Hace tiempo te deje que cortaras un mechón de mi cabello; fue como un obsequio que de pronto se extinguiría con el tiempo; pero lo has conservado tanto, incluso cruzo la frontera contigo.
Ahora llevas un poco de mi, contigo, y me alegra. Hay obsequios sencillos que no todos se lo merecen y me alegra que aún lo tengas contigo.
Querida lía, espero que te guste su compañía, del mismo modo que a mi me gustaba la suya.
Que lo cuides, tal vez como yo no pude o no puedo hacerlo.
Espero que disfrutes de su extraña manera de ser, pero sé, querida Lía, que igual lo amaras como yo lo hago.
Al fin y al cabo, somos uno, pero ahora has lo que yo no puedo, acompáñalo y nunca te pierdas por favor, no como yo suelo hacerlo cuando no quiero saber nada de nadie y no quiero buscar ningún pretexto.
Me alegra saber que no te abandone, sino que te deje en buenas manos.
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A través de la Distancia.
Historia Corta"Estas letras van dedicadas a una de las mejores amistades. Aprender la paciencia ha sido parte de él, conocerme sin yo hablar de mí, es algo que constantemente él suele hacer. Una amistad reconocida como la más extraña, y que aunque es mí mejor a...
