Este NO es mi Diario |Amor entre Diarios #1|

Capítulo 21. Un giro inesperado

Cuando terminé de leer los dos "capítulos" por así decirlo (ya que este no es un libro como tal, solo es un diario) me quedé pensando en algo, ¿Cómo me vería yo con lentes? me levanté de la cama y entré al baño, cerré la puerta y me vi en el espejo.

—Se que necesito lentes... pero no quiero usarlos.

En ese momento que hable para mí mismo, recordé lo que Hazel escribió:
"Las personas que los usamos lo necesitamos, prefiero poder ver bien y que mi problema no aumente, a no usarlos por querer conservar una buena imagen".

Rayos es como si esa chica supiera que tengo hipermetropía y me estuviera regañando por no usar lentes, es ridículo, ni siquiera me está dirigiendo a mí esas palabras, se las está dirigiendo a ella misma... y a otros.

Salí del baño y me senté en el escritorio, prendí la laptop y busqué información acerca de la hipermetropía, quisiera poder saber más acerca de mi problema, es todo. Encontré ciertas definiciones y datos interesantes.

En el diccionario:
1. nombre femenino
Anomalía o defecto del ojo que consiste en la imposibilidad de ver con claridad los objetos próximos y se debe a un defecto de convergencia del cristalino, que hace que los rayos luminosos converjan más allá de la retina.

En Wikipedia:

2. La hipermetropía es un defecto ocular de refracción que consiste en que los rayos de luz que vienen del infinito inciden en el ojo humano, convergiendo detrás de la retina, formando de esta manera el foco o imagen. Es debida casi siempre a que el ojo es muy corto en su eje antro-posterior.

Fisiopatología

Una persona con hipermetropía tiene problemas de visión a distancias cortas, pudiendo ver con mayor claridad a distancias lejanas. El ojo no puede enfocar objetos situados más cerca de una determinada distancia, denominada punto próximo o punto cercano. En una persona adulta joven sin defectos ópticos, el punto cercano se sitúa a 25 cm del ojo. En un hipermétrope el punto cercano se desplaza a mayores distancias.

Y su tratamiento es:
Se puede tratar mediante el uso de gafas con lentes correctoras convexos o positivas o con lentes de contacto.

Al tener toda esta información en mis manos me di cuenta de lo que realmente tenía, nunca investigué acerca del problema porque pensé que no era nada grave y no era necesario usar lentes pero me he dado cuenta de que es necesario usarlos. Pero el único tratamiento es usar lentes... mierda.

Cada vez que leo el diario de Hazel tengo que alejarlo un poco de mi vista para poder leerlo bien. También cuando veo mi celular me pasa lo mismo pero es peor porque letras pequeñas + luz no es nada bueno.

Cerré la laptop y salí de mi habitación dirigiéndome a la oficina de papá, él se encuentra ahí la mayoría del tiempo.
Antes de construir esta casa papá quiso tener su propia zona de trabajo y por eso se encuentra su pequeña oficina a lado de la sala.

—Hola papá, perdón que te interrumpa —dije abriendo la puerta.

—Oh, no hay ningún problema Jayden, ¿qué se te ofrece? —preguntó dejando de trabajar y prestándome atención.

—Yo... —lo miré pensando dos veces antes de hablar.

—No es nada...

Cerré la puerta detrás de mí y comencé a caminar de vuelta a mi habitación.
Ridículo, ridículo, ridículo, no usaré unos estúpidos lentes.

Rayos...

—¡¡Quiero usar lentes!! —grité volviendo a abrir la puerta y entrando a la oficina de mi padre.

Mi papá me miró muy sorprendido y esbozó una gran sonrisa.

—¡Si! —se levantó rápidamente de su sillón emocionado—. ¡Al fin decidiste usarlos! ¿qué te hizo cambiar de opinión?

Hazel...

—Pues supongo que ya me estoy quedando ciego.

—¡Vamos inmediatamente a comprar tus lentes! —gritó papá emocionado tomándome del brazo y corriendo al auto.

—¡Espera! ¿y mis hermanas? —pregunté estando justo delante del auto.

—Oh si, por poco las olvido —dijo regresando a la casa y abriendo la puerta.

Papá regreso con mis dos hermanas, cada una siendo cargada por él en sus brazos, una estaba atrapada en su brazo derecho y otra en el izquierdo, es realmente fuerte, aunque mis hermanas no pesan taaaaanto.

—Papá... puedo caminar sola —se quejó Emilie.

—¡Tenemos que irnos rápido!, luego te tardas por ver el celular antes de salir de la casa.

—No, no es eso... es ... bueno sí, ya vámonos —dijo rendida.

Las dejó enfrente del auto y ellas se subieron en los asientos de atrás, yo me subí en el del copiloto y mi padre encendió el auto dirigiéndose rápidamente al oftalmólogo.

Cielos, estoy algo nervioso, ¿Cómo se siente usar lentes? ¿Enserio veré mejor? obvio que sí pero estoy algo nervioso, pienso en como me verían mis amigos si tengo lentes, ¿me dirían que me veo mal o que me veo bien? no lo sé pero ya estamos muy cerca de llegar. ¡Ya me arrepentí!

Todo esto por pensar en lo que esa mocosa de Hazel escribió.