Retrato de amor -- (Taehyung y tú)

Capítulo 24

**Narra ____**

El camino al aeropuerto fue silencioso y desolador, porque aunque quería aferrarme a la idea de que el estar en Corea era la peor decisión que había tomado, no se sentía así en absoluto. Las calles, los edificios y hasta aquellas personas con las que me había cruzado un par de veces en la calle cuando iba de prisa, quedarían en lo poco que quedaba de mi corazón, porque Corea y sobre todo Seúl me había mostrado una realidad diferente, una realidad en la que había encajado por primera vez, una realidad en la que por un momento había sido feliz; sin embargo, Corea también me había quitado todo lo que más quería, se me había llevado las fuerzas de vivir, de salir adelante.

No estaba segura de cuánto podría mejorar o empeorar en el regreso a América, pues Colombia estaba a demasiados kilómetros de distancia como para considerar cualquier acercamiento con aquellos que siempre estuvieron para mí en los momentos malos, esos mismos de los que no me había despedido, por temor a fracasar y a declinar mis decisiones.

Y Tae, mi Tae. Aquel hermoso chico que me llenó la vida de alegría, los días de color y el corazón de un profundo y sincero amor, aquel que apareció en mi vida a través de una pequeña imagen, aquel que robó todos mis sentimientos en un santiamén. Dios, realmente rogaba porque él pudiera hacer las cosas bien.

El merecía algo mucho mejor.

Less por su parte sollozaba silenciosamente con su vista fija en la ventana y dolía tanto verla así.

-No tienes que hacer esto, puedo regresar sola. –Dije tomando su mano.

-Claro que debo hacerla, eres mi hermanita y debo cuidar de ti.

-No es tu obligación hacerlo, no es necesario, sé cuánto amas Seúl y cuánto te duele estar lejos de Hoseok, así que no lo hagas, sabes que no quieres esto.

-Pero no te quiero perder a ti también, no quiero que me dejes...como ellos. –Dijo mientras cubría sus ojos con su antebrazo libre.

La abracé con fuerza, pero no podía decir nada para animarla o intentar calmar su preocupación por que yo más que nadie sabía cuán difícil se habían vuelto los días y cuánto disminuían mis ganas de vivir. Yo más que nadie sabía que esa situación estaba consumiendo mi vida por completo, destrozándola poco a poco.

-No me perderás, porque aunque ya no estemos juntas, siempre estaré a tu lado.

-Prométeme que nunca te irás como ellos... -Dijo mirándome suplicante. –Dime que no me dejarás también.

-Yo... -Mis ojos se llenaron de lágrimas, no iba a mentirle; pero tampoco le diría lo que sentía. –Yo no puedo prometer algo que no sé si pueda cumplir; pero lo intentaré... yo realmente intentaré con todas mis fuerzas.

-Pero...aquí podemos buscar ayuda, aquí...

-No puedo estar aquí, no quiero hacerlo, esto me mata más rápido de lo que crees, yo realmente debo irme pero...

-¿Pero qué? ____, dime ¿qué pasa?

-No quiero llevarte conmigo.

-Pero iré de todas formas, no hay forma de que yo pueda quedarme aquí cuando te irás sola al otro lado del mundo.

Bajamos del auto y caminamos hasta donde anunciaban el vuelo, hace días había completado todo el proceso con migración y el proceso agilizaría mucho más. Y aunque sabía que Less me odiaría por un tiempo, había cancelado su boleto y tomado sin permiso su tarjeta, motivo por el cuál no podría volar conmigo o comprar un vuelo para seguirme.