Ahí estaba, en el Backstage de mi concierto número trece de mi gira On The Run Tour, estaba a punto de presentarme ante más de cuarenta mil personas, tal vez más, tal vez menos, pero de todas aquellas personas que coreaban a todo pulmón mis canciones, que tenían carteles con frases como: "Te amo Paul", "Espere cinco años para verte", "Cásate conmigo", o simplemente gritaban mi nombre.
Solo una persona me importaba, una hermosa morena de ojos avellanados, cabello castaño como el café con leche, pero bastante corto de leche, delgada, de curvas perfectas y una impactante sonrisa.
Termine de alistarme, me pare frente al espejo y le sonreí a mi reflejo y metí la mano al bolsillo derecho de mi pantalón, toque la pequeña cajita de terciopelo negro, hoy sería el día, definitivamente Nancy Shevelll sabría mis más profundos y hermosos deseos por ella, le daría mi amor, todo mi amor seria para ella.
Pues después de ese amargo trago con Heather y cinco años de noviazgo con Shevell, estaba decidido a volver a empezar, volvería a amar.
-Señor McCartney-interrumpió alguien del staff-Todo esta listo.
-Si muchas gracias, salimos en cinco.
-De acuerdo señor.
Tome mi Höfner y salí del camerino, los chicos comenzaron a acercarse a mí, como siempre juntamos las manos en el centro, dimos un pequeño grito y salimos al escenario.
Ahí estaban cuarenta mil pares de ojos mirándome, sonriendo, gritando e incluso bailando de la emoción.
-¡Buenas noches Nueva York!-salude-¿Están listos para rockear?
La gente estallo en bitores y comenzamos con los poderosos acordes de Lonely Road, seguida de Only Mama Knows, todo estaba de maravilla, los chicos lo disfrutaban, la gente lo pasaba bien y entonces un cartel llamo mi atención:
"Paul, ¿Podrías ayudarme a pedirle matrimonio a mi novia?, por favor".
Terminamos la canción, y tome el micrófono.
-Hagamos una pequeña pausa-me saque el bajo y lo puse sobre su pedestal-Amigo puedes subir aquí, si tú el que necesita de mi ayuda.
Sería el pretexto perfecto para llevar a cabo mi plan, pues en varios países del globo terráqueo, había ayudado a los jóvenes enamorados, pero lo que hacía especial esta ocasión, es que sería yo quien pidiera matrimonio en mi propio concierto.
La joven pareja subió al escenario, la chica me abrazo y beso mi mejilla, mientras que el apretó mi mano y me miro con una cara de angustia, que me puse a rezar, por no tener la misma expresión que él.
-¿Cuáles son sus nombres?-acerque el micrófono-¿Qué es lo que necesitas amigo?
-Yo soy Lindiana y el mi novio Zack.
-Un gusto Lindiana, Zack, déjame leer esto.
Tome su letrero y lo expendí, ya saben como1 en las exposiciones, entonces el chico se arrodillo, saco su cajita con el anillo.
-Adorable Lindiana, ¿Quieres casarte conmigo?
-Oh Zack, y-yo...yo
Los ojos del chico brillaban, tenía ese brillo especial, ese brillo como los niños pequeños, cuando bajan en Navidad y ven el árbol repleto de regalos, con envoltorios brillantes y gigantescos moños.
-Lindiana...
-Lo siento Zack, pero no me casare contigo
Y corren a destrozar el papel para descubrir un gran trozo de frio y negro carbón.
La chica salió corriendo del escenario, dejando al pobrecillo humillado, ante una enorme multitud, recogió su dignidad y su letrero, me acerque a abrazarlo.
-No te preocupes, la tercera es la vencida-me separe estreche su mano y le obsequié la plumilla que traía en mis manos-¿Quieres que lo firme?
-No gracias.
Un soldado del amor, había caído en plena batalla. Y entonces mis ojos comenzaron a buscarla entre la multitud, pero por lo visto aun no llegaba al lugar, o estaba fallando bastante como para no verla.
-Vaya es una lástima-trate de liberar un poco la tensión del ambiente-Saben me recuerda la primera vez que me declare a una chica, tenía diez años, su nombre era Sally y me golpeo la cara con mi rosa.
La audiencia estallo en carcajadas, al igual que yo y entonces a mi mente vino Silly Love Songs.
-Así de traicionero es el amor, amigos míos-me coloque el bajo de nuevo-¿Ustedes que opinan de las tontas canciones de amor?, ¡Para los fans de Wings!
Comenzamos a tocar, de nuevo la gente coreaba a todo pulmón, y entonces gire a mi izquierda y ahí estaba, mi querida dama, tras bambalinas, con un hermoso vestido blanco de encaje, zapatos bajos, bailaba al ritmo de la canción.
Me quede mirándola, apreciando su belleza, y sus movimientos, algo había en esa mujer, que hacía que perdiera la cabeza, me estremecía con solo mirarla.
Y entonces me arme de valor, ¡Me importa una mierda si me dice que no!, si no te arriesgas jamás podrás saber lo que puedo haber sido, suspire hondo y me acerque al micrófono.
-¡Paren todo!-grite-¡Solo un segundo!
Fui en dirección a Nancy, la tome de la mano y la arrastre conmigo al escenario, la gente del lugar se sorprendió, algunos ahogaron un grito, otros comenzaban a murmurar, pero realmente eso no me importaba.
Incluso Brian, Rusty, Abe y Paul se sorprendieron, por tan repentina aparición de Nancy.
-¿Qué estás haciendo Paul?-cuestiono asustada, le tome de la cintura y la senté en el taburete del piano-Paul, ¿Estás seguro de esto?
-Nancy, nunca he estado seguro de lo que hago.
Le dedique un guiño, tome mi guitarra acústica y me acerque al micrófono.
-Muy bien, esta noche todos ustedes serán privilegiados, pues serán los primeros en escuchar "I Can Bet".
Mire a Nancy, le sonreí y ella me devolvió el tierno gesto, mis músicos se quedaron quietos, esperando alguna señal para tocar, pero por esos instantes solo éramos Nancy y yo.
No había cuarenta mil pares de ojos observando, ni mucho menos cuatro personas mirando en silencio, no solo mi castaña, la guitarra y yo.
-Se sincera conmigo, crea conmigo, no esperes que este quieto-me fui arrodillando frente a Nancy-Pero soy tu hombre, no tengo un plan y estaré ahí cuando estés lista.
-¡Oh por Dios Paul!
Deje la guitarra a un lado y saque la cajita con el anillo, era un bonito diamante.
-¿Qué dices Nancy, aceptas casarte con este pobre diablo?
-¡Por supuesto!
Le puse el anillo y la abrace incluso le di una vuelta.
-¡Dijo que si!-tome su mano, mostrando el anillo-¡Ella dijo que si!
Todos aplaudieron en señal de victoria, le di un corto beso en los labios y seguí tocando.
Ambos salimos del registro civil de Marylebone, rodeados de la gente que amábamos, fuimos cubiertos por una lluvia de pétalos, aplausos y ovaciones, por parte de los fans
-¡Te amo Nancy Shevell!
-Sigues siendo todo un romántico-Nancy tomo mi mano-¡Te amo Paul!
Ambos posamos para las cámaras, con las manos entrelazadas y arriba en señal de unión, pues ahora podía apostar a que mi vida a lado de Nancy, seria perfecta.
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The Beatlegirls One-Shot's
FanfictionBueno como sabrán todos mis proyectos siempre incluyen algo de homosexualidad, así que ya saben que encontrarán aquí. Espero que sea de su agrado y como siempre si no te gusta leer este tipo de contenido no lo hagas y ahorrarme la molestia de leer t...