mi TíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora