Estaba todavía embobado por momentos a causa de la medicación, pero al menos al día siguiente el médico me quitó tanto la vía como el oxígeno, así que al menos ya no sentía una aguja en mi cuerpo.
–Buenos días –Saludó Bastián una vez me desperté después de haberme tomado la medicación.
Dado que toda la medicación que tomaba era para que no tuviera ningún tipo de dolor la mayoría del tiempo me las pasaba durmiendo, pero comenzaba a notar mi cuerpo agarrotado de estar siempre en la cama.
–Buenos días –Respondí incorporándome ligeramente en cama.
Rápidamente él me impidió moverme lo máximo posible alarmado por que se me abrieran los puntos o me causara dolor a mí mismo.
–Cuanto más este quieto antes se recuperará.
–Estoy cansado de estar en cama –Reproché intentando convencerlo para levantarme.
–Tengo órdenes estrictas de que no salga de esta habitación –Insistió dejándome claro que no iba a salir de ahí.
–Al menos deja que me incorpore.
Bastián lo dudo bastante antes de ceder a mis súplicas y ayudarme a incorporarme después de darme las gafas.
–Es aburrido estar siempre aquí, cuanto tiempo tengo que estar encamado? –Pregunté justo entrando el médico en la habitación.
–Buenos días Canek –Me saludó con su espeso bigote gris de siempre.
Yo le devolví el saludo y dejé que me hiciera las pruebas de siempre antes de preguntarle cuánto tardaría en poder caminar sin miedo a que se me abrieran los puntos.
–En realidad puedes caminar sin ningún problema mientras que no hagas movimientos bruscos ni ningún tipo de ejercicio, lo que tienes que cuidar de no mover demasiado es el tronco y los brazos, pero caminar no supone ningún problema –Respondió guardando sus cosas en un maletín.
Nada más irse Bastián ni siquiera esperó a que me quejara, directamente me ayudó a levantarme de cama y me llevó al baño, me ducho y después me secó y vistió.
Caminar es verdad que ya producía algunas molestias, pero lo necesitaba, y fue un gusto que Bastian me ofreciera su brazo para que me doliera lo menos posible caminar, pero aún así no salí de la habitación, y me da que no podría hasta que Lord levantara la orden.
Cuando este se despertó Bastian me tuvo que dejar para ir a servirle así que me quedé tomando una infusión y un pastel sentado al lado de la ventana del balcón.
–Buenas noches –Saludó Lord entrando en mi habitación.
Yo le saludé de vuelta y él se sentó a mi lado pasando su mano por detrás de mi espalda.
–Bastian me ha dicho que ya tienes permiso del médico para caminar –Comentó antes de darme un ligero beso en los labios para después recolocarme las gafas.
Desde la operación de alguna forma él había estado mil veces más atento de mí y mucho más comprensivo que nunca, así que me resultaba reconfortante estar a su lado, aunque no dejaba de pensar que en cualquier momento ya estaría perfectamente y él terminaría volviendo a forzarme a cualquier cosa.
–Si, caminé por la habitación y estiré las piernas, lo necesitaba –Respondí notando como mi costado cada vez parecía doler un poco más.
Quité de mi mente mis preocupaciones sobre lo que pasaría una vez me curara y llevé mi mano al costado molesto.
–Te duele? –Preguntó al ver mis molestias.
–Solo un poco –Musité apartando la mano al notar ligeramente los puntos por debajo de las vendas.
ESTÁS LEYENDO
Mascota (Yaoi/BL)
Vampiros"Tenía ante mis ojos a un simple humano encadenado. -Un simple curioso -Pensé para mí mismo antes de dar la orden de soltarlo y mandarlo lejos. Pero se rio como si el mismísimo infierno bailara en su interior, una sonrisa se dibujó en mi cara sabien...