Día sábado a las 10 pm.
Astrid:
Esperaba a Jack en la barra para pedir unas cervezas, de vez en cuando me volteaba para verlo en la cabina telefónica, parecía bastante molesto y lo confirmé al momento en que azotó el teléfono y grito maldiciendo.
-¿Ocurre algo?- pregunté acercándome a el en cuanto lo vi salir. Se notaba terriblemente enfurecido.
Jack no me contestó y comencé a preocuparme.
- Dame wiski- le ordenó al cantinero, este le obedeció al instante.
<<Diablos, no de nuevo>> pensé.
- Jack, háblame- le pedí, pero el ni me miro- Jack no hagas esto, mírame- agarre su cara entre mis manos pero el miro hacia un costado, <<No, por favor>> pensé, lo conocía muy bien y sabía perfectamente que cuando estaba en ese estado de negación al punto de no querer ni verme ya no había retorno.
Luego de dos horas de rogar, suplicar y hacer todo lo que podía Jack ya iba por el séptimo wiski y no planeaba detenerse ahí, ya estaba arta, si había algo que no soportaba era verlo beber así, cuando estaba ebrio comenzaba a coquetear con cualquier chica que pasara o viera, a decir grocerias y dejarme en ridículo. Lo había prometido y ni siquiera en nuestro aniversario pudo cumplir sus promesas.
Cuando vi que pedía un noveno vaso me decidí al fin.
- Vas a venir con migo- le ordene- quieras o no.
- Obligame- me retó Jack con una voz que dejaba notar lo alcoholizado que estaba, se encontraba abrazado a dos chicas.
- ¡Ya vallasen!- las eché enfadada, las dos salieron de allí haciendo caras y burlas.
Jack calló casi desmallado encima de mi, suspire, ya no soportaba más todo el numerito.
Lo subí a la moto como pude y llevándolo sujeto entre mi cuerpo y el manubrio manejé aguantando las maldiciones y puteadas de los demás autos por no lograr ver bien gracias al cuerpo de Jack frente a mi.
Al llegar a su casa estacione la moto, lo baje como pude y salí a buscar un taxi.
Caminé dos cuadras pensando en que ya no quería ni volver a verlo jamas pero no sabía que el me seguía.
Cuando subí al taxi el subió detrás de mi.
- ¿a donde vamos?- preguntó cayéndose sobre mi hombro.
- Bájate del auto Jack- le ordené apretando los dientes intentando mantener la cordura.
- No, hagamoslo aquí amor, vamos, sera increíble- me dijo tirándome besos.
<< Hasta aquí>> pensé, era el colmo- ¡Bájate ya mismo del maldito auto!- le abrí la puerta y el salió.
Domingo 3:15 pm.
Jack:
Abrí los ojos como pude, sentía como si me los hubiera lavado con agua ardiente y la cabeza me estallaba.
- Buenos días- escuche la voz de Anna pero con lo mucho que me costaba terminar de abrir los ojos no lograba verla.
- Buen día- dije sin muchas ganas, mi voz sonaba demasiado ronca.
- ¿como te sientes?- pregunto ella sentándose en el borde de la cama.
- Fatal- dije, me refregué los ojos- ¿que hora es?
- Las 3:15 pm.
Tire la cabeza sobre la almohada.
- Te traje el desayuno- me dijo alcanzándome una tostada con mermelada.
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La vida con Los Frost
Teen FictionLuego de 4 años de estar desaparecida y habiendo conocido la traición Elsa Akthar vuelve a Arendelle, el lugar donde nació, y del que se fue tras la muerte de sus padres para convertirse en modelo profesional en París. Al regresar se encontrara co...