One Shot's: Bill Skarsgård.

2.3: Explicación.

Tercera parte de: Familia.

Estoy en la habitación de Bill mientras espero a que termine de asearse. Se lo sugerí luego de perdonarle (un poco) todo lo sucedido. Él acepto como un niño pequeño emocionado por un juguete nuevo.

También le sugerí cepillar sus dientes, el olor del tabaco no es exactamente mi favorito.

Estoy revisando distraídamente mi teléfono, escribiéndole sobre lo ocurrido a mi mejor amiga. Ella me responde con un montón de emojis y palabras donde "Eres idiota" y "¿Estas loca?" se repite constantemente con cada oración.

Suelto pequeñas risas a medida que me responde, se que luego lo asimilará y lo entenderá un poco.

Escucho como la ducha sigue funcionando, así que me dedico a ver las redes sociales esperando a que salga del baño.

Ingreso a Twitter como primera opción.

"¡Buenas noticias! Bill se ha reportado después de tan angustiosa búsqueda. Nos avisó que en una semana regresará al set."

Cita un Tweet del productor de la película.

Sonrío emocionada.

Me levanto de la cama con toda la pereza del mundo, dejando el celular de lado y dirigiéndome hacia el baño.

Respecto al apartamento es bastante acogedor, las paredes son de ladrillo rojo que contrasta con el piso de madera caoba. Es amplio a su forma, ya que la cocina se divide solo de un muro en la sala de estar. Tiene una habitación grande y un baño agradable de azulejos blancos con flores azules.

Todo esto lo vine analizar después de que Bill sugiriera acompañarlo durante su pequeña "Recuperación" emocional. Acepte, pero con la condición de que botara los cigarrillos a la basura y guardara el alcohol. Asintió varias veces con la cabeza mientras una sonrisa se conservaba en su rostro. Aun esta en los efectos del alcohol.

Miro el reloj digital que tiene al lado de la cama, aun me faltan 15 minutos de mi descanso. Puedo acompañarlo un poco mas.

La ducha se cierra, atrayendo el silencio en el ambiente.

—Ya no huelo a perro viejo...—Dice Bill saliendo de la ducha con una toalla cubriendo su cadera. Me detengo un momento en mi sitio admirando su torso desnudo, el cual, mi cuerpo aun extraña el calor que emanaba aquella vez que estuve con él. —¿Se te perdió algo? —Pregunta burlón.

Sonrió negando.

Él se acerca y abraza mi cadera con sus brazos húmedos. Siento como algunas gotas se adhieren a mi ropa.

—Ahora si puedo besarte en los labios...—Susurra rozando mi boca. Paso mis manos por toda la longitud de sus hombros, clavícula hasta su cuello, donde repaso su cabello mojado con mis dedos.

Entorna los ojos y siento como si ronroneara como un gatito.

—Te echaba mucho de menos...— le susurro en sus labios. Él abre levemente los suyos al cerrar los ojos completamente, eso me da oportunidad de juntar mi boca con la suya, cumpliendo con satisfacer la necesidad de saborear su aliento. Sabe a mentad y en juague bucal, pero un pequeño ápice de tabaco se conserva. Le restó importancia y continúo besándole.

Introduce su lengua, bajando sus manos frías y húmedas hasta introducirlas bajo mi camiseta, provocándome escalofríos al tener el bruco cambio de temperatura.

Su cuerpo desplaza el mío hasta caer encima de la cama, sintiendo el suave edredón ajustarse a nuestro peso.

Bill separa su boca de la mía soltando un suspiro complacido.