Date cuenta Hajime (Iwaizumi Hajime)

5.7K 401 337
                                    

Sumary: ¿Quién era la que siempre había estado a su lado?, ¿quién siempre lo apoyó?, ¿quién exactamente había sido la chica que se encargó de llenar su mundo de color desde niños? Date cuenta Hajime, o la perderás... PersonajexLector.

Disclaimer: Haikyuu!! Pertenece a Furudate Haruichi.

Advertencia: Aparición de un OC y tal vez un poco de Ooc.

Date cuenta, Hajime...

I. El inicio (Tres años).

La primera vez que Iwaizumi Hajime te vio, por su mente solo le pasó la idea de que eras una tonta y llorona; claro que a esa edad y con la crisis de los terribles tres latente; no es que fueras la única niña de la que pensaba de esa manera.

Sin embargo, solo contigo, pasaba la mayor parte de sus días; eso era porque aun siendo tonta y llorona, eras su vecina, y como tal, todavía después de "soportarte" en el jardín de niños, debía jugar contigo mientras tus papás llegaban a recogerte. Eso era, porque su mamá le obligaba.

—¡Hajime! —le reprendió—, ¡no lances la pelota tan fuerte! Le hiciste daño, pobrecita.

El infante solo tronó la lengua, mientras veía como su madre te mimaba e intentaba acallar tu llanto después de haber recibido el pelotazo en la nariz, mientras jugaban en el jardín.

Hajime sabía que no era su culpa, sí, definitivamente nada tenía que ver con él; si tú no eras capaz de recibir un pase tan simple era tu problema. Se declaraba inocente aun si su madre no dejaba de insistirle en que se disculpara y bajara el nivel de sus impactos; era tu culpa por ser tan débil y llorona.

Como todas las niñas.

.

.

.

II. El desagrado (Cinco años).

—Hajime, ¿tú sonríes? —tu inocente pregunta retumbó por toda la espaciosa habitación del moreno, él dejó a un lado por unos segundos la torre de mecanos que hacía, para subir la cabeza y verte levantando su ceja.

—¡Que pregunta tan más estúpida! —exclamó. Tú te tapaste la boca con ambas manos debido al asombro. Hajime había dicho "estúpido", y a esa edad, parecía la peor de las malas palabras— ¿Qué? —preguntó golpeado, al ver tu reacción.

—N-nada... —susurraste bajito, debatiendo mentalmente si contarle a su mamá o no lo que había dicho, seguro que se enojaba más y le dabas problemas, pero tampoco podía decir esas cosas. La maestra les había dicho que estaba mal.

—¿Todas las niñas son así? —preguntó fastidiado.

—¿Cómo así?

—Tan... Bobas, nunca saben exactamente qué es lo que quieren, como tú.

—Bueno, en ese caso, creo que yo podría decir lo mismo, ¿todos los Hajimes son así?

—¡¿Hah?! —sentía que casi le daba un tic debajo de su ojo izquierdo. Eso era absurdo.

—Es que ya sabes, siempre pones tus cejas como si fueran dos gusanos peludos enroscándose. Es terrorífico. —intentaste imitar su rostro, y de no ser porque era de él de quién te mofabas, tal vez le hubiese dado risa porque habías hecho una mueca graciosa, pero como estaba enojado, solo tronó la lengua y volvió a su torre.

¡Claro que podía sonreír! Es solo que simplemente todavía no lo habías visto, bueno, tampoco es que estar todas las tardes perdiendo su tiempo contigo le diera demasiados motivos para hacerlo, a esa edad, ya sabía que no le agradabas mucho, y ni siquiera sabía por cual razón exactamente.

Relatos en primera persona (Haikyuux Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora