La Túa Cantante

capitulo # 11

Capitulo 11

Me desperté temprano. Eran las 6:00am. Faltaban 2 horas para que las clases iniciaran. Normalmente salía a trotar a esa hora, para mantenerme en forma. Me levante me duche. Abrí la ventana, estaba haciendo frió a diferencia del día anterior. Me puse una sudadera y unos pants luego mis zapatillas. Guarde en mi bolsa mi inhalador, estos eran los momentos en los que mas lo necesitaba aunque trataba de ignorar mi enfermedad, no me podía descuidar. Me lleve mi IPod también. Nada mejor que trotar escuchando una gran canción.

Baje con cuidado, Harry seguía en la misma posición de la noche anterior. Camine silenciosamente y abrí la puerta lentamente, para luego cerrarla y salir trotando de la casa. Todo estaba desierto. Al parecer todos estaban dormidos. ¡Bien! Así nadie me vería si me daba otro ataque.

Me puse los audífonos y sonó la ultima canción que había escuchada, la volví a reproducir. Era una canción tranquila, perfecta para mi clase de ejercicio al estilo “lento”. Comencé a tararearla mientras trataba de acelerar un poco más sin agitarme demasiado.

Hasta ahora, ningún ataque. Bien! Voy mejorando. Mientras mas me adentraba en el bosque del lado de nuestro departamento, sentí un extraña sensación, como si alguien me estuviera ... siguiendo. Mi piel se erizo. Detesto esa sensación, me da miedo. Me hace sentirme incomoda. Trate de ignorarla, ya que comenzaba a agitarme por la desesperación. Solo estoy siendo paranoica me repetía en mi mente, pero cuando escuche el sonido de una rama quebrarse, me sobresalte. No había duda, alguien me seguía. 

¿Pero quien? Mi ritmo cardíaco aumento y mi respiración también. Trate de calmarme. No quiero que nadie se entere de mi enfermedad. Eso me mataría. Voltee a ver a todos lados. Pero nada. Sentía como el aire ya no me llenaba. 

Conté hasta 10 y suspire profundamente. No sacaría mi inhalador ahora. Pero ya estaba demasiado lejos como para regresar. ¿y si llamo a Niall? No, claro que no. No lo despertaría solo porque tengo miedo.

Sentí como alguien pasaba por detrás de mi. Me voltee rápido. No era nadie. Pero, algo sobresalía de la punta de ese árbol. De repente vi un reflejo dorado, lo había visto antes, era… era. ¡¿El cabello de Harry?! Si era su pelo. ¿Cómo olvidarlo? Ahí estaba ese riso.

¿Pero que hacia Harry siguiéndome? 

El saber que era el me tranquilizo. Mi respiración se normalizo, pero mi corazón acelero. Tenia que controlarme. Harry no podía saber de mi enfermedad. Especialmente el.

Ahora en ves de trotar, comencé a caminar. Sabia que me seguía. Pero ¿Por qué no me habla? Yo no muerdo. ¿Por qué se limita a seguirme? Hice como que no sabia de su presencia y camine de regreso al departamento.

¿Por qué no se acerca? Me encantaría hablar con el. ¿pero que le pasa?

Cuando ya estaba cerca del departamento, hice como que me amarraba mi cordón de la zapatilla a la sombra de un árbol, de espaldas a él y comencé a silbar. Escuche un leve suspiro y sentí como avanzaba rápida y silenciosamente hacia adentro. Cuando levante la cabeza vi como la puerta se cerraba. Sonreí. No había duda. Era el. Harry me había seguido. Mi corazón se aceleró y me ilusione un poco. Pero mi respiración no podía mas, era demasiado para una sola mañana. Le di la espalda al departamento y saque mi inhalador. Aspire 2 veces y me relaje un poco antes de entrar.

Cuando entre. Sonreí internamente. Harry seguía en la misma posición. Pero esta vez su frente brillaba con un poco de sudor, y su pecho subía y bajaba agitado. Lo mas gracioso de todo fue que sus zapatos llenos de lodo sobresalían de la frazada. Se me antojaba tanta ternura esa escena. Quería abrazarlo, pero me contuve. 

Subí a mi habitación. Eran las 6:45. Me dirigí al baño ya que había sudado un poco. Lave mi cabello con mi champo de rosas. Luego lo seque y lo deje suelto. Me puse un pantalón de mezclilla y un blusón blanco. Unas zapatillas blancas y una cinta del mismo color en mi liso cabello.