Capitulo XIV

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—¿Me estas hablando a mi?—la chica morena se señalo—te equivocas, mi apellido es Chopra—le extendió la mano—un gusto conocerte.

Kajol le respondió el saludo, pero se quedo extrañada mirando a aquella mujer, esa cara le recordaba a una amiga de la infancia llamada Meetha, ella había desaparecido a los cinco años y nunca se supo más, a los padres les había dolido tanto que se fueron con su otra hija -a la cual ella nunca la había conocido-.

—¿Conoces a Khan?

—¿A cual de los dos?—se retiro un mechón de cabello del rostro—¿Salman o Shah?

—Shah—reprimió el deseo de preguntarle por Salman.

—Bueno pues esto no llegara a evidencias—sacó unos guantes de látex y una bolsa de plástico—no queremos que nuestro buen policía quede detenido por esto—lo recogió y lo guardo en su bolsa—me ha enviado Bachchan—miro a Devgan—así que esta evidencia será tratada con cuidado.

—No puedes llevártela—la tomo del brazo—es evidencia de un caso de robo de armamentos.

—Yo se que tú no quieres que lastimen a Shah y si permites que esto llegue a manos de Nandu, tú Khan quedara metido en un lío muy grande—retiro su mano delicadamente—así que fue un placer conocerte Kajol Khan—se dio media vuelta y salió del lugar.

"¿Kajol Khan? ¿De que esta hablando?" fue lo único que pudo pensar Devgan antes de que su jefe le hablara.

—Meetha ha recogido tu celular—Bahchan miro a Khan—es la última vez que te salvo de esa.

Khan no respondió ya suficiente tenia con soportarlo todo el camino.

—¿Qué va a pasar si nos descubren?—Shah miro sus manos.

—Somos agentes y si llegaran a descubrirnos nos quitarían las placas y pasaríamos un buen tiempo en la cárcel—su amigo compartía la preocupación.

—Deben de calmarse, nosotros nos encargaremos de que si pasa lago no les levanten ninguna cargo—contesto Amitabh—tenemos amigos muy poderosos que nos deben favores—les guiño un ojo.

Ellos no respondieron, con la adrenalina de antes no se habían puesto a pensar en las consecuencias, ambos suspiraron al mismo tiempo y miraron a los asientos delanteros.

—¿Quienes son ellos?—respondió Ressler.

—Son Daichi y Uehara—miro a Raymond—ellos son japoneses y están aquí para ayudarte—miro a Shah—ellos son capaces de hacer que una herida sane en dos días u horas como máximo—se quito el sombrero—no importando la gravedad.

Todo se quedo en silencio.

"Lo que hace uno por amor" pensó Khan y toco levemente su herida "Si tan solo fuera correspondido, no me daría miedo hacer todo lo que hago".

—Señor—Kajol entró en la oficina de Nandu—me han informado que el agente Khan no se presento porque se ha enfermado—ella no estaba mintiendo, le habían enviado desde las oficinas centrales que había levantando un reporte de ausencia por enfermedad y esta solo estaba pasando el recado.

—¿Enfermado?—se quedo pensando—debe ser de gravedad, él nunca falta por una simple gripa—trato de restarle importancia—gracias—ella asintió y cuando estaba apunto de irse Nandu le hablo—¿puedes ir a la celdas y traerme a Raymond y Amitabh?

—Claro—salió del lugar, trataba de no pensar mucho en lo que había ocurrido hace unas horas, no quería creer que Khan hubiera sido capaz de asaltar el banco de armas del FBI y del SIC.

Incluso después de esta vida || TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora