Sinfonía de la Oscuridad: La Legión de las Sombras

Capítulo 15

Las afueras de Russiat

-Busquen ese objeto a toda costa...si alguien se opone...destrozenlo...-Decía Azurak mientras veía a sus Sombras acabar con todos los que trataban de defender la ciudad, varios Solais habían acudido a la ayuda y demostrando su deber como Sociedad de la Luz, pero eran muchos más enemigos de lo que pensaban.

Lanzas, espadas, hachas y mazos chocaban entre sí al igual que varios hechizos se combinaban para contraatacarse, se podía ver como esquivaban o aprovechaban la nieve a su favor, incluso el guerrero más débil se enfrentaba a la criatura más fuerte, algunos hipogrifos debían tolerar el frío para enfrentar a las criaturas que vivían en las montañas, y aquel líder de ropajes negros y casco dorado; solo se dedicaba a observar.

-¿Alguna señal del objeto?- Preguntaba a uno de sus soldados más fuertes.

-Negativo señor, seguimos buscando

-Seamos persistentes, si antes de que amanezca no nos lo entregan, los dejaremos en cenizas...

J no quiso esperar a que el avión aterrizara asi que decidió saltar, ocho metros de altura que la nieve logró amortiguar sin problemas. Corrió hacia la zona de guerra y lo vio, aquella máscara a la que le tuvo miedo y rabia por un tiempo, misma que se volteó al sentir la presencia de una mirada llena de asombro e ira.

-Tú...- Dijo Azurak mientras observaba atentamente la presencia de J.-...Tú nos mataste...

J no dijo nada, pues antes de poder acercarse un sombra intentó atacarlo; pero este logró esquivar el tajo de la espada y clavar una daga en el cuello del enemigo, la sangre manchaba la blanca nieve y el cuerpo agonizaba del dolor, desenfundó su espada y comenzó a participar en la lucha.

Uno de los sombras estaba a punto de clavar su lanza en una Solais desarmada, hasta que un rayo lo alcanzó y lo dejó aturdido e inmovil en el suelo, Emma seguía demostrando que era rápida aun en el frío.

-¿Estás bien?- Ofreció su mano.

-Eso creo...gracias

-De acuerdo...esto está mal, necesitaremos más ayuda- Decía mientras creaba un escudo alrededor de ellas, decidió contraatacar con pilares de hielo para golpear al que se acercara.- ¿Hay alguien que pueda pedir refuerzos?

-Ya los pidieron...solo espero que no tarden

El joven Tecslayer continuaba atacando y defendiendo a la vez, le sorprendía que fueran demasiados queriendo destruir la ciudad, ¿Acaso había un objeto ahí? No podría ser, Giliel les hubiera avisado, no tenía mucho sentido...

Azurak vio una vez más como sus seguidores no eran capaces de detener a una sola persona, así que le tocaba acabar con él en un instante, en cuanto vio que este dejó de atacar, lo tomó del cuello y lo levantó medio un metro más arriba de su altura, el viento niveo pasaba a través de ellos.

-Pagarás por lo que nos hiciste...sigues sin ser un rival para nosotros...-J se quejaba por la falta de aire en sus pulmones.

-Las cosas serán diferentes esta vez... ¿Estás listo?- Su collar comenzó a brillar rodeándolo rápidamente de su aura roja junto con sus pupilas, tomó la mano para abrirla y con una patada lo hizo retroceder al menos un par de metros; dio una vuelta en el aire y cayó al suelo apoyando su mano derecha, Azoreth entraba en acción con una siniestra sonrisa.