capitulo quince.

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Narra Calum.
En quince minutos tenía que irme a casa de los Oviedo. Me coloque bien la camisa ,mirándome por última vez en el espejo. Cogí el móvil y salí cerrando la puerta detrás de mí. Tenía ganas de estar con ellos, después de un año entero sin vernos.

-¡Hola! -Sonreí entrando cuando Jesús me abrió la puerta.

Pase y me senté en el sofá junto a ¿Santi? Si, creo que se llamaba así. Cómo podéis comprobar, para los nombres soy demasiado malo. Le saludé chocando las manos, y saque el móvil.

-Yanire vamos, que eres más pesada que nada, eh. -Se quejo Jesús esperándola en la escalera.

En cuanto escuche su nombre, me giré para poder verla, pero aún no estaba. Dani apareció después , y vino a saludarme. Al parecer, los padres se habían ido de fiesta, y estarían solos toda la noche.

-¡Pesado tú! -Escuche gritar a Yanire mientras bajaba la escalera.

Jesús soltó una carcajada y la abrazo. Cómo me gustaría ser Jesús en estos momentos. Estaba preciosa.

-Hemos decidido cenar fuera, ¿Te parece bien, Calum? -Pregunto Dani haciendo que me girará hacia él.

-Sí, por mí genial.

-pues vámonos. Me muero de hambre.- anuncio Yanire agarrando la mano de Jesús.

- cuñá, comes más que yo que se. -carcajeo Dani.

-Jesus alimentala de una vez. -bromeo esta vez su hermano.

-¡Santi! -lo regaño ella.

Todos soltamos una carcajada haciendo que ella se 'enfadara' pero, sabíamos bien, que no se había enfadado. Jesús cogió las llaves y salimos todo a fuera, hacia muchísimo calor.

-¿Dónde vamos? -Pregunte.

-Donde siempre. -Respondieron los gemelos a vez.

Narra Jesús.
Un secreto entre nosotros, me muero de ganas por besarla.
¿Cómo podía estar tan guapa? Joder.
Íbamos andando hacia nuestro restaurante. Y si, digo nuestro no porque sea de nuestra propiedad, si no, porque durante toda la vida hemos ido ahí, y ya éramos amigos de los dueños, camareros,etc.

-¿Aquí es? -Pregunto Yanire entrando y mirando a todos los lados.

Asentí cogiéndola de la cintura. Ella me besó el cuello, joderrrrr. Ojalá se rindiera ya y me bese, porque obvio, que yo no voy a ser el primero en dar el paso, tenía que ganar yo. Si, demasiado orgulloso.
Lo primero que hicimos al entrar, fue saludar a Mike , uno de los tres camareros. La cambio totalmente la cara cuando nos vio.

–Pero bueno... Si tenemos aquí a mis gemelos favoritos.

–Asi es. –Abri los brazos para abrazarlo.

Una vez hechas las presentaciones, pasamos a sentarnos para pedir nuestra cena. Nos sentamos en este orden : Dani- Calum- Yanire- Yo- Santi.

–Pero...¿Estáis saliendo? –Nos pregunto Calum.

–No.

–Sí. -conteste seguidamente.

–¿Si? A mí nadie me ha pedido nada.

–Ufffff, tío Jesús. –Rio Calum.

A ver, realmente no le había pedido nada, pero ¿no estaba claro que estábamos juntos? Si yo no estoy con alguien,no me comportó de esa manera...no sé.
Decidí no contestar a Calum, porque sabía las intenciones que tenía con Yanire, y ella le había dejado el camino completamente libre. ¿Será que ella también quería con el? Porque si es así, que se olvide de mi.

–¿Estás enfadado? –Susurro ella cogiéndome la mano.

–No. -Respondí sin más.

–No poco. –Sonrio. –Te quiero.

Puta apuesta de los cojones. Qué ganas tenía de besarla.

Narra Yanire.
En mitad de la cena , mi móvil comenzó a sonar ,era Manu. Me levanté y fui al baño para poder hablar tranquilamente.

–¡Holaaa! Te echo de menos. -Salude.

–Hola. -Saludo sin más.

–¿Qué pasa?

–¿Estás saliendo con Jesús?

Otra vez con el mismo tema. ¿Qué más dará eso? Todo el día preguntándome eso. Más que mi mejor amigo parece mi padre.

–No,no estoy saliendo con él,ni con nadie. ¿Contento?.

Dicho esto, colgué. Ya me cansé de su actitud.
Salí del baño, y volví a sentarme junto a Jesús. El cual, me miró un poco preocupado, supongo que por la cara que debía llevar.

–¿Ha pasado algo? –Preguntó Dani.

–No, nada. –Intente sonreír lo más creíble posible.

–Si él –refiriendose a Manu. –Te hace algo, se va a cagar. Es muy pesado.

–Ya Dani,no la agobies. –salio Jesús en mi defensa.

–Solo me pregunto que si estaba con Jesús, pero es que ya me cansa que este siempre así. ¿Por qué no puedo ser como las demás chicas y tener novio? ¿Tan malo es?

–Ven. –Dijo Dani ofreciéndome su mano.

Enlace mi mano con la suya y me llevo fuera del restaurante. Había un banco justo en frente de la puerta, así que, nos sentamos ahí.

–No le hagas caso, ni a él, ni a tu padre, ¿Vale?

–¿Cómo no voy a hacer caso a mi padre?

Me empecé a poner más nerviosa, lo que llevo a que empezará a llorar. Dani me acerco más a él y me abrazo. Él sí que era un buen amigo.

–Escuchame. -Susurro acariciándome el pelo.

Continuará...
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