-Luis, Luis. Que nos la ha liado. Que está la policía. No, por favor. Luis, no.
-Tranquila, Aitana. Que no pasa nada. Es un simple trámite y sabía a lo que me arriesgaba pegándole.
-Cepeda, te buscan. Tranquilo, que vamos a hacer todo lo posible para que se solucione rápido.
-Gracias, Cosme. Cuida a Aitana, por mí no os preocupéis.
Cepeda salió acompañado por el agente hasta el coche que le llevaría hasta comisaría. Aitana y Cosme salieron detrás de ellos para ir también y estar junto a él. Ya en comisaria se encontraron con Vicente. Cepeda ni le miró. Sabía que no merecía la pena. Que al final todo esto acabaría, de una manera o de otra, pero acabaría. Aitana por su parte fue corriendo en cuanto le vio.
- ¿No puedes aceptar que ya no estoy contigo y dejarnos en paz?
-Aitana, lo hago por tu bien, porque te quiero.
-Vete a la mierda Vicente.
-Si me ha pegado a mi no se lo que puede ser capaz de hacerte a ti.
-No seas ridículo. Ten un poco de dignidad y quita la denuncia y vete de aquí.
-No pienso quitarla. Quiero protegerte. Ese se merece estar aquí. Me ha pegado, Aitana.
-Y tú le hubieses dado también si mi padre no te hubiese parado.
-Si, por que se lo merece. Te ha comido la cabeza para separarte de mí. No te merece, amor.
- ¿Amor? ¿Tú llamas a esto amor? Una persona que siente amor por otra no la manipula, no se aprovecha de ella cuando esta mal. Al revés, la apoya, la cuida, está a su lado. Así que no vuelvas a llamarme así.
-Te estoy cuidando haciendo esto.
Aitana no quiso seguir discutiendo con él. Quería ver como estaba Cepeda. Pero no la dejaron entrar ni siquiera para verse. Cosme abrazó a su hija y en cuanto Aitana sintió el roce de su padre comenzó a llorar.
- ¿Por qué no podemos estar bien? ¿Por qué se empeña en separarnos?
-Tranquila. La vida siempre devuelve todo. Vamos a solucionar esto y si vuelve a aparecer, el que se va a encargar del soy yo.
-Voy fuera un rato, necesito tomar el aire.
El frío de febrero le encogió hasta el último musculo. Pero prefería estar ahí, que saber que Vicente estaba a metros de ella y que no podía ir a ver a Cepeda.
-Aitana, puedes entrar.
Ella entró corriendo hasta la sala donde le tenían. Cepeda se levantó de donde estaba sentado y le abrió los brazos. Aitana se tiró a ellos y el tiempo se paró.
-Aiti, me ha denunciado por el puñetazo que le di.
-Lo sé, me lo ha dicho.
-Perdón por hacerte pasar por esto, solo por mis impulsos.
-Se lo merecía, no digas tonterías.
-Señorita Ocaña, está aquí como testigo. ¿Usted vio la agresión de el Señor Cepeda contra el señor Rodríguez?
Aitana miro a Cepeda. Sabía que mentir en estos casos no servía de nada. Solo empeoraría las cosas. Luis asintió dándole el empuje que ella necesitaba. Ella miró sus manos y las lágrimas empezaron a correr con sus mejillas.
-Sí. Pero Vicente estuvo provocándole.
- ¿Y ha presenciado alguna agresión más?
-No, no ha habido más.
-El señor Rodríguez nos ha presentado pruebas de una primera agresión, llegando a ser incluso peor que esta.
-Eso es mentira. No le ha puesto la mano encima nunca.
-Las pruebas dicen lo contrario. Señorita Ocaña, si hace el favor de acompañarme fuera.
Aitana se levantó y volvió a abrazar a Luis.
-Tranquila, pequeña. Todo va a estar bien. -le susurró en medio del abrazo.
Aitana le agarró las mejillas y le besó. El agente los separó, arrastrando a la chica fuera.
-Estarás contento.
-Pues sí. La verdad que verle allí es lo que quería desde hace mucho.
-Eres un mierdas. Encima te inventas cosas.
-No me he inventado nada. Me pegó una paliza. Me ha amenazado. Me amenazó contigo, Aitana. Eres lo más importante que tengo y no quiero que te pase nada. Mientras más tiempo este aquí, menos posibilidades tiene de hacerte nada.
Vicente sacó su móvil del bolsillo. Puso una foto de él con toda la cara ensangrentada, llena de moratones y con un ojo hinchado.
-Esto es lo que me hizo tu "amorcito". De vedad, ¿crees que te estoy mintiendo? Déjame ayudarte y protegerte. Aléjate de él. El es lo peor que puedes tener al lado. Date cuenta y ayúdame en esto. Por favor, Aitana
Aitana se giró, yendo hacia la mesa de uno de los policías. Este levantó la cabeza para mirarla.
-Quiero hacer una denuncia.

ESTÁS LEYENDO
Camuflados
FanfictionAiteda...una historia de amor camuflada en una preciosa amistad...¿o no tan camuflada? *AVISO* antes de criticar, leer la primera pagina para saber porque hago esta historia.