doce.

5.2K 615 721
                                    

Hoy había sido un día muy bueno para mí. El curso había finalizado, y ya nos habían dado las notas finales de los últimos exámenes junto con las evaluaciones. El examen que estudié con Jaebum lo aprobé con un diez y él con un nueve, por lo que ambos estábamos muy contentos. Y tenía que sumar que mis notas y la de todos mis amigos habían sido muy buenas y todos habíamos acabado el curso con notables y sobresalientes, cosa que era increíble y nos hacía sentir muy orgullosos. Todo el esfuerzo de madrugar, aguantar a los profesores y muchos alumnos, estar horas y horas en clases, hacer mil trabajos, tareas y exámenes, habían dado su fruto y recompensa.
También mis padres habían venido hoy a mi casa a visitarme y de paso a felicitarme por mis buenas notas. Y Yugyeom de la nada me regaló una camiseta que me gustaba mucho y ahora mismo llevaba puesta. El día había sido muy feliz, tranquilo y repleto de buenas noticias. Ya empezaban las vacaciones de verano y ya era tiempo de descansar durante unos meses, cosa que me aliviaba y me alegraba mucho.
Pero el día ya había pasado y ahora era de noche, y si era sincero, no me sentía igual de bien a como me sentí durante todo el día.
Los chicos y yo estábamos en casa de Mark, pero no sólo éramos nosotros siete. También estaban Jihyo, Nayeon y Sana.
El problema no era que ellas estuviesen aquí, sino tener que ver y aguantar las escenitas de amor que Jaebum y Jihyo hacían a cada rato.
No quería admitir que sólo estaba celoso, más bien me parecía más incómodo que otra cosa. Tu ex novia y tu amigo juntos, dándose el amor que yo antes me daba con mi ex novia y encima delante de mí. ¿No tenían ni siquiera un poco de consideración?
Ya sé y todos saben que Jihyo no me gusta y que nuestra ruptura la tengo muy superada, pero nadie sabía que yo ahora sentía cosas por Jaebum, y esto me estaba poniendo de mal humor.

Intentaba ignorar lo máximo posible a la pareja y centrarme en estar con mis amigos y apegarme a Jinyoung, Nayeon y Sana que también son unos solterones como yo.
Pero me era imposible si ellos dos a cada rato se reían, hablaban o se escuchaban sonidos de besos. ¿Por qué no se iban a casa de Jaebum a disfrutar de lo que realmente tenían ganas? No lo entendía, en serio.
La frustración en mi cara creo que era evidente, tanto que incluso Jinyoung me preguntó, pero yo simplemente le dije que sólo me dolía un poco la cabeza, cosa que por supuesto era mentira.
La diferencia entre Mark con Jackson y Yugyeom con BamBam, era muy grande a la de Jaebum y Jihyo. Las otras dos parejas también eran cariñosas, pero no al nivel de ni siquiera poder despegarse el uno del otro. Todos se daban su espacio y todos prestaban atención a los demás y no sólo a su pareja. Porque cuando se está con amigos, lo normal es prestarle atención a todos tus amigos y pasar tiempo con ellos, y no solamente centrarte en tu pareja. Eso tocaría cuando sea el momento o cuando estén solos. Todos parecían pensar como yo, menos ellos.

Yo sabía que Jaebum es un chico muy pegajoso y cariñoso con las personas que le apetece serlo, en este caso Jihyo y yo, pero también debía entender que hay límites y que los estaba sobrepasando, al menos desde mi punto de vista.
Incluso en un momento, Jihyo hizo el amago de levantarse para sentarse junto a sus amigas, pero Jaebum la agarró y volvió a sentarla junto a él. Y a ella no le quedó de otra que encogerse de hombros y mirar a sus amigas con cara de "no me deja ir, qué le hago", mientras sus amigas en respuesta sólo sonreían y luego seguían hablando con los demás.
Pero, ¡Jihyo es idiota o qué le pasa! Ella podía perfectamente decirle a Jaebum que quería pasar un rato al lado de sus amigas, pero no, se quedó callada y sentada donde Jaebum quería. Dios, esto me irritaba de sobremanera.

Una hora más pasó y yo ya tenía ganas de irme a mi casa, pero conocía a mis amigos y no iban a querer que me fuera cuando sólo eran las once de la noche y ya eran vacaciones. Así que, simplemente puse la excusa de que me dolía la cabeza y me fui a la terraza de Mark a tomar el aire.
En realidad, sólo quería deshacerme un poco de la parejita que tantas náuseas me estaban dando y mirar las pocas estrellas en el cielo y las luces de la ciudad.
Yo nunca hacía este tipo de cosas, siempre que estaba con mis amigos en mi casa o en la de alguno de ellos, me quedaba dentro y disfrutaba al máximo de estar alrededor de mis mejores amigos mientras hablábamos de cualquier tema, reíamos y hacíamos el tonto. Pero hoy la sensación era muy distinta, y todo por culpa de Jaebum, pero nada le podía hacer. Las cosas cambiaron de esta manera y yo no podía dar marcha atrás para remediarlas.
A veces me preguntaba qué habría pasado si Jaebum nunca hubiese venido a estudiar a nuestra universidad porque Jihyo le convenció. Seguramente nunca nos habríamos conocido y esto no estaría pasando. Y si nos hubiésemos conocido, de igual manera nunca habríamos sido cercanos. Yo estaría fuera de su vida y él de la mía. Yo no me habría enamorado de él y por ende tampoco tendría que estar aguantando toda esta situación y guardándome todo para mí solo.
Suspiré con desgano y escuché una voz detrás de mí que me asustó.

Todo cambia [2Jae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora