Mordisqueó su labio inferior en gesto distraído, sin dejar de ver cómo la punta de su lápiz tinta se deslizaba con rapidez sobre la hoja. Su caligrafía jamás se había destacado por ser muy ordenada o bonita. Simplemente, su letra era entendible y para HoSeok eso estaba bien. Los profesores no se quejaban acerca de no poder entender lo que decía en sus trabajos escritos y él, era capaz de estudiar perfectamente de sus apuntes. Sin embargo, en ese momento, hasta él admitía que su letra estaba del asco en aquel borrador en donde se dedicaba a redactar de forma veloz, cada hecho vívido junto a Emily en los últimos días, intentando no olvidar ni el más mínimo detalle para poder enriquecer su historia.
No estaba seguro de si usaría eso para su trabajo de literatura, aún debía meditarlo. Pero, de lo que sí estaba seguro HoSeok, era que no quería olvidarse nunca de Emily —aunque no estaba seguro de que fuera capaz— y de aquellos sucesos tan poco comunes que ocurrieron de forma tan repentina en su aburrida y cotidiana vida, la cual, hasta hace unos días, no se podría destacar ni con ayuda de fuegos artificiales por sobre las demás.
— ¡Hey!
Alzó la mirada de inmediato al escuchar esa reconocible voz, pausando su tarea momentáneamente. Inconscientemente, sus labios se curvaron hacia arriba en una sonrisa igual de brillante a la que le regalaba su moreno amigo.
— ¡Hey! — saludó de vuelta HoSeok, viendo como TaeHyung tomaba asiento frente a él, expulsando felicidad por cada uno de sus poros.
El menor depositó un vaso de Starbucks en la mesa, cerca de Jung, y peinó su cabello utilizando sus largos dedos.
— Te traje un café, hyung.
— ¡Oh, muchas gracias! ¡Eso es muy considerado de tu parte, TaeHyung-shi! — exclamó contento. Estiró su mano para alcanzar el vaso de color blanco con la característica imagen verde estampado en él y lo tomó. Su entrecejo se arrugó y sacudió suavemente el objeto al darse cuenta de que no pesaba nada. Le quitó la tapa y observó el interior. — Tae.
El muchacho, quien se encontraba muy entretenido observando los apacibles alrededores, lo miró.
— ¿Qué pasa?
— ¿Y mi café? — interrogó, enseñándole el envase vacío.
— ¡Oh! De camino para acá me dio sed y me lo tomé — Rió y se encogió de hombros. — Lo lamento. La próxima vez sí llegará, lo prometo. — levantó la mano izquierda mientras su mano derecha se posaba en su pecho, en el lugar en donde se encontraba su corazón.
HoSeok lo miró mal por unos segundos y dejó escapar un pesado suspiro de entre sus labios, negando. Debió haberlo visto venir del chico.
Sus ojos se volvieron a posar en su cuaderno y leyó todo el contenido en murmullos, con la intención de retomar con lo que hacía.
— Y... ¿Cómo está Emily? —preguntó Tae de la nada, logrando que HoSeok tensara la mandíbula y negara molesto.
Habían pasado tres días desde aquella noche en casa de TaeHyung.
Tres días desde la última vez que la vio y supo algo de ella.
Tres malditos días en los que no hacía nada más que pensar y preguntarse a sí mismo en dónde estaba Emily, con quién y cómo se encontraba. Le desesperaba el hecho de ser incapaz de concentrarse en las clases porque su mente, de la nada, decidía que pensar en ella e imaginarse que podía estar haciendo en esos momentos, era mucho más divertido que la explicación del maestro de turno.
«Si sigo así, terminaré reprobando» pensó, agobiado con la situación.
— No lo sé. No la he visto — respondió sin mirarlo. Intentó continuar con lo suyo creyendo que con lo recién dicho el tema quedaría zanjado y olvidado, pero Kim parecía empeñado en querer hablar y mucho más si ella era el tema de conversación.
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WEIRD » JUNG HOSEOK ✔
Fanfiction" - ¿Me das de tus papas?". Jung HoSeok es un chico amable, dulce y de buen corazón que en busca de algo de emoción en su rutinaria y aburrida vida universitaria, se termina topando con Emily, una chica que se encarga de darle la emoción que deseaba...