Ya no miro el ayer con los mismos ojos del hoy; porque la vida no me sonreíra con la misma intensidad del ayer.
Ya no deseo retornar el tiempo, justo en aquel momento cuando nos conocíamos; porque a pesar de que no fui, ni di lo que merecias de mi, me gusta estar aquí, con la versión que soy hoy y las lecciones que he aprendido.
Ya no deseo retroceder el tiempo.
Como si pudiera reciclar cada suspiro y momento vivido; como si se pudiera dar el primer beso por segunda vez. Así que, no, no vale la pena retroceder el tiempo.
Los mudos no gritan, los sordos no conocen de música como nosotros y lo maravilloso que es esto. Tarde, no se escribe igual que ahora, así que sólo le hago frente al destino que se me abalanza sin demora.
Por que esto que fue, ya no volvera ha ser.
No regresará para volver a lastimar.
Como tu ausencia repentina en mi vida.
El ayer, es ayer.
El hoy, es hoy.
El mañana, sólo será mañana.
Claro está ¿No?
Ya no deseo retroceder el tiempo.
Como si pudiera reciclar cada suspiro y momento vivido; como si se pudiera dar el primer beso por segunda vez.
Lo único que puedo recopilar son los recuerdos.
¿qué loco, no?
Ya no es una simple carta.
Un pequeño papel.
Ahora son más de cien cartas.
Intentando olvidarme de tu mirada.
Y lo único que logró
Es hundirme en un dolor atroz.
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A través de la Distancia.
Historia Corta"Estas letras van dedicadas a una de las mejores amistades. Aprender la paciencia ha sido parte de él, conocerme sin yo hablar de mí, es algo que constantemente él suele hacer. Una amistad reconocida como la más extraña, y que aunque es mí mejor a...
