Caminamos a través del pasillo para ir a la habitación de Dani. La cena ha ido bien menos por esa pregunta tan... incómoda. Amy no deja de reírse a lo que Dani se ha unido a ella y yo camino intentando no reírme con la risa de Amy. Tiene una risa muy parecida a la de Paula Baena (de Around the Corner) y si la risa de esa chica me hace gracia imaginaos la de mi amiga. Jesús se está riendo también de esa situación tan rara, ya que otra cosa no podemos hacer. Entramos a la habitación de Dani, y algo que me llama la atención es que no comparte habitación con Jesús. Pensaba que sí. Me fijo en su habitación y la verdad es que mola. No suelo fijarme en las cosas de primeras si no me detengo un rato a mirar. Y eso hago.
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- ¿Piensas dejarme pasar? -dice Jesús detrás de mí ya que iba el último y yo estoy parada en la puerta de la habitación-
- Si no queda otra opción -digo y él me sonríe-
¿Está de buen humor?
Eso parece.
- Vaya ventanal chico, tu vecino de enfrente estará contento -me río y Dani me da un empujon y me tira a su cama- Dani, cariño mío, sé que me quieres en tu cama pero se un poco más discreto ¿no? -digo divertida-
- Joder, me has pillado -dice Dani lastimandose falsamente-
- Cuidaaaaaao que vooooooooy -dice Amy y se tira encima de mí-
- Serás cerda -río y ella se ríe también-
Seguidamente se tira Dani encima nuestra, y los tres nos caemos de la cama. Jesús está sonriendo apoyado en el marco de la puerta mientras nos está grabando.
- Tú simio estúpido deja de grabar y ven con nosotros -le digo a Jesús y este se sienta en el borde de la cama-
- Va cantaros algo -dice Amy y ambos se miran-
- ¿Nuestra o de otro artista? -dice Dani-
- Como queraís -digo yo-
- Bua vais a flipar -dice Dani cuando le cuenta a su hermano su plan- va levantaros y separaos un poco -nos dice y nosotras le hacemos caso-
- Al calor de tu mirada...
Al abrigo de esa piel que tantos sueños recorrí.
Yo me quedo si puedo elegir, siempre contigo, bien cosido a tu perfil.
A tu sombra y tu radiante luz...
A tus lágrimas también y a tu manera de reír.
Yo me quedaré si puedo elegir, pegado a tus huesos orgulloso y tan feliz.
Porque no hay nadie como tú, nadie que ilumine mi universo de color...
Nadie que me ponga a bailar el corazón, nadie que me eleve hasta el mismo sol... -cantan los dos y Dani se acerca a mí, me coge de la mano y me da una vuelta y Jesús le hace lo mismo a Amy-
