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— Momo ayer se quiso suicidar...

Mina, en sus sueños más profundos , escuchaba.

Chaeng le sostenía la mano, hablándole calmada pues su amiga estaba en el mismo hospital siendo curada. Resulta que algunas cortadas eran algo graves, y el frío del agua en su no era correcto.

— Le dije que no lo hiciera, varias veces...pero creo que no me toma en serio...quizás...— observó sus propias muñecas y las escondió rápidamente con su suéter. Mina está tan decepcionada de ella, pero le entiende, quizás por esa razón no le ha reclamado.

— Momo dice que quiere ir con ella... DaHyun le dijo que no tenía por qué, que NaYeon la cuidaba desde el cielo...pero...¿Desde dónde me cuidas tú? — aspiró algunos mocos, observando el semblante calmado de su chica. Odiaba como ese respirador cubría parte de su belleza. ¿Qué iba hacer?, no podía despertarla para que dejara de usar eso.

— Me tengo que ir...feliz día...me temo que no vendré más por el día de hoy. Tú misma me lo dijiste, alguien me necesita más despierta que dormida.

Sonrió para sí, besando la frente de Mina para luego retirarse y reír con gravedad; DaHyun se acercaba con Momo a toda rapidez en la silla de ruedas, riendo como dos pequeñas adolescentes.

— Ya, unnie, no quiero morir hoy...— se quejaba la castaña, abrazándose a sí misma, ocultando sus vendas en los brazos.

Que cliché, ¿no?. No quieres morir cuando ya lo intentaste, porque luego te das cuenta de que sí hay por qué seguir viviendo.

— Unnie, Momo necesita descansar...

— ¡Qué descansar! Me llamaron a las tres de la mañana, ahora, pijamada. ¡Vamos!. — la pelirroja empujó a ambas y las llevó hacia la salida.

¿DaHyun podría ser la nueva sonrisa de esas chicas?

****

— Tofu, no creo que sea buena idea...

— Por decirme así te ganas un castigo Hirai, ahora, como castigo, iremos a la peluquería. Las tres.

Ambas chicas se quejaron, molestas y cansadas. Luego de la pijamada y dormirse a las cinco, la mayor las despertó a las diez con la escusa de que irían a un salón de belleza. ¿Tan mal se veían?. Sí.

— Yo no quiero...estoy de luto...

— Con mucho respeto, estar de luto no te quita la posibilidad de verte más bonita de lo que eres, ok. — DaHyun explicó, empujando la silla de ruedas por la acera, observando por donde podrían meterse a darse una manita de gato.

— Yo...

ChaeYoung iba a quejarse pero la pelirroja le miró mal, sonriente pero con esos ojos asesinos.

— ¿No crees que a Mina le gustaría despertar y ver que el tiempo no ha pasado? ¿Que su dulce Chaeng sigue estando? — la menos asintió. La más pálida sabía cómo usar las cosas en su contra. — ¡Vamos!

Las tres sonrieron.

Olvidándose por un momento de las otras cosas que atormentaban sus vidas.

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Holaaaa.
Esperó sea de su agrado. Me cuesta mucho escribir cómo chaeng se siente con todo esto.

Dream『MiChaeng』#エエDonde viven las historias. Descúbrelo ahora