Antes de comenzar este capítulo quiero deciros algo: Estoy increíblemente alucinada con la cantidad de visitas y votos que ha recibido la novela en los últimos días. Seré sincera, la estaba dejando de lado porque no veía el suficiente apoyo para seguir, pero vosotras y vosotros me devolvisteis las ganas así que este episodio está completamente dedicado a vosotras/os, mis lectores, muchos abrazos.
Lizzy me observa anonadada . Su plato de comida sigue intacto, por lo que he de suponer que la noticia realmente le ha impresionado, Lizzy nunca le pone mala cara a la comida, y menos si esta es una pedazo de hamburguesa.
-Por favor, necesito escucharte algo, me tienes asustada amiga...
Lizzy asiente y cierra la boca, traga saliva y mira al techo al menos unos segundos, antes de volver a dirigir mi vista a mi.
-Dime que esto no es una jodida broma- es lo que dice después de que le soltara la bomba de que me acosté con Azael.
-¿Te has tirado al menos 10 minutos con cara de besugo para responderme eso?
-¿Dios Serena y que quieres qué te diga?- me encojo de hombros- evidentemente no te voy a decir guau amiga eres una crack, porque creo que las dos sabemos que esto es un problema, un grave problema que puede afectar a una persona que ha sacrificado gran parte de su vida en ti, que lo daría todo por ti Serena, ¿en qué coño estabas pensando?
-No lo sé, no lo sé vale- mis ojos se ponen aguosos y lágrimas comienzan a caer por mi rostro- no lo entiendes Lizzy, nunca tuve ningún tipo de interés por ningún hombre, nada que no fuera sólo para pasarlo bien un rato, pero es que Azael..., desde que cruzó su mirada con la mía despertó algo en mi que nunca había sentido, me sentía diferente, deseada, pero no sólo de un modo carnal, sino en varios aspectos. Es un hombre inteligente, educado..., me atrae en todos los sentidos, y ayer cuando tuvimos sexo confirmé...., joder confirmé que realmente ese hombre me volvía loca, y que jodidamente quería repetir.
-¿Y no pensaste en tu madre?
-No, no Lizzy, antes siempre la tenía en mente y me medía, pero al ver que era recíproco, que el también sentía esa jodida atracción, pues dejé de pensar en los demás y me centré en mi misma, por una vez en la vida.
Lizzy resopla y agarra mi mano.
-Serena pero es que tu madre no es cualquier persona, es la mujer que te dio la vida.
-Lo sé
-Opino como Azael, es mejor que te largues lo antes posible de allí.
Me siento en la mesa del comedor y agarro la servilleta nerviosa. De momento sólo estamos mi madre y yo sentadas en la mesa, pero Azael llegará en unos minutos.
Noto la mirada pesada de mi madre sobre mi pero decido ignorarla y centrarme en retorcer mi servilleta. Cuando escucho unos pasos acercarse mi pulso se acelera, comienzo a sudar, y no me atrevo a levantar la vista, de todas formas se que es él, lo confirmo por el olor que desprende su perfume y llega a mis fosas nasales.
-Hola mi amor, me muero de hambre- sus palabras se aprisionan contra mi como llagas.
Está bien, no pretendía que las cosas cambiaran, pero tampoco que actuase como siempre con mi madre, ayer mantenía sexo conmigo, y hoy le dice sus míticas palabras bonitas.
-Pues que nos sirvan la cena ya entonces- dice mi madre.
Levanto la vista y veo que le hace una señal a una de las sirvientas y esta se acerca con los platos de comida.
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Cayendo en la tentación [Libro 1 Trilogía Cayendo]
Storie d'amore1º Libro de la Trilogía Cayendo. Los libros de la trilogía no guardan ninguna relación por lo que no existe ningún tipo de orden. 2º Libro de la Trilogía Cayendo: Cayendo por Giulia Su mirada, su boca, su cuerpo, todo en el llama mi atención. Mi co...