Canciones para ti {Gemeliers}

Planes.

Amy.

Continuo manteniendo la mirada a Dani, y él reacciona, por fin, mirando hacia otro lado. La esperanza que quedaba dentro de mi corazon se ha destrozado. Trago saliva. Creía estar lista para pasar por esto pero no lo estoy y él tampoco. No esperaba que me abrazara ni que me dijera lo mucho que me quiere simplemente me esperaba algo que no sé que es. De verdad, no sé explicarme pero, joder. Sus fans lo miran confusas e intenta aparentar normalidad por lo que decide hablarme.

- ¿Que haces aquí? -pregunta sin ninguna expresión-

- Yo, eh... -digo y me mira a los ojos- ¿venía a saludar...? -digo no muy segura- 

- Después de 3 meses, ¿lo único que se te ocurre decirme es que vienes a saludar? Joder, Amy.

-  ¿Y qué quieres que te diga? -le pregunto y me da el disco-

- No sé por que esperaba algo más -dice-

Acerca su cara a la mia para darme dos besos y seguir así disimulando, y cuando su respiración y la mía chocan una vez más después de tanto, mi corazón late con más fuerza que nunca. Bajo del escenario y los gemelos hacen un descanso, un seguirita pasa por mi lado y tira de mi brazo, y veo a Jesús detrás del escenario.

- Amy -me dice mi amigo con una sonrisa- ¿quieres hablar?

- Si quisiera hablar debería hablar conmigo ¿no crees? -dice Dani apareciendo por detras de su gemelo-

Joder...

- Dani... -dice Jesús-

- No, es más ¿por qué no vienes al hotel esta noche a cenar? Seguro que te encantará pasar a saludar... -dice Dani alzando una de sus cejas-

Controlate amiga.

Control Amy,

Control.

A la mierda el control .

- Allí estaré, Daniel Oviedo.

Esto va a ser un puto desastre,

no sé por qué le sigo el juego;

creo que soy tonta,

tontísima, más bien.

Jesús.

Veo a Dani recorrer un lado al otro su habitación.  Y no puedo evitar reírme, parece que va a cagarse de los nervios que tiene encima ahora mismo. Sabe que lo estoy mirando y me mira.

- ¿Qué? -me pregunta-

- Te veo nervioso, -le digo divertido- más que Rubius en un torneo de Fornite.

- Nah no lo estoy... -hace una pausa de unos segundos y me mira- la he cagado diciendole que viniera ¿verdad?

- A ver, cagarla no, porque yo le iba a decir que viniera, hace mucho que no la veía y tenía ganas de estar con ella -le confiesa y asiente-

- Si no se hubiera ido, no la habrías echado de menos, y tal vez, yo no estaría así por ella -admite jodido-

- ¿Has probado a pensar o ni si quiera sentirte como ella por un segundo? -le pregunto y me mira-

- Pareces Alex -dice poniendo los ojos en blanco- pero ¿sabes qué? Si Amy no se preocupó por mi, ¿porque debería preocuparme yo por ella ahora?