Mi historia con los Sardellis

Capítulo 6

Me despierto con Pato llorando al lado mio. Estaba en el hospital, me dolía todo y no entendía nada. Traté de hablar pero Pato me calló con una sonrisa hermosa en su cara, me abrazó y me dijo:

- No te voy a dejar, te lo prometo.

En eso entra mi familia y un médico, todos parecían muy preocupados como si hubiese estado a punto de morir.

Lo que pasó es que un auto descontrolado nos chocó de atrás, pero más de mi lado que del de Pato, él sólo tenía unos golpes pero nada malo. Mi cabeza había pegado contra un vidrio, dado que nuestro auto estaba frenado y toda la energía que provocó el impacto la absorbimos nosotros, y perdí la conciencia.

Después de hacerme 1000 estudios, me dieron el alta y me dejaron ir a mi casa. Pato prometió estar conmigo y pasó un mes atento a lo que necesitaba.

Todas las mañanas me despertaba con mensajes preguntándome como estaba, me acompañaba a hacerme los chequeos, me preguntaba todo el tiempo si necesitaba algo. Me trató como a una reina y me empecé a dar cuenta que me gustaba, más de lo normal. Nunca nadie me había tratado así.

Ya llevábamos un mes de novios y cada día era mejor al anterior. Lo quería muchísimo y me sentía muy segura al lado de él.

Una noche me invitó a comer a un restaurante, cuando nos sentamos se acerca una chica haciéndole preguntas de una típica mina celosa, yo no la pude ver bien porque Pato me tapaba su rostro, no entendía nada y él trataba de calmarla ya que estaba haciendo un re quilombo en el lugar.

- ¡No me digas que me dejaste por esta! - gritó la chica.