#Dofus Dedicatoria: El valor más allá del escudo.

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—No hay ningún valor en matar a los que son como tú. Oh, pequeño hermano tan estúpido, si deseas matarme, debes odiarme, detestarme, maldecirme[...] sobrevivir a una vida desagradable que está por venir para ti. Corre, escoria, corre y aférrate a tu patética vida... 

Desde ese día, sus palabras hirientes no han dejado mi cabeza en paz, él me arrebató todo: mis padres, mi hogar, mi gran y único amor y como no, mi amado lubesado, todos muertos. Nunca creí que mi hermano mayor tuviese dichas intenciones para con nosotros, siempre lo vi como una figura a quien seguir, a quien superar... y aunque ciertamente mi corazón carga odio hacia él, aún le sigo amando, y no dejo de pensar, en el día en que lo pueda volver a ver... 

—¡Tado, baja ahora mismo, ha llegado un paquete extraño a tu nombre! —desde una lejana cocina se refería una voz ronca de una jovial feca anciana— y date prisa, el desayuno no va a comerse solo. 
—Enseguida voy, abue Sköld, debo arreglar mi habitación antes de partir —me refería, mientras daba un último vistazo a la que fue mi habitación durante los últimos cuatro años— ¿y esto qué es? —curioso me pregunté— lo firma una tal... Meriana y L ¿quiénes son?
—¿No serán de aquella organización a la cuál te presentaste hace unas semanas? —con entusiasmo, preguntaba Sköld— de seguro te han dicho que sí.
—Ya me han aceptado, abue —sonriendo y de una manera gentil, proseguía— ayer noche en la cena me llegó su solicitud, debo atender una reunión el día de mañana ¡me darán mi primer encomienda! 
—Pequeño Tado... —con una lágrima bajando por su mejilla, se refería— desde aquella vez que tu hermano kråka causó tanto dolor en tu vida, me prometí a mi misma que cuidaría de ti aunque mi vida dependiera de ello y, ahora que partirás, temo que los malos pensamientos carcoman tu mente y te conviertas en alguien como él.

Los primeros meses fueron los más difíciles para mi, el gobierno de Allister consideraba peligroso acogerme en los confines de su castillo, dado la remota posibilidad de que kråka viniese en mi búsqueda; por ende, fui transferido a la iglesia de Amakna, en las cercanías a los abundantes campos de los Ingals. Las personas en la iglesia siempre fueron muy gentiles conmigo, me enseñaron el camino de los doce Dioses y el por que de sus acciones, me contaron historias del pasado, presente y del futuro, lo cual me sorprendió bastante pues ¿acaso estaré vivo cuándo todo lo que me comentaron suceda? es algo que solamente el tiempo lo dirá. 

—No te preocupes, abue, yo soy diferente a él —con un ápice de seriedad, me referí a la abue— pese a todo lo que ha hecho no puedo odiarlo, aún es mi hermano y sé que si algún día vuelvo a coincidir con él, podré cambiar las cosas
 —Oh... Tado... —llorando, proseguía— desde el día que te encontré siempre he querido cuidarte y darte la protección que Feca nos brinda, pero también sé que los fecas crecen y necesitan encontrar un camino, más cuando has terminado la Academia... parecía ayer cuando por fin decidiste poner un pie allí...
—No tienes que preocuparte por mi, abuelita —colocando el paquete sobre una frágil mesa de avellano, le abrazaba— aunque mis habilidades como feca aún dejan mucho que desear, sé defenderme muy bien. Además, al lugar donde voy se rumorea que tiene muy buena acogida y también paga, será una oportunidad de oro para poner en práctica mis habilidades. Ven, mejor veamos que hay en la caja.

 Ven, mejor veamos que hay en la caja

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Los relatos de un león vegetarnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora