Capitulo doce: Alerta de tormenta

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Estuvimos voladon por un par de horas hasta llegar a las aguas que les pertenecían a Berk y sintieron como el viento soplaban mas fuerte y empezó a hacer mucho frío.

Al parecer ya empezaron la primeras brisas de la tormenta--dijo Patán frotando sus manos para hacer algo de calor.

Si, pero con este viento llegaremos a Berk lo más rápido posible--dije sintiendo como el viento no sólo era frío, sino que también soplaba mas fuerte en dirección a Berk dándonos un poco más de velocidad.

Pero no lo suficiente como para llegar a Berk en unas horas más, calcularía que llegaremos a la amanecer sino estuviéramos empujando el barco--dijo Patapez mirando al barco que empujabamos.

Entonces yo me adelantaré a Berk con mi padre--dije descendiendo al barco y contarle a mi papá sobre lo que planeaba.

¿Y cómo lo harás?--dijo Patán curioso y sonando con burla.

Te recuerdo que con la nueva cola de chimuelo podemos ir más rápido, casi tres veces más rápido de lo que somos--dije volviendo a volar con chimuelo esta vez con mi padre con nosotros--mi papá tiene que llegar antes para preparar todo sobre la tormenta.

Lo siento chicos, pero Hipo tienen razón--dijo mi papá tomando la voz--pero hable con la tripulación y aceptaron que podían irse sin preocuparse por ellos, después de todo ya estamos cerca de casa.

Esta bien, soltemos las amarras--dijo Astrid y todos hicimos lo que nos pidió Astrid, empezamos a volar con mas velocidad dejando al barco cada vez más lejos.

Bien chicos, nos veremos al amanecer en Berk--dije y todos asintieron, cambie de pedal y volar a una velocidad dejando a mi padre sorprendido con lo veloz que iba chimuelo.

Con esta velocidad llegaremos como en dos horas--dije a mi padre, tenia los ojos entrecerrados por el viento que golpeaba mi rostro.

Mientras que lleguemos a Berk, está bien, tenemos que organizar todo para la llegada de la tormenta--dijo mientras se sostenía su casco por lo poco que casi sale volando.

Bien--fue lo único que dije, pero en realidad llegaríamos a Berk en menos de dos horas sin mi padre, creanlo o no, esta cola es lo suficientemente liviana como para ir de Berk al Paraíso en menos de un día, valió la pena todo mi esfuerzo para que funcionará.

Al pasar un tiempo pude ver la silueta de Berk a kilómetros de distancia y desperté a mi padre que estaba dormido, lo cual se sorprendió al ver lo cerca que estábamos de casa.

Muy bien hijo, ya estamos cerca--dijo felicitando mi padre.

Muy bien chimuelo, ya casi falta--dije a chimuelo quien estaba emocionado por llegar.

Al llegar por fin a Berk, vimos a Bocón que se encontraba caminando por el pueblo tranquilo, quien a vernos se acerco a darnos la bienvenida

Estoico, Hipo yo creí que llegarían mañana--dijo Bocón sorprendido por nuestra repentina llegada.

Si, sino fuera por la nueva cola de chimuelo llegaríamos mañana con los chicos, pero mi papá necesitaba organizar los preparativos para la tormenta--le explique hablando serio a lo cual bocón entendió el motivo.

Bien, no a habido señales de la tormenta, solo un poco de frío, pero es normal--dijo un relajado Bocón--todavía queda tres semanas para la tormenta.

Si, pero nunca está de más adelantar los planes, Bocón--dijo mi padre--y cómo a estado las cosas en mi ausencia

Nada nuevo, es más a estado muy tranquilo las cosas--dijo con una sonrisa--las únicas cosa que a pasado que e estado en la herrería atendiendo pedidos y arreglado unos dientes, nada nuevo.

AAAHHHGGG!!! VIENE LA TORMENTA!!!--dijo Cubeta apareciendo de la nada gritando desesperadamente la misma frase sujetando su cubeta con fuerza pasando corriendo a lado de nosotros casi empujandome y seguir corriendo hacia quién sabe donde, segundos después Abono apareció deteniéndose a lado de nosotros.

Hipo ,jefe ¿cómo...están?--dijo recuperando su aliento--lleva hací desde que se fueron, bueno me voy, tengo que seguirle el paso y que no haga una locura.

Al terminar su oración, volvió a correr y tener suerte de encontrar a Cubeta, papá y yo miramos a Bocón con miradas serias incluso chimuelo lo mira con una mirada seria.

Bien, me salte esa parte--soltó alzando los brazos en forma de rendición--y para ser sincero, no le sigo creyendo que con se le apriete su cubeta prediga el clima, la vez anterior solo fue una mera coincidencia.

¿Igual qué las últimas veinte?--dije recordando cuanta veces a ocurrido sus predicciones desde hace un año exactamente.

Exacto--dijo ignorando el sarcasmo de mi comentario.

Bien, sino estás de acuerdo con cubeta--dijo mi papá.

De nuevo--dije cansado de lo mismo.

Iremos para que Gothi para que nos diga si la tormenta aun está a tres semanas o llegara Antes como lo predice Cubeta--dijo mi padre decidido como siempre y emprendiendo rumbo hacia la casa de Gothi, la vieja curandera.

Está bien para mí--dijo haciendo un apretón mano/prótesis a si mismo y siguiendo a papá.

Si, que nos dirá--dije sarcásticamente sabiendo que era lo que diría Gothi, como lo a echó las veintiún veces pasadas, que nos Preparemos para la tormenta alertada por Cubeta.

Al llegar a la casa de la curandera del pueblo, nos dijo que es pura locura de parte de Cubeta recordándonos que aveces se pone hací por el frío. Al salir, nos cruzamos con Cubeta y Abono quienes subían para hablar con ella, Bocón no paraba de decir que tenía razón y que aun teníamos tiempo para prepararnos para la tormenta.

Calmante Estoico, ya oíste a Gothi, aun hay tiempo--dijo Bocón con una sonrisa orgullosa por tener la razón--además que el pueblo está tranquilo, deberías aprovechar y utilizarlo como tiempo libre.

No Bocon--negaba mi padre--mi papá me enseño que, aún que el momento no lo amerite, más adelante la situación lo necesitara.

Fue una de las pocas veces que mi papá decía algo sobre mi abuelo y sin darme cuenta ya estaba oscureciendo.

Papá, me iré a la casa, ya esta oscureciendo y iré a preparar la cena y darle sus pescados a chimuelo que no a comido cuando llegamos--dije a lo cual mi papá estuvo de acuerdo y que mas tarde iría para ya.

Al dirigirme a la casa no dejaba de pensar en todo lo que paso en todo esta semana, en paraíso me trataron como si fuera Thor en persona, me Respetaron y se preocupaban por mí y como las chicas se comportaron con los chicos, principalmente con Astrid que no sé como decirle que escuche su conversación con Engla estando "dormido" y como Engla gustaba de mí, al llegar a mi casa lo primero que hice fue escribir la nota que se las mandare a la isla paraíso, sé que es apena llegamos, pero los chicos y yo estamos muy emocionados de volver y en la nota decía que llegaríamos pronto y lo amarre a un terrible terror que siempre se la pasaba en mi ventaba y había conservado para utilizarlo como correo aéreo, y que cuando llegue el momento le pediré que se los lleve a ellos cuando los chicos y yo salgamos y hablando de los chicos, estoy tan cansado que no los recibire en la mañana, lo haré después del vuelo matutino con chimuelo y además ... ¿qué es lo peor qué puede pasar?

Narra Estoico

Estaba hablando con Bocón, quien por fin lo convencí de hacer los preparativos mañana, se acerco corriendo Abono, Cubeta y Gothi quienes parecían agitados.

ESTOICO!!!--gritaron abono y cubeta.

¿Qué sucede?--pregunte viendo lo preocupados que parecían.

Es sobre la tormenta--dijo Abono agitado.

Haber, ya escuchamos a Gothi y dijo que...--me interrumpe Cubeta terminado la oración que quería decirme Abono.

Estoico, la tormenta vendrá en menos de cuatro días....

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Y aquí un nuevo capitulo. Ya sabrán de que se tratara el próximo capítulo, si les gusta la historia dejen su estrellas y comentarios y sin mas me despido.

Cómo Entrenar A Tu Dragón: Recuerdos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora