Los relatos de un león vegetarno

Illidan Tempestira: El discurso que ha cautivado mi alma

Illidan Tempestira. Quizá a muchas personas, por no decir la mayoría no les suene este nombre en lo absoluto, a otras muchas quizá si, pero hoy, en el preciso momento en el que he escuchado su discurso de despedida, se me hace imposible no sentirme nostálgico y orgulloso de sus actos de valentía, aunque hayan sido en un universo ficticio para nosotros. El discurso es el siguiente: 

" Cristal alor'idal

< El cristal te llama y palpita con magia embrujada.

Al cogerlo, oyes el eco de un mensaje que ha quedado en el pasado, una tarea que Illidan te ha confiado. >

Eco de Illidan Tempestira: En el momento en que se abrió el camino a Argus... en el instante en que observé el mundo natal de la Legión... supe que no regresaría.

Afrontaré mi destino, sea el que sea. Pero... he dejado ciertos asuntos sin resolver. Viejas heridas que me gustaría cerrar. 

El cristal contiene dos mensajes: uno es para mi hermano Malfurion y el otro para Tyrande. Te confío la misión de entregarlos en mi nombre, adalid.

Cuando hayan oído mis palabras, deja el cristal en la cima del Monte Hyjal, sobre la orilla del Pozo de la Eternidad. 

Adalid, has presenciado ecos de pasado. Te pido tu ayuda para poder poner fin a estos últimos asuntos. 

< Un vuelo a Lorlathil después... >

Malfurion Tempestira: El alma de nuestro mundo agoniza...

< Illidan me ha pedido que te trajese este cristal.>

Malfurion Tempestira: El cristal... emite una voz familiar. 

Eco de Illidan Tempestira : Malfurion, la primera vez que nos peleamos estábamos en el vientre de nuestra madre. La lucha ha marcado nuestras vidas.

Las enseñanzas de Cenarius siempre fueron tu vocación. La mía fue distinta. 

Buscaba poder... pero no para conquistar ni gobernar. Era un medio para un fin: salvar Azeroth de un enemigo imparable. 

Siempre desconfiaste de mis intenciones... claro que tampoco te lo puse fácil.

Pero ahora que mi destino es cada vez más evidente, quiero poner fin al conflicto que siempre nos ha separado. 

Aunque destruyéramos a la Legión, surgirían nuevas amenazas. Eres en quien más confío para acabar con ellas, hermano. 

Te has pasado la vida luchando por el sueño de lo que Azeroth podría llegar a ser. Ahora debes luchar por lo que es.

Cuida de Tyrande. Escucha sus consejos. Siempre fue la mejor de nosotros.

El camino que os espera será largo. Pase lo que pase, brinda honor al nombre Tempestira. 

< Un silencio invade los verdosos campos de Lorlathil... >

Malfurion Tempestira: Mi hermano tomó decisiones egoístas. Causó dolor a muchos. Sus transgresiones son... difíciles de perdonar. 

Y, sin embargo, hubo buenos tiempos en los que luchamos por una causa común, en los que compartimos un propósito. 

Pero basta de lamentos. Debemos encargarnos de curar nuestro mundo, adalid. 

< Un corto viaje en hipogrifo al Templo de Elune después...>