Narra Yanire
–Claro que lo sabe. –Respondí obvia.
–Bueno... Ya hablaré con ella. Ala a comer. –Sonrió maliciosamente.
Jesús y yo asentimos y nos sentamos, esta vez sí, para comer. Tampoco había sido para tanto, ¿no?
Comimos tranquilamente, mi prima Rosa, Lucas, Santi, Jesús y yo, hablando sobre lo que haríamos esta tarde, ya que ellos se iban a la mañana siguiente, al igual que Jesús.–Entonces... ¿Tu tienes un hermano gemelo? ¿Y es igual que tú?
–Sí, y está fuera de tu alcance. –Carcajee.
Cómo habéis podido observar, nos llevamos mal. Muy mal.
Es igual que mis padres, así de remilgados ,y pijos asquerosos. Yo antes era así, y joooooder, en realidad,no disfrutaba nada la vida.–No te he preguntando a ti. Pesada.
–Oh. –Reí de nuevo. –¿Es obligatorio que venga ella esta tarde? –pregunté a Santi. –Se me están quitando las ganas de ir.
Jesús me miró aguantandose las ganas de reír, mientras que Rosa me fulminaba con la mirada, lo cual, hizo que me riera aun más.
–Yanire, no te pases. –Me regaño Santi. –Vamos a estar en paz, y sin alterarte, ¿O te recuerdo tu estado?
¡Joder! Se me había olvidado completamente. Santi tenía razón, tenia que mantenerme relajada, si no, no sería nada bueno para la vida que está creciendo dentro de mí.
Narra Jesús.
–¡Mama, nos vamos! –Grito Yanire desde la puerta.Dio un portazo, y salió junto a mí. Su prima , Rosa, estaba todo el rato pegado a mí. No es que me gustará especialmente, básicamente, porque estaba enamorado de Yanire.
Habíamos decidido en ir a hacernos una sesión de fotos, en el Palacio Real. La idea fue de Yanire, pero a todos nos pareció genial, para así, tener un bonito recuerdo de ese día... El día en el que me enteré que iba a ser padre.–Yo quiero una con Yanire besándonos. –Sonreí mirándola.
Me devolvió la sonrisa y se tiro hacia a mí. No había una chica más bruta que ella. La cogí en brazos, haciendo que ella enrollara sus piernas en mi cintura, y la di un leve pico.
Mire hacia Rosa,la cual nos estaba fulminando con la mirada. Parecía que el cualquier momento iba a echar humo por la nariz. Qué pensamientos más tontos tengo a veces.
Ya te vale , Jesús.–Venga otra más y ya, cansinos. –Se quejó Santi haciéndonos la última foto.
Solté una carcajada por la cara que puso Yanire para la última foto, y la imite. Nunca viene mal una foto haciendo el tonto , ¿No?.
–Vámonos a comer algo, tengo hambre.
–Tú siempre tienes hambre. –La contesto Rosa con una sonrisa victoriosa.
Ay, Rosa, Rosa. Parece que no conoces a tu bendita prima, aunque,a lo mejor, no la conoce. Yanire ha cambiado tanto desde el primer día que la conocí. Me gusta más así, a decir verdad.
Mire a Yanire para ver si tenía intención de contestarla, pero, parecía que no. Mejor. No me apetecía para nada que perdiera el tiempo contestando a eso.
–¿Qué quieres? Fea. –La pregunté cuando casi nos tocaba ya para pedir.–Hamburguesa. Así, sin más. –Sonrió.
Una vez que habíamos pedido, nos sentamos en las mesas a esperar que nos lo trajeran. A lo tonto, se nos habían hecho ya las ocho de la tarde. En una hora o así, ellos debían irse, por lo que yo también, ¿qué hago yo a esas horas por Madrid? A parte de perderme, claro...
Una vez que llegue al hotel, llamé a Dani. Me aburría la vida sin él.Narra Yanire.
–Me voy a dormir ya, estoy muy cansada. –Suspire. –Buenas noches feos.–¿No cenas? Yanire...tienes que alimentarte bien.
–No tengo nada de hambre Santi.
–Ven, come solo un poco, ya sabes que tienes que cuidarte.
Asentí y me acerque a él. Me senté en un sitio que había libre a su lado, y cogí un tenedor con intención de comer algo , por mucho que no tenga hambre.
–Primita, más te vale llamarme para ver qué tal todo, eh.
–Obvio,primito. Cuando vaya al médico ya te diré. –Rei. –Y cuando se enteren ellos. –Señale a mis padres. –Tambien.
–Suerte, seguro que la necesitas.
Solté una carcajada asintiendo, y mire a mis padres. Ellos estaban cenando en otra mesa, y por suerte ,Rosa también. No tenía ningunas ganas que ellas se enterará de que estoy embarazada. Se lo diría ya mismo a mis padres.
–Pero, si usaste condón ,¿por qué te has quedado embarazada? –Pregunto Santi alzando las cejas.
–Se habrá roto,y no nos habremos dado cuenta, ¿no? Es la única explicación lógica que le encuentro.
–Vaya mierda. –Rio Lucas.
–Dímelo a mi... ¿Y si papá y mamá me echan de casa?
–Buah, pues no te diría que no. Puedes venirte a vivir a la mía, hay sitio en mi cuarto.
–¿Y aguantar a Rosa todos los días de mi vida? Oh, prefiero dormir en la calle. –Rei.
–No te van a echar, si te echan, me voy yo también. –Asintió
–Oye ,gracias por todo. Me alegra tenerte como hermano.
–No me tienes que dar las gracias, sé que hubieras hecho lo mismo por mi.
Asentí sonriendo y le abrace. Lucas contempló la imagen mientras que se comía su hamburguesa. Sí, otra vez comió hamburguesa, y lo mejor de todo, no engordaba. Estaba bastante bueno, creo que salí a él.
–Ya sí que si, me voy. Ya he alimentado al pequeñín. –Rei.
Los dos soltaron una carcajada y me dieron las buenas noches.
Subí a mi cuarto, me puse mi cómodo pijama, y cogí el móvil mientras que estaba en la cama.
Me llegó un mensaje de Jesús dándome las buenas noches.
Qué bonito que es, y que suerte tengo de tenerle solo y exclusivamente para mí.Continuará...
Votad si os gusta💚

ESTÁS LEYENDO
a escondidas
Fiksi PenggemarLa familia de ella, tenía una tradición, pero... ¿Será capaz de cumplirla después de conocer a Jesús Oviedo?