Capítulo 17: eres tan predecible

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Elsa:

Era viernes a las 10:30 am., me había pasado toda la mañana esperando la llamada de la empresa, la bemdita llamada para saber cual sería el horario confirmado que debía cumplir, ya estaba vestida y lista para salir por si me decían que fuera de inmediato.
La elección de mi atuendo había sido bastante complicada ya que yo jamás había hecho de fotógrafa en mi vida y no tenía ni idea de como vestir viéndome formal también, supuse que unos jeans negros y una blusa estarían bien debido a que de seguro me tendría que arrodillar para hacer tomas desde otros angulos, o al menos eso había visto en las peliculas.
Precionaba mis dientes con fuerza haciéndolos chillar y como siempre tiraba de mi goma para el cabello una y otra vez sin cesar de levantar el movil y observarlo, por las dudas de que este no sonará, cada cinco segundos.
- Vamos- lo alentaba como si tuviera vida- suena, vamos, haslo de una vez- a medida que escuchaba moverse las agujas del reloj sentía que la tensión y los nervios iban aumentando en mi ser.
  Como si fuera causa de magia negra o algo similar mi móvil comenzó a bibrar sobre la mesa, lo levanté ansiosa y me desilucione al darme cuenta que era Hicupp, no atendi y sólo la pasé a buzón de vos y aunque luego sonó un par de veces más por la misma razón, al fín llegó lo que tanto anhelaba.
- Hola- dije intentando parecer calmada mientras atendía rápidamente.
- Buenos días srita. Atkhar- la voz de la secretaria me hacía poner aún más ansiosa- llamo para avisarle que las pruebas se pasarán para dentro de unos dias.
-¿Cómo dentro de unos días?- pregunté confundida y sorprendida.
- Sí, la fecha exacta es a confirmar así pues, sólo puedo decirle que la llamaremos para avisarle sobre esto- la sonrisa que habían curvado mis labios se esfumó casi por completo.
- Oh, claro, entiendo- intentaba sonar profesional pero eso me había desconcertado demasiado.
- Muy bien, adios señorita Atkhar- dijo esta antes de cortar.
Guardé mi movil y me pregunté que podía hacer, me decidí por ponerme a ver una nueva serie de Netflix la cual no recuerdo el nombre.
Me tiré en el sillón y me dispuse a comenzarla, aún estando segura de que no la seguiría y si lo hacía me saltearia algunos capitulos de en medio.
- Elsa, ¿Puedes venir afuera un momento?- preguntó Norte por detrás de mi. Apagué la TV y lo seguí hasta afuera.
Hada y él se abrazaban tapando algo con sus cuerpos por detrás de ellos.
- Mira cariño- dijo ella con una sonrisa- creemos que te has estado esforzándo mucho estos ultimos días y que en serio mereces una recompenza.
- Así pues- siguió Norte- te hemos comprado esto- ambos se apartaron dejando al descubierto un hermoso auto negro que al verlo me dejó completamente perpleja.
- Ta tan- dijo Norte como si se tratara de un truco de magia.
- ¡Oh, por Dios!- grité emocionada- ¡Es hermoso!- me acerqué a el para verlo mas de cerca, era ancho, con un parabrisas que ocupaba casi toda la parte delantera, con espejos retrovisores de un grosor notorio y simplemente divino.
- No puedo aceptarlo- sentencie.
- ¿Por que no?¿No te gusta?- preguntó Norte como desilusionado.
- ¡Claro que sí!- me apresure a decir- es perfecto pero quizá demasiado, debió de haberte salido una fortuna- no conocía nada de autos pero en verdad se notaba que era caro y mucho.
- Sí, pero te lo mereces amor, mereces tener un medio de transporte de buena calidad, ¿Que digo?, de la mejor calidad- corrigió exagerando, Hada rió tras de sí.
- Pero esto... esto es demasiado, no podria...- estaba casi sin habla, ¡el auto parecía sacado de la película de Batman! ¡Se asemejaba al batimovil! Y pensar que era mío me dejaba simplemente sin habla.
- Vamos, ahora es tuyo- lanzó las llaves de este desde el otro lado, las ataje con una mano- ve a dar una vuelta y aprovecha para buscar a Anna a la escuela.
- Oh, si, por supuesto- dije al borde de las lagrimas de alegría, acto seguido me subí en el. Un olor a auto nuevo impregnaba el aire de este, por dentro se veía casi tan hermoso como por fuera, me senté en el asiento del conductor y pase mis manos por el volante sintiendo su textura, suspire.
- Me fasina- dije al fín mientras lo ponía en marcha.
- Nos alegra que te guste corazón- dijo Hada asomándose a la ventilla.
Antes de que logrará hacerlo arrancar Norte me indicó algo que cambió mi cara casi por completo.
- Oh, y pasa por Jack al hospital, su moto no le arranca y no puede volver, haslo antes de ir por Anna.
Acenti con la cabeza disimulando lo mas posible lo mucho que me había irritado ese pedido y me digne a irme.

La vida con Los FrostDonde viven las historias. Descúbrelo ahora