Capítulo 6. A escondidas.

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Las naves aterrizaron en el planeta Kavit una seguida de la otra. Unos minutos antes de penetrar en la atmósfera los integrantes de las cápsulas despertaron cuando el gas que los obligaba a dormir desapareció por completo.

Bulma se sobresaltó ante el impacto contra la colchoneta preparada para el aterrizaje de la nave. No fue nada brusco pero nunca antes había tenido la oportunidad de viajar dentro de una de ellas.

Miró el teclado que tenía delante mientras se quitaba el cinturón de seguridad. Presionó uno de color verde que hizo abrir la compuerta del transporte. Observó desde dentro la sala de aterrizaje donde se encontraba, la cual le resultó muy parecida a la de la base. Apoyó su mano en los bordes de la cápsula y se impulsó para salir fuera.

Cuando se encontraba en pie sintió todo su cuerpo tenso por culpa del viaje. Por muy dormida que había permanecido estuvo incómoda en su asiento. Estiró un poco los brazos mientras dejaba salir un bostezo. Miró a su alrededor buscando al escuadrón saiyajin que, para su suerte, no tardó en divisar.

Salió corriendo a su encuentro pero redujo su velocidad a un paso lento al ver que no estaban solos. Nappa estaba entablando conversación con un hombre de apariencia felina. Todo su cuerpo estaba cubierto de pelaje dorado, su cabeza era igual a la que tenían los leones, sus ojos eran amarillos y podía apreciar sus dientes afilados. Su melena era larga y trenzada de color platina dejando ver sus puntiagudas orejas peludas con varios pendientes adornando en ellas.

Cuando la joven se puso al lado de los guerreros Nappa la presentó.

–Ella es Bulma, Lord Kavit–dijo el gran guerrero al felino–. Jefa del departamento científico de la base de Lord Freezer.–

Bulma miró extrañada al saiyajin. Ese cargo pertenecía a Malaka no a ella. Freezer jamás pondría a una mujer al frente por muy inteligente que fuera.

–Un gusto en conocerla, jovencita–Bulma miró al hombre con voz fuerte y segura, no parecía temer a los presentes, algo que si se podía apreciar en los guerreros que a él le acompañaban–. Soy Lord Kavit XV, señor y Rey del planeta Kavit.–

–El placer es mío, Lord Kavit–Vegeta miraba con repugnancia el intercambio de palabras amables entre el Monarca y la humana.

El Príncipe mandó a Nappa a ser quien hablase con el representante del planeta. Por cargo real debió ser él pero no quería ser más participe en la pantomima que era trabajar con Zarbon. No pensaba hablar sino era para algo realmente importante y ahora mismo no lo era.

–He escuchado hablar mucho sobre los logros en el departamento que lleva–Bulma mostró una radiante sonrisa. Malaka siempre se benefició de todo lo que ella hacía o ideaba y ahora una persona le estaba elogiando directamente cuando nunca nadie lo supo–. Es por eso que en numerables ocasiones intentaban contactar con Lord Freezer para que pudiera ayudarme. Nunca recibí una contestación hasta hace unos días.–

–Lord Freezer tiene que atender a muchos planetas subordinados que precisan de su ayuda–mintió Nappa con destreza–. ¿Cuánto tiempo llevarán los arreglos ordenados?–

–Espero que poco–contestó el felino al saiyajin calvo para luego guiar su mirada a la joven científica–. Es una pregunta que debería realizarse a la señorita Bulma.–

–Si tuviera ocasión de ver mi lugar de trabajo podría darle una respuesta exacta–Kavit sonrió como contestación.

–Permitidme primero enseñaros donde se alojarán–el monarca se giró dándoles la espalda al escuadrón y la joven para ordenar a sus sirvientes–. Acompañen a nuestros invitados a los dormitorios asignados.–

Almas perdidas [BulmaxVegeta] ORIGINALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora