Despierto sábado a las 6:00 a.m., es mi quinto día en Corea y aún no me acostumbro muy bien al cambio de horario. Antes vivia en Colombia con mis padres, por lo que estar despierto ahora es como estar despierto a las 4:00 pm del día viernes.
Rápidamente hago la cama, lavo mis dientes y tomo una ducha de agua caliente. Termino de desempacar las cosas de cada caja que hay en mi cuarto y al terminar bajo a la cocina para preparar el desayuno. Cuando entro un tropiezo con mis pies y caigo al suelo tirando la Caneca llena de basura.
"Que tonta soy" pienso de inmediato. Me lanzó de prisa a recoger todo con la esperanza de que mi hermana Leslie aún esté dormida, ella trabaja muy duro cada día para sobrellevar sus gastos y ahora también los míos.
-¿Qué fue ese ruido y qué estás haciendo tirada en el suelo? -Preguntó Leslie somnolienta.
-Lo siento, me tropecé, no quise hacer ruido y despertarte ... Lo lamento. -Dije sonando culpable.
-Tranquila pequeña, sé que no fue a propósito. Además fue genial que me despertaras ahora o se me iba a hacer tarde para alistarme.
Tranquilamente besó mi frente y camino hasta la encimera poniendo a funcionar la cafetera. El olor a café inundó la cocina y eso me hizo sentir nostálgica. Solo había estado en Corea por un par de días pero se sentía como una eternidad.
-¿Quieres que te haga el desayuno? -Pregunté.
Los ojos de Leslie se abrieron de par en par luciendo atónita. -¿Sabes cocinar?
-Ehm ... Si. -Respondí un tanto aturdida.
-Creo que me ha perdido una parte importante de tu vida.
-No lo he hecho, solo han sido un par de años, no es gran cosa, además mamá y papá siempre están ocupados y no quería morir de hambre.
-¿Eres buena cocinera?
-No lo sé, pero tú sabes, echando a perder se aprende.
Las dos reímos, tomé un pequeño sartén, huevos y tocino, los favoritos de mi hermana. Luego, puse los trastes en el lavavajillas y subí a mi cuarto mientras Leslie tomaba una ducha antes de ir al trabajo. En dos días era mi primer día de clase en la universidad y me sentí realmente ansiosa por comenzar y para estar bien preparada, tendría que ir al mercado a comprar todo lo necesario.
Siempre me ha gustado plasmar los momentos perfectos en fotos, es por eso que desde muy chica supe que estudiaría fotografía; aunque entre mis planes nunca estuvo hacerlo en un lugar tan lejano de mi país natal. Cepille repetidamente mi cabello y lo até con una liga en la parte baja de mi cabeza, puse un poco de rimel en mis ojos y brillo labial en mi boca. Tomé mi bolso, colgué la cámara en mi cuello y salí a caminar por el vecindario luego de despedirme a mi hermana.
El lugar era realmente lindo, las casas tenían fachadas muy bien pulidas e impecables, en especial una llamó mi atención, era totalmente blanca y los marcos de las ventanas eran de un rojo brillante, muy parecido a la nuestra, salvo que nuestros marcos eran de color lila.
Me sorprendí al ver una chica coreana realmente hermosa que revoloteaba como loca a lo largo de su jardín, saltaba y se contoneaba sin cesar al ritmo de quién sabe qué cosa, pues no noté que tuviese audífonos de ninguna clase. Una sonrisa se expandió en mi rostro al ver su energía, supe que tenía que plasmar eso en una fotografía. El flash salió y la chica se detuvo.
-¡Oye! ¿Qué crees que acabas de hacer?
-Oh, lo siento, yo solo tomé una fotografía. -Dije un poco asustada.
-¿Por qué? -Dijo confundida.
-Me gustó tu ... Ehm ... Tu. -En ese momento salió un relucir mi lado tímido, nunca fue de esas que van por la calle hablándole al mundo como si nada pasara.
-¿Mi qué? -Dijo un poco divertida. -Olvidalo, ¿No eres de aquí verdad?
Negué con la cabeza.
-¿De donde eres?
-Soy de Colombia. -Dije bajando la cabeza. -Pero acabo de mudarme con mi hermana, yo ehm ... vivo en esa casa.
-¡OH POR DIOS! ¿Eres la hermana de Leslie?
-Así es.
-Estaba ansiosa por conocerte, Leslie es mi cuñada y escuché cuando ella hablaba con mi hermano de ti, decía que era realmente genial y quería comprobarlo por mí misma.
-¿Mi hermana tiene novio?
-Sí, se llama Jung Ho-seok y es mi hermano mayor.
Asintió. Oh genial, ahora me sentí como una completa chismosa al saber eso, aunque honestamente no entendía porque no me había dicho nada de él. De repente, la puerta se abrió y una sola señora salió.
-Oye, si quieres salir algún día, conozco un sitio realmente genial donde hay chicos lindos. -Dijo con una sonrisa coqueta. -Por cierto, mi nombre es Jung Jiwoo.
Me abrazó y volvió a su casa dando pequeños saltitos, mientras que yo me quedaba completamente estática frente a su casa. Luego de unos minutos continuará mi camino hasta llegar a una gran plaza, había un número de lugares que me encantaría ver pero la tienda fotográfica era mi destino.
A lo lejos vi una fuente que lucía como de cuento de hadas, tomé mi cámara de nuevo y saqué una fotografía, en realidad, saqué diez. Compré los repuestos que necesitaba y volví a casa para revisarlo todo en mi laptop. Todo lucía perfecto, hasta que en una pequeña parte de todas mis fotos, noté una sonrisa que me dejó perpleja. Aquella radiante sonrisa pertenencia a un chico asiático, tenía rasgos realmente hermosos aunque su rostro estaba nublado. La simpleza y ternura de su sonrisa me cautivó en un instante.
Quería saber de quién era. Necesitaba saber quién era.
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Retrato de amor -- (Taehyung y tú)
Fanfiction¿Podrías enamorarte de alguien a través de una fotografía? ____ pensaba que no, sin embargo encontró una hermosa sonrisa rectangular que la cautivó; sin embargo, no contaba con que aquel portador llegaría a su vida sin avisar. ¿se atreverá a amarlo...