One Shot's: Bill Skarsgård.

13: Gris.

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La vida era definida como una obra de arte; una obra que podría ser retratada una y mil veces por personas comunes en su día a día, pero algunas veces sus lienzos se manchaban, se estropeaban, o simplemente, por incluir tantos colores dejaba de verse brillante para fundirse en negro. Tus problemas te opacaban tanto que simplemente dejabas de pintar por placer, para llenar todo de rayones y líneas comunes, dejaba de tener un paisaje. Ya no era una obra de arte.

Todo esto lo digo desde el punto de vista y palabras de quien considera su vida una obra de arte, por la simple razón de que no puedo corregirle. Nadie tiene una obra de arte por pintura, nadie tiene una jodida vida llevadera de perfección, tienes problemas, tienes angustias, tienes pensamientos totalmente fuera de lugar. Pero él, no creía en eso realmente.

Cada mañana antes de despertar se escuchaba como la suave melodía de un piano resonaba con melancolía por las paredes de la casa, yo simplemente daba vuelvas en la cama intentando conciliar el sueño. No piensen mal, adoro ese tipo de música, pero a veces repetir la misma canción deja de ser relajante para ti.

Cada mañana al ver que el sueño no ha podido llegar me levanto totalmente enfurruñada, como siempre. Voy al baño, hago mis necesidades y me preparo para darle un nuevo buenos días a mi acompañante de siempre.

—¿No puedes cambiar de canción? —Murmuro cerca de él. Como siempre, en su rutina, está el ignorarme completamente mientras continúa pintando, su ya acostumbrado: Cuadro del día.

Ruedo los ojos caminando mientras llego a la cocina para servir una taza de café. Cuando llevo alrededor de 3 sorbos (observando como él continúa pintando, con su rostro contraído por la concentración: Cejas arrugadas, labios tensos, mirada fija; todo acompañado con los suaves trazos que da su mano) la música termina para volver a comenzar. Inconscientemente tarareo la canción mientras pienso nuevamente en el sentido que él les da a sus obras de arte, ¿Por qué lo compara con la vida? ¿Por qué simplemente es arte?... Pero, de todos modos, se lo que me responderá:

—No es solo arte, es el reflejo de tus emociones y pensamientos. —Haría nuevamente esa típica mueca de disgusto cuando responde a una preguntar molesta para sus criterios.

Yo simplemente suspiraría mientras asiento con la cabeza, estando ya acostumbrada a sus palabras.

Aun así, él nunca me ha podido responder cuando lo comparo con la vida. Sigo sin verle un sentido, ¿Qué es una obra de arte para mí? De todos modos, todo lo que se sobre ello, son palabras de él. Nunca son palabras mías, para mí.

Al final, nunca le encuentro nada a mi vida. Solo observar como la persona que me enamoro pinta cada mañana su vida.

Después de 5 minutos se detiene.

—Buenos días, cariño. —Dice con su aterciopelada voz.

—Buenos días, cielo. —Respondo, apoyándome contra la encimera.

—¿No es un gran día para trabajar? —Suelta con entusiasmo. Sonrió cerrando los ojos.

—Creo que si...—Dejo mi taza en la encimera cuando su presencia esta frente de mí. Siento sus manos tomar mis mejillas para darme un beso en la frente. Rodeo su torso en un abrazo— ¿A dónde iremos esta vez?

Él me presiona contra su cuerpo. —Será una sorpresa.

Asiento, respirando profundamente su aroma.

De nuevo la música termina, para volver a reproducirse.

—¿Cuándo cambiaras la canción? —Susurro en putillas cerca de su clavícula.